El huevo de la bestia - Parte 1
Hace mucho tiempo hubo un gran enfrentamiento entre cuatro bestias místicas: Thurus el lobo de las tempestades, Grutór el dragón del tiempo y espacio, Terrá la serpiente marina y señora de los mares y Teimór el ave del equilibrio.
Terremotos, tsunamis, tormentas, ventiscas de hielo arrollaban todo a su paso y el mundo sufría las consecuencias, pero durante esta crisis que vivía el planeta, emergió entre los ciudadanos un joven guerrero con un inmenso poder espiritual, que logró controlar a las cuatro bestias surgiendo así un nuevo mundo conocido como: Tierra de bestias.
***
-¡Owen, pasas todos los días leyendo el mismo libro! - Exclama la Señora Pautí.
La madre de Owen la señora Pautí, siempre interrumpe a Owen en la mejor parte de la historia
- Necesito que vayas al mercado y me compres unas frutas - continúa diciendo su malgeniada madre.
- ¡Ahora que termine de leer! - responde Owen
En el momento en que lo dijo Owen supo que había puesto su vida en riesgo. Debajo de la mesa unos enormes ojos lo miraban de forma intimidante, mientras escucha un pequeño susurro. Shhhh...
-¡Teli ataca! -ordena su madre.
- ¡Espera! ¡Teli no! - grita Owen
El animal atrapo a Owen y lo enrolló con su enorme cuerpo, sus grandes colmillos tocaban el rostro de Owen, mientras le hacía cosquillas con las plumas en forma de abanico de mano en la punta de su cola.
-Demasiado tarde. -Se burla su madre.
Es su bestia guardiana de dos metros de largo.
- ¿Por qué eres tan cruel? - Replica Owen
La serpiente lame el rostro de Owen hasta dejarlo empapado de baba.
-Tú mismo te lo búscate Owen. -Sonríe su madre- ¿Irás a comprar las frutas?
- ¡Está bien! - responde Owen -¡Quítame a Teli de encima!
Su progenitora solo hace un gesto y la criatura se aleja de él.
Owen se prepara rápidamente, se cambia, amarra sus zapatos y sale hacia la plaza Peiter.
El lugar se encuentra un poco retirado, lo que significa que será un largo recorrido... Pero Owen no se desanima por eso, siempre se distrae al observar a las bestias guardianes al lado de sus amos, algunas son criaturas con forma de roedor y alas en sus espaldas, otras un poco más intimidantes como Teli sacando sus lenguas, monos con manos de gato, saltan y bailan para sorprender a sus maestros...
Owen piensa que ya falta poco para cumplir 15 años y así conseguir su propia bestia guardián, ¡Por fin uno de sus sueños se hará realidad!
En el país de Peiter: existe un decreto creado por la fundadora Ana Peiter que dice: " Todo ciudadano a la edad de 15 años tiene el derecho de conseguir un huevo de bestia".
Después de un largo recorrido Owen llega a la plaza. El lugar es muy animado, lleno de personas de todo tipo que caminan al lado de sus compañeros haciendo compras, escogiendo entre los diferentes tipos de artículos que se venden en las tiendas... Los nobles siempre llegan en sus carruajes; con prendas elegantes, joyas en sus dedos y con una expresión de odio hacia los menos privilegiados.
Owen empieza a sentir como sus piernas se duermen, no se acostumbra a la caminata, los Camino de Peiter parecen un laberinto.
Recuerda la primera vez que llegó a esta zona, al ver una criatura soltó la mano de su padre y se perdió en las calles de Peiter. ¿Cómo podía olvidarlo? Todo su cuerpo temblaba, hacía frio y era de noche, si no hubiese sido por el señor Limpi seguiría sentado al lado de una lámpara llorando por sus padres.
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TIERRA DE BESTIAS
FantasyHace mucho tiempo hubo un gran enfrentamiento entre cuatro bestias místicas: Thurus el lobo de las tempestades, Grutór el dragón del tiempo y espacio, Terrá la serpiente marina y señora de los mares y Teimór el ave del equilibrio. Terremotos, tsuna...
