Capítulo treinta y uno.

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-No me besó-dije.

-¿Entonces cómo le llamas al hecho de que él haya pegado sus labios a los tuyos?

-¿Qué?-reí aun más y al parecer a Shawn no le hacía mucha gracia- Cam no me besó, no en los labios, al menos. Fue sólo un beso de amigos.

-Pues no parecían amigos-farfulló.

-Mendes, pareces mi padre-dije, medio molesta por tener que darle explicaciones y la risa se volvió una línea tensa en mis labios.

Shawn suspiró y decidió mejor cambiar de tema, aunque no de tono de voz.

-¿Por qué le diste la rosa a Sharon?-preguntó.

-Porque ella es tu novia, Shawn-dije, aunque me haya dolido rectificar aquello-. A ella es a quien debes de darle rosas, osos de peluche o lo que sea.

-Pero yo te la quise dar a ti-insistió.

-Y yo no iba a decirle a Sharon eso, ¿o sí?-suspiré-. Shawn, ¿por qué te molestas tanto con las cosas que hago? ¿Por qué te importa que le haya dado la rosa a Sharon e inventado una excusa para salvarnos el pellejo? ¿Por qué te molesta si Cam me besa o me lleva un ramo de flores?

Se quedó en silencio un rato, mirando hacia delante con el ceño fruncido y sus labios formando una línea.

-No lo sé-musitó-. Tengo que irme-se levantó rápidamente y caminó hasta su Hybrid negra y subiendo a ella condujo hasta desaparecer calle abajo.

Me quedé sentada allí, sin saber bien qué había ocurrido hace unos minutos; era la clase de desconcierto que hace que te duela la cabeza y sentir cómo si tus pies volaran lejos del planeta Tierra. ¿Por qué Shawn había actuado así? A no ser que… no, claro que no. Eso sería imposible.

Suspiré agobiada, si Shawn había malinterpretado todo, seguro Sharon también y ahora, aunque no tenía ganas de mantener una conversación para mentirle más a Sharon y sonreírle condescendientemente, tenía que pararme enfrente de ella y darle el mismo sermón que le dí a Shawn, el de “Cam y yo sólo somos amigos”.

Me levanté desganada y abrí la puerta del edificio, conduciendo mis pies escaleras arriba hasta llegar al tercer piso y al departamento 312. Suspiré de nuevo antes de entrar, rogándole a Dios tan sólo un poco de ayuda, Sharon podía llegar a ser realmente persistente.

Abrí la puerta girando la dorada perilla y visualicé a Sharon mirando TV desde la cocina; mientras intentaba recalentar en el horno un pedazo de pizza del día jueves. Cuando me vio entrar se giró hacia mí y me sonrió de gran manera haciéndome ver sus dientes medianos y blancos, tan fuertes como un roble.

Traté de sonreír.

-¿Por qué la gran sonrisa? ¿La pizza no se te quemó hoy?-bromeé.

-Aay-se quejó como niña pequeña-. Eso sólo fue una vez y hace ya varios años-dijo y rió, dejando escapar el sonido levemente gutural de su risa.

Me tuve que reír también, recordando aquella escena de la pizza quemada en casa de su abuela, cuando teníamos diecisiete años.

-Bueno, pero no es por eso porque sonrío-me dijo-. Tú tienes algo que contarme-levantó las cejas una y otra vez.

-¿Cómo qué?-me hice la que no sabía.

-No sé, tú dime, algo que tenga que ver con un chico , llamado… ¿Cam?-tanteó.

Puse los ojos en blanco.

-Sharon, ¿cuándo vas a entender que entre Cam y yo sólo hay una bonita amistad? Ya aclaramos el punto y ambos estamos bien siendo amigos.

-Pero yo vi…

-Un beso, ya sé-la interrumpí, de nuevo poniendo los ojos en blanco-. Shar, pero ese no fue un beso en la boca, fue en la mejilla, cerca, pero fue de amigos, nada más-dije.

Se quedó en silencio como por tres segundos y luego exhaló.

-Eres aburrida-dijo y se giró para ver su pedazo de pizza girar en el plato de vidrio, dentro del horno.

-El hecho de que no me guste Cam no quiere decir que sea aburrida-me defendí.

-No, pero desde que llegaste a Venecia, no has salido con ningún chico-me dijo-. A menos que…-se giró de nuevo y me miró, la sonrisa volvió a expandirse por su rostro- ¿Te gusta Jay?-preguntó.

-¿Qué?

-Pues, no sales con más chicos, vas de aquí para allá pero no sin las mismas personas: Cam, Jay, tu amiga la de los Agnelli e incluso Shawn.

Algo me estrujó el estómago cuando dijo su nombre.

EL MANUAL DE LO PROHIBIDO.  »Shawn Mendes Where stories live. Discover now