I

446 31 28
                                    

- ¿Estas emocionado YuGyeomie? -le pregunto con dulzura su madre, emocionada igual que el menor.

El pequeño de siete años, cabello obscuro se encontraba con su uniforme de primaria, seria la primera vez que iría, con su mochila de super héroes, domando los cordones con sus manos, dando pequeños brinquitos, entusiasmado...

- ¡Si, mami! -fue su respuesta, corriendo hacia su madre, abrazándose a las piernas delgadas de la mujer, haciéndola sonreír mas grande, su hijo estaba bien y feliz, lo que más le importaba...

- ¿Listo para irnos? -le volvió a preguntar, a lo que el menor sonrió enorme, asintiendo con su cabecita, para después tomar la mano de su madre y salir de casa...

...

-Cuídate mucho mi niño -su madre se despedía de su hijo, hincada, acariciando todo el rostro del menor, el cual reía por algunas cosquillas provocadas por las suaves acaricias de su madre... -Cualquier cosa, la maestra te ayudara, ella sabe -le comento, a lo que el pequeño pelinegro asintió.

-Esta bien mami -le sonrió, para después acariciar la mejilla de su madre... -estaré bien, ya verás -le volvió a sonreír, haciendo que su madre sonriera, aguantando sus ganas de llorar, su hijo era un niño muy valiente y fuerte.

Una linda joven se acerco a ellos, ambos mirándola, el pequeño sonrió, para después tomar su mano, haciendo que la madre mordiera un poco su labio inferior, teniendo un poco de miedo...

-Estaré bien mami -volvió a decir el menor, despidiéndose con su manita, haciendo que su madre se levantara, sonriendo orgullosa de su pequeño.

-Yo se que si... -susurro para ella misma, yéndose, tenía que trabajar para que a su hijo no le faltase nada...

...

YuGyeom, estaba muy feliz, hacer las pequeñas actividades le eran divertidas, a demás de que pudo hablar con mas niños, en casa no tenia ese tipo de interacción...

La hora del receso había llegado, YuGyeom, a pesar de que no tenia hambre, comió lo que su madre le había hecho, no podía pasar su hora de comida, y lo sabia perfectamente. Sentándose en una banca sola, no le molestaba para nada estar solo, lo que estaba en su vasijita, se lo acabo, al igual el agua que llevaba, solo quedaba aquella manzana verde, la tenia en su manita derecha, iba a morderla, pero... su vista se fue a un niño que pasaba en frente de él, lo miraba confundido, aquel niño parecía molesto, yendo atrás del salón, o eso parecía, YuGyeom, miro a sus lados, los demás niños jugaban, otros comían, al parecer era el único que había notado al niño enojado...

Tomo sus cosas, la vasija, la dejo en el suelo de su salón, así solo nada más la recogería después. Siguió al niño por donde había visto irse, no estaba atrás del salón, solo a su lado, donde estaba ese pequeño pasillo, no trato de ocultarse, solo camino como si no importase su presencia, aquel niño estaba sentado en el suelo, mirando un punto fijo, con su rostro notable en un enfado, YuGyeom, ladeo un poco su cabeza, confuso por ver a aquel chico...

-Mmm... -fue el sonido que escucho del niño, el cual lo miraba, asiendo que el menor notase dos pequeños puntos en su ojo izquierdo, ojos rasgados, pequeñitos, muy bonitos para él, YuGyeom, no sabía muy bien decir como era que el menor lo mirase...

-Hola -saludo tímido, llevando sus manos a su espalda, ocultándolas, junto con la manzana, que siempre llevo con él.

El niño miraba extrañado a YuGyeom, no le resultaba conocido y era raro que le hablase...

-Yo...

- ¡YuGyeomie! -el grito preocupado de la maestra lo hizo callar, guiando un poco su cabeza al sonido de su llamado...

Te RegaloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora