¿Que es la felicidad?

El sonido de la guerra Parte 1

Paz

Era una palabra desconocida en estos tiempos. Y el clan Wen se había encargado de eso. La destruyo y puso al frente del mundo una única palabra. Hasta los más pequeños la conocían. Y esa era "miedo"

Con una fuerza y un ejército arrasador, el clan Wen se encargaro de impartir terror en todo el mundo de la cultivación. No había ni un solo lugar que no fuera afectado por esta guerra. Nadie se salvaba. La mayoría vivía bajo el temor de perder su casa o su familia en cualquier momento.

Solo los valientes se enfrentaban contra los Wen. Y esa era la resistencia. El ejército de GuSu Lan era lo único que se interponía entre los Wen y el mundo. Cada vez crecía más. Miles de personas se unían con la esperanza de una venganza contra aquel despiadado clan que se haba encargado de arrebatarles todo.

Y con el pasar del tiempo y el crecimiento de dicha resistencia. Luchar ya no era una opción. Todas aquellas familias que necesitaran protección debían mandar a un miembro de su familia como tributo para ganar la guerra. No importaba tu edad, siempre y cuando fuera hombre se te enviaba como cerdo para el matadero al frente de batalla.

Y eso es algo que Wei Wuxian estaba por aprender.

-Mi señora. Ha llegado una carta de la resistencia.

Los sirvientes se callaron y miraron con horror el sobre dónde provenía la carta. Inclusive Madam Yu se tensó. Había llegado el día. Una vez que la carta llegaba a tu hogar era imposible ignorarla.

-Esos malditos, quieren destruir mi familia. ¿Cómo esperan que los envié a su muerte?-reclamo furiosa Madam Yu.

-Mi señora. ¿Quiere que envié una carta a nuestro señor Fengmian para que regrese con sus hijos cuanto antes?

MadamYu negó. -Tiene que haber otra opción.

Y como si fuera obra del cruel destino. El golpe de tasas contra el suelo resonó en la habitación.

Madam Yu miro en aquella dirección. Encontrándose con aquellos ojos producto de un joven al que Madam Yu odiaba con todo su corazón.

Siempre había creído que ese chico no era más que un estorbo. Hasta ahora.

Tal vez Wei Wuxian podía servir de algo. Después de todo era su malnacido hijo adoptivo. El bastardo podía servir de algo.

Y sería mejor aprovecharlo antes de que Jiang Fengmian regresara.

*****

Wei Wuxian llego sin nada y así se fue. Como un perro cualquiera y sin valor fue sacado a patadas y echado en una carreta llena de estiércol, en la que tendría que vivir hasta llegar a la sede de entrenamiento del sur de GuSu Lan.

No es que ha Wei Wuxian le importara. Había vivido en peores condiciones cuando sus padres  murieron. Además lo que fuera que le deparara el destino no podía ser peor lo que tuvo que pasar.

Y así Wei Wuxian partió al sur de Could Recess. Atravesando pueblos vacíos, cabañas llenas de pobres. Pisando decenas de cadáveres que la guerra había dejado a su paso.

Tirados como perros, sin nadie que llorara su perdida. Nadie los quiso, nadie supo cómo vivían, nadie supo cuando se fueron. A nadie le importo. Se olvidaron de ellos.

"¿Así será mi destino? ¿Seré igual que ellos?" se preguntó " Simple carne para el matadero?"

Wei Wuxian sacudió la cabeza, intentando alejar aquellos viles y deprimentes pensamientos.

No. Él no se dejaría pudrir en el olvido. En ese momento Wei Wuxian se prometió ser alguien. Dejar al menos una marca de su mísera existencia. Si iría a la guerra entonces se convertiría en el mejor soldado.

Y al contrario que la gente rica y sin escrúpulos, que los fuertes y temidos. El usaría su habilidad para ayudar al más débil. El seria el apoyo de los débiles que él nunca tuvo.

****

EL sonido del Guquin marco el inicio de entrenamiento de los nuevos reclutas en el sur de GuSu Lan. Miles de reclutas, ya sean, niños, jóvenes o ancianos. Todos posicionados en el campo esperando ser asignados a su nuevo comandante.

El comandante Lan Xichen.

Todos se sorprendieron al escuchar aquel nombre. Ninguno espero que su comandante seria alguien directo de la familia principal Lan. Inmediatamente todos empezaron a susurrar teorías y rumores sin sentido.

Wei Wuxian los ignoro y puso atención en las palabras de su nuevo comandante. Era acerca de luchar para conseguir la paz y la igualdad. Luchar por sus hermanos y quitar las cadenas de todos los oprimidos.

Realmente era un buen discurso. Pero lo que más impresiono a Wei Wuxian fue la apariencia de su nuevo comandante. Era sumamente bello. Casi tallado por los mismos ángeles. Wei Wuxian no creía que pudiera haber alguien más hermoso que él.

Que equivocado estaba.

Cuando el discurso termino y todos comenzaron a dispersarse. Wei Wuxian casi fue aplastado por los nuevos reclutas. Tropezando debido a los empujones de la gente, Wei Wuxian chocó, casi a punto de caer al suelo, de no ser porque los brazos de un hombre de túnicas blancas lo atraparon justo a tiempo para evitar que cayera.

Su apariencia era casi igual que la del comandante Lan Xichen. Pero no era él. A diferencia del comandante, él no portaba una sonrisa amable. Su cara era tan fría como el hielo.

Él era el hombre más hermoso del mundo.

El tiempo pareció estar congelado. Sus miradas nunca se apartaron. Y entonces un dolor en el pecho de ambos y una pequeña luz irradiando sus cuerpos apareció.

Y entonces Wei Wuxian lo supo.

El hombre frente a él era su alma gemela.

La única persona que nunca lo rechazaría.

¿Verdad?

Notas del autor

Espero que este capítulo haya sido de su agrado. Diganme que piensan.

No tengo fecha de actualización exacta pero les aseguro que cada capítulo valdrá la pena.

No sera una historia con muchos capítulos, por lo que me asegurare que cada uno sea lo mas completo posible.

Gracias por leer.

Hasta la próxima actualizacion❤