Asesorías [Shinsou]

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—¿Ayuda en matemáticas?, ¿Enserio?—___ miraba incrédula a su compañero, no se podía creer lo que le estaba diciendo.

Agitó ligeramente la cabeza y sus manos, aun procesando la información en su cabeza.

¿Shinsou Hitoshi le estaba pidiendo ayuda en matemáticas?

¿Qué demonios?.

—Déjame ver si entendí: ¿quieres que yo te de asesorías?—Se señaló así misma—¿De matemáticas?

El de hebras moradas gruñó—Sí, quiero que me ayudes.

___ aun lo miraba dudosa, le extrañaba de él, pues era un poco más listo que ella en algunas materias.

—Habla de una vez, sino para pedirle ayuda a otro—La voz de Hitoshi la trajo de devuelta a la realidad, se apresuró a negar con un movimiento de manos y sonrió levemente.

—No, no, con gusto te ayudo—Aceptó—Después de clases estoy libre, estudiaremos en mi dormitorio. Procura llevar tus libros y cuadernos.

Shinsou asintió ante las indicaciones de la chica de ojos (c/o).

—Bien, iré a terminar de comer. Nos vemos más tarde—Agitó ligeramente su mano en signo de despedida.

La observo ingresar con total calma al comedor en donde estaban los demás estudiantes, al perderla de vista, un gran suspiro abandonó su boca, parecía como si lo hubiera estado reteniendo desde hace mucho.

—Soy patético..—Murmuró para sí mismo al sentir sus mejillas ligeramente calientes.

...

Shinsou había comenzado a tener una especie de "contacto" con ___ desde que la vio en el Festival Deportivo de U.A. Esa había sido la primera vez que la había visto y conocido pero el verla se había hecho más frecuente cuando ella se unió a las clases y entrenamientos privados que Aizawa le daba a él.

¿Cómo alguien de aspecto torpe y angelical (según él) poseía un quirk digno de temer?

Oh si, el quirk de la peli-(c/p) era algo especial y oscuro: una sola mirada bastaba para que todos tus miedos hicieran acto de presencia. Desde criaturas de aspectos espeluznantes y atemorizantes, hasta demonios y pesadillas.

Era cuestión de una mirada y un simple chasquido para que tus peores miedos cobraran vida, fuera en forma física o en una ilusión. Aterrador, ¿no?.

Lástima que la chica fuera todo lo contrario a su quirk.

Fue cuestión de entrenamientos, combates, charlas y clases para que Shinsou comenzara a mostrar una especie de interés por ella.

Pero, casi no había contacto o interacción entre ellos más que en los entrenamientos con el pelinegro, pues ni siquiera eran del mismo curso. Y bueno, Shinsou tampoco era muy hablador y sociable que digamos.

Quería acercarse un poco más a ella, tener un poco más de contacto pero ahora se sentía como un completo idiota al decirle que le diera asesorías en una materia que perfectamente el dominaba.

Una cita o haberla invitado a comer habrían funcionado, pero bueno, hablamos del chico que tenía un aura de muerte a su alrededor.

Ahora cruzaba los dedos, esperanzado con que su "cita" de estudio no saliera mal.

...

Observaba con atención la habitación de la chica, mirando detalladamente cada decoración del lugar: desde posters de algunas bandas y héroes, hasta fotografías de ella y los de su clase.

—Pues no estás tan mal—Posó su mirada en ella y en el examen de diagnóstico que le había aplicado—Solo sacaste 4 problemas mal de 20.—Acaricio su mentón—¿Seguro que necesitas asesorías? Vas perfectamente bien.

Mierda.

—Se me dificultan algunas cosas—Desvió la mirada—Derivadas, cosas de cálculo.

—Pero aquí sacaste bien esos problemas, solo te equivocaste en uno.

—P-pero es que si necesito tu ayuda.

—¿Pero en qué?—__ alzó una ceja.

Podía sentir sus ojos (c/o) observarlo pero el evitaba esa mirada a toda costa prefiriendo mirar los cojines y peluches de animalitos que había en la cama de la fémina.

Parpadeo dos veces, ¿acaso eso era..

—¿Te gustan los gatos?—Por fin se dignó a mirarla—Se nota que sí, te brillaron los ojitos al verlo.

Y siento que van a comenzar a brillar también si te veo a ti.

—Algo así—Murmuró.

___ sonrió entusiasmada, dejo el examen en la mesa y se paró. El peli morado la siguió con la mirada hasta su cama, en donde tomó el peluche que había llamado su atención.

—¡Que genial! A mí nunca me dejaron tener un gato en casa pero creo que si me porto bien aquí me dejaran tener uno—La emoción con la que hablaba le estaban provocando ganas de sonreír—Bueno, quiero creer.

—Te puedo llevar a un albergue o a uno de los callejones de aquí, hay demasiados y puedes darles de comer.—Este era un mal momento para que sus mejillas comenzaran a tomar color.

Indirectamente la había invitado a un lugar.

Casi cae de espaldas, el repentino agarre de la fémina en sus manos lo había sorprendido. __ lo miraba con una gran sonrisa, el sonrojo en su rostro la hacía ver adorable.

—¿Enserio?—Asintió levemente—¿P-podríamos ir mañana? C-claro, si tú quieres.

Lentamente deshizo el agarre, avergonzada de su repentino acto.

—Claro.

Su respuesta pudo haber sido calmada y normal pero por dentro su corazón latía como loco. Esa aura de muerte estaba comenzando a tener color.

—¡Genial!

Si desde un principio hubiera dicho que le gustaban los gatos. Aunque ahora estaba feliz, ahora esperaría que todo saliera bien y así poder estar más cerca de ella.


*

Siento que me quedo algo cutre, no se que piensen ustedes.

No olviden votar y dejar su opinión respecto al one-shot.

Nos vemos en el siguiente one-shot <3

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