El abandono de Harry Potter

Capitulo 10: Trol Y Partido.

Harry había oído quejas de casi todos los profesores sobre el pelirrojo. McGonagall le contó de mal humor que su hermano no podía transfigurar un fósforo en una aguja después de cuatro días de intentarlo. El profesor medio-goblin, Filius Flitwick le había dicho decepcionado que Charlus era incapaz de realizar un encanto de levitación, lo que hizo que Daphne, que estaba sentada al lado de Harry en clase en ese momento, se cayera de la silla y se echara a reír histéricamente. Pero el que más cosas tenia que decir era el profesor de pociones ... bueno vamos a decir que el altercado de la primera semana de clase fue el mas suave hasta la fecha. Snape estaba asqueado por Charlus Potter y su arrogancia que era idéntica a James Potter. Harry tuvo dificultades para no sonreír de oreja a oreja cuando Theodore Nott le contaba como su jefe de Casa humillaba y ridiculizaba al gordinflón cada vez que soltaba algún comentario o se comportaba como el arrogante de siempre. Gryffindor había perdido casi 150 puntos en casi 2 meses porque Charlus no sabia mantener la boca cerrada.

Harry en cambio, era la definición misma de excelencia, en cada una de sus asignaturas troncales siempre daba resultados perfectos, Transfiguración, Encantamientos, Herbología, Pociones, Astronomia, Historia de la Magia y Defensa Contra las Artes del Oscuras.

Aunque en esa ultima tenia problemas con el profesor. Quirinus Quirrell era un inepto como profesor, lo que sorprendió mucho a Harry teniendo en cuenta que el año pasado era el profesor encargado de los Estudios Muggles y Daphne nunca se había quejado de él. Por suerte para él, estaba muy por delante de los estudiantes de su curso y no le importaba mucho que su profesor fuera incompetente, pero había un suceso que le molesto mucho y le hizo sospechar. Durante una de sus clases, el profesor de Defensa había intentado entrar en su mente pero en cuanto Harry lo detecto, este se detuvo y actuó como si nunca hubiera sucedido.

Harry salio de sus pensamientos cuando recibió un codazo en él costado. "Uff"

"Despierta, estas en la luna." le dijo Blaise agarrando un pez y lo lanzó al lago negro. Un tentáculo gigante salio disparado desde el agua para coger el pez y volvió a hundirse tan rápido como emergió.

Harry estaba en el muelle con Blaise y Sia junto con el resto de su clase. Estaba en estos momentos en una de sus 3 clases optativas, Cuidado de Criaturas Mágicas, las otras dos siendo Runas Antiguas y Aritmancia. El profesor Silvanus Kettleburn, un hombre de pelo largo con una barba gris a quien le faltaba una mano y las dos piernas, estaba circulando alrededor de los estudiantes sentado en su silla flotante mágica mientras iba explicando las diferentes características del calamar gigante que habitaba en el lago negro.

Harry miro mal a su mejor amigo pero sonrió en cuanto vio a su novia pegarle una colleja al mago de origen italiano. "Idiota." le dijo la rubia.

"¡Oye! Que no le he pegado tan fuerte." se quejo antes de volver a mirar al ojiverde. "¿En que piensas?" pregunto.

Harry negó con la cabeza. "En nada, solo recordando como a ido el curso hasta ahora." dijo con una sonrisa.

Blaise entendió perfectamente a que se refería y sonrió. "¡Oh si! Tu hermano ya no es tan increíble como todos creían."

Sia resoplo antes de mirar a su amor. "Sigo diciendo que eres adoptado, me niego a creerme que esa bola de grasa esta emparentada contigo."

Harry soltó una risita antes de acercarse a la chica y darle un casto beso. " Por desgracia, tengo solidas evidencias de que compartimos la misma sangre por lo que estoy seguro que estamos emparentados aunque no me guste." dijo amargo antes de coger otro pez y lanzarselo al calamar.

La clase continuó hasta las 20H00 de la noche, el profesor Kettleburn se despidió de todos ellos antes de que regresaran todos al castillo un poco más rápido que de costumbre, después de todo hoy era 31 de Octubre, Haloween, pero lo más importante, hoy cumplían 10 años desde la caída del señor oscuro Voldemort. Era un día de alegría y para celebrar … al menos, para la mayoría.