-¿Ves lo que digo?-volteó para irse.

-¿Me dejaras aquí?-Volteó a verme.- ¿Sola?-se volvió a acercar.

-Es lo que tú quieres.

-No Justin.-negué con la cabeza mientras las lagrimas querían salir. Lo había perdido.

-¿No es lo que quieres?-me preguntó.- Volví a negar con la cabeza.- Tu me alejaste de ti.-afirmó acariciando mi mejilla.

-Esa no era mi intención.

-La verdad es mi culpa.-afirmó con melancolía en sus palabras.- Yo fui el estúpido que arruino nuestra amistad pidiéndote que fuéramos “amigos con derecho”. Pero me enamoré y yo no puedo controlar eso.-dijo frustrado.

-Justin.-lo llamé para que me mirara.- Si yo no hubiera aceptado tampoco hubiera pasado. No es tu culpa.

-Si lo es. Porque yo me enamoré, no tú.

-Si me enamoré.-dije casi en su susurro.

-¿De quien?-se acercó más a mi.- ¿De Christian?- sonaba algo sarcástico.

-No.-murmuré casi al borde de desfallecer. Necesitaba sus labios sobre los míos.- Justin tengo que decirte algo que ya no puedo guardar más.-le dije mientras intentaba alejarme de el para hablar. Tan cerca no podría decirle bien las cosas y como de costumbre lo arruinaría.

-¿Qué me dirás ahora?-dijo con pesadez.- Otra escusa ¿verdad?

-No.-dije firmemente.- Te diré lo que mi corazón siente.-me observó atentamente.-La verdad nunca te tomé como un amigo en serio.-dije como para empezar.- Siempre quise tener algo más contigo. Pero pensé que no existiría la posibilidad. Entiendo que en este momento me odies, porque yo también me odio.

-No te odio.-dijo claramente.

-Bueno, si me odiaras lo entendería.- aclaré.- A lo que quiero llegar es que siempre hay alguien o algo que me interrumpe y créeme que he tratado de decírtelo desde hace más de una semana.-me excusé.- Pero nunca se como decírtelo, no se como expresarme.

-¿Entonces?-me miró atento. En sus ojos había un brillo especial que nunca había notado en el.- ¿Qué quieres decirme? 

-Justin… yo te amo.-dije casi en un susurro. Su mirada se ilumino tiernamente. Unas lágrimas que necesitaban salir cayeron por mis mejillas.- Y mucho.-me abrazó.

-______ Yo también te amo.-dijo mientras me aferraba a el.

Era el momento más tierno de mi vida. Justin y yo, solos, abrazados, amándonos mutuamente, nada podía arruinarlo.

-¿Por qué no me lo dijiste antes?-dijo acariciando mi mejilla con suma suavidad.

-Es que siempre había algo que no me dejaba decírtelo.-me excusé.

-Entonces esperaste a que me enojara para decirlo.-entre cerró los ojos.- Podrías habérmelo dicho cuando estábamos en tu cama.

-¿Crees que me siento muy comodísima cuando te tengo entre las piernas?

-Deberías ir acostumbrándote.-dijo entre risas. Golpeé levemente su brazo.

-¿A que te refieres con eso?-dije acercándome a su boca.

-Ya veras princesa, ya veras.-dijo antes de besarme con ternura infinita.- te amo.-susurró sobre mis labios.

-Yo también te amo.-le dije con una sonrisa en mi rostro.

-Estuve esperando tanto tiempo para escuchar eso.-me dijo antes de volver a besarme con pasión.

-Justin…Espe…ra…-dije entre besos.- Jus…tin…en…ser…io.-dejó de besarme.

Amigos con derecho (adaptada)Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt