Quarterback

Capítulo 2.

- ¡Kia! -gritaron mi nombre ya que en el pasillo era difícil poder mantener una conversación decente. Busqué a la voz, y junto a una taquilla rota se encontraba Ava, moviendo la mano para que me acercara hasta ella. - ¿Y bien?

Quería saber que había pasado con Wade.

La verdad es que era difícil fingir ser una gran zorra, que solo le importaba su físico y querer ser la reina del baile. Yo antes era una débil muñeca de porcelana, que el mismo quarterback había roto.

Así que todo se suponía que iba a ser más fácil de lo normal.

Dulce y sabrosa venganza. Ese era el sabor que tenía en ese mismo instante en mi boca. Lamí el caramelo, dejando que se derritiera sobre mi lengua.

Miré a Ava. Crucé los brazos y con un movimiento de cabeza le hice saber que todo había ido bien. Supuestamente era una chica nueva (o al menos ante los ojos de Wade Tucker era la chica nueva). La primera impresión fue buena. El muy descarado intentó apañárselas para tocarme el trasero.

-Ya existo en su mundo. A diferencia de la última vez -me acordé del baile de otoño-, que ni siquiera sabía mi nombre. Ava, ¿qué tengo que hacer ahora? Tengo poco acceso a él, y más sabiendo que su «perfecta» e imbécil novia lo acecha cada dos por tres. -busqué a Doris. - ¿Y tu hermana?

Ella bostezó antes de responderme.

-Está en clase. Dicen que este año hay un profesor muy guapo en química.

Ambas reímos. Daba la casualidad que Doris era una loca por la química, su obsesión giraba alrededor de esa asignatura. Así que profesor guapo + química era igual que estar en el mismísimo cielo para ella.

-Al menos no se meterá en este lío. Y tampoco quiero que tú lo estés -necesitaba que mis amigas no se involucraran demasiado. -Lo que tengo en mente es peligroso. Seguramente si me descubren acabe expulsada.

- ¿No vas a contarme tu plan?

-Ya sabes una parte -guiñé un ojo. -La otra prefiero mantenerla en secreto.

-Kia...

-No insistas.

Un grupo de chicos pasaron por nuestro lado. Nos quedamos calladas, esperando a que pasaran. Uno de ellos era el mejor amigo de Wade, y precisamente se quedó mirando a Ava.

-Es guapo.

-Es otro muñeco títere de Tucker -sin haber escuchado sus nuevos planes, sabía que buscaban otra víctima para ese año; parecía que Ava era la siguiente. No iba a permitirlo. -Los guapos siempre tienen un lado malvado.

Ella se giró, apartándose de la taquilla rota para abrir la que estaba al lado.

Cogió un par de bolígrafos, junto a una nota que me tendió.

Leí el nombre en alto.

(Andrew). Aula 254.

La clase 254 llevaba años cerrada.

- ¿Quién es?

-Él te podrá conseguir información de Wade Tucker. Su horario de clases. Las horas de entrenamiento. Incidencias. Todo lo que puedas reunir de él -sonrió-, no dudes en memorizarlo. ¿Quieres hundirle, no? Empieza a robarle la popularidad.

Decirlo era fácil. Lo difícil era dejar a Wade en la sombra.

Cogí el trozo de papel garabateado, y salí en busca del chico que me ayudaría con algo de información.