Cuando eres la perfecta definición del omega imperfecto, pierdes todo pensamiento positivo sobre encontrar al amor de tu vida. Kim Byeongkwan tiene veinte años, un hijo de tres y un lazo roto debido a su ingenuidad ¿Qué alfa querría encargarse de co...
- "Algo. Uno de mis profesores me dejó una tarea gigante, creo que he dormido solo unas dos o tres horas, me siento muerto." - Otra de las cosas que admiraba de nuestra relación actual, después de una semana de esto, era mi capacidad de ya poder hablar con él sin ponerme nervioso o sin sonrojarme como una colegiala. O era muy bien actor o las cosas me estaban saliendo peor de lo que esperaba y mi omega en vez de alejar el sentimiento, a cada segundo conseguía más comodidad con el alfa de Sehyoon.
- "¿Por qué no duermes un rato? Puedes bajar el asiento con la palanca de ahí." - Señaló hacía un lado, pero negué con la cabeza.
- "La Universidad no está tan lejos como para dormir." -
- "Unos minutos de sueño no matan a nadie, Byeongkwan." -
- "¿Sabes? Solo lo voy a intentar para probarte que no es tan simple como acostarse y dormir, uno tarda muchísimo en perder el conocimiento ¿Comprendes? Para entonces ya estarás estacionándote fuera del edificio." -
- "Veamos."-
Aunque me indigné por ese tono chulo y superior con el que me habló, obedecí y moví completamente la palanca del lado del asiento del copiloto, logrando que este caiga hasta tener contacto con el asiento de atrás del vehículo. Suspiré, acomodándome de lado en el espacio, cuando sentí una de sus suaves manos tener contacto con mi muslo, tensándome por completo.
- "¿Sehyoon?" -
- "Duerme, Byeongkwan." -
El suave movimiento que iba y venía sobre la tela de mi pantalón fue suficiente, obedecí, cerré mis ojos y me entregué al gran sueño que me consumió en cuestión de segundos. Su mano se sentía bien, todo lo que tuviera que ver con Sehyoon me transmitía una calidez y una tranquilidad increíble. Ronronee, mi omega ronroneo y ambos estuvimos de acuerdo en que Sehyoon debería arrullarnos todas las noches.
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Caminaba por los pasillos de la Universidad con mucha tranquilidad, no quería admitirlo, pero después de las palabras de Sehyoon aquel día, todos los omega me miraban con respeto e incluso los profesores ya no me llamaban para que responda en público, no era algo que me gustara, se portaban como si fuera el nuevo rey de la Universidad cuando no había cambiado, yo continuaba siendo el mismo omega imperfecto del que todos hablaban mal antes, no he cambiado solo por Sehyoon, sigo siendo yo, tira de hipócritas.
- "Hey, Kwan." -
Oh, y si vamos a hablar del más hipócrita de los hipócritas...
- "Hola, Jun." - Mostré mi mejor sonrisa, aunque estuve seguro que él no era tan idiota para no notar que no me agradaba su cercanía.
- "¿Qué hay? ¿Te puedo acompañar a la siguiente clase? Tenemos curso de semiótica visual juntos." - O quizás sí.
