-Creo que te dije que no puedes comer chatarras.- Cada paso que daba hacia Taehyung, este retrocedía, hasta chocar contra la fría pared del lugar.
Alzó el mentón del menor.- ¿Entendido?- Taehyung asintió con miedo.- Ahh, pero no creas que te salvarás tan fácil.- Se acercó a su oreja y susurró- A la habitación, ahora.-
Dejó un espacio libre a Taehyung para que saliera, y este como todo un sumiso acató las órdenes.
Salió de la cocina, y se dirigió a la habitación, mientras Jungkook lo seguía por detrás.
Cuando ambos entraron, el azabache cerró la puerta, y fue al closet. De todos los cinturones que tenía, tomó el más grueso, y se sentó en la cama.
-Ven, bonito.- Dibujó una sonrisa ladina en su rostro. Algo dudoso, Taehyung se acercó al azabache -Eso es, acércate.- Su sonrisa se transformó en una bastante pícara y lujuriosa.
Taehyung se sentó en el regazo de Jungkook, y este rápidamente lo tomó del brazo y lo acercó hacia el -Ese culito te va a quedar bien rojo.- Decía jugando un poco con el cinturón en sus manos. En acto seguido desprendió el boxer del castaño y lo puso boca abajo.
Taehyung gimió ante el acto. Y con un fuerte latigazo en su nalga derecha, el mayor provocó que un gemido, mejor dicho, un grito, saliera de los labios del menor.
-J-Jungkook...b-ba-basta~- Movió sus caderas en un intento nulo de zafarce. El mayor, al notar tal acción, agarró fuerte las muñecas de su contrario. Forzó el agarre al cinturón, lo alzó hacia arriba y pegó otro latigazo en una de las nalgas del castañito.
-Ngh~
-Joder, Taehyung, eres tan caliente...~- Este se retorcía de dolor y placer bajo los brazos de su pareja.
Otra azotada; el menor irguío su espalda y soltó un grito que excitó más al mayor.
-No necesito esto.- Lanzó el cinturón a cualquier parte de la habitación. Como dicen por ahí, las cosas solo salen bien cuando las haces tu mismo.
Y así fue, empezó a repartir varias nalgadas en el trasero del menor, mientras este se empezaba a tornar cada vez más carmesí.
Taehyung era una mar de gemidos. Se removía a veces pero con Jungkook agarrándolo de tal forma era imposible que pudiera soltarse. Al final se dio por vencido dejándose castigar.
El castaño ya tenía un problemita serio y Jungkook sonrió al sentir ese pequeño bulto en sus piernas. Dio por finalizado el castigo.
Satisfecho, contempló su hazaña y pasó su lengua por la comisura de sus labios, relamiendolos.
El azabache soltó su agarre de las muñecas de Taehyung, y con delicadeza subió su boxer.
Tomó la mano del menor y lo ayudó a pararse mientras veía como el castaño llevaba una de sus manos a su trasero, acariciándolo levemente.
-Eres malo...~-Decía mientras se sobaba las nalgas y miraba al más alto cruzado de brazos y con una sonrisa ladina en el rostro.
-Eso te pasa por desobedecerme...~
-No volveré a hacerlo.- Agitó sus manos en señal de molestia.
-Esa actitud no es de un niño bueno...~- Se acercó más a Taehyung hasta llegar al escritorio donde sentó al castaño en la pequeña silla.
Se acercó a su rostro.- Dímelo de nuevo.- Su ronca voz hizo que Taehyung se estremeciera.
-N-No volvere a-a hacerlo...- Dijo casi en un susurro que Jungkook logró escuchar debido a la cercanía.
-Sigue...- Taehyung se sonrojó. -No volveré a hacerlo... Daddy...~- Jungkook sonrió al escucharlo, y besó el hombro del castaño. Lo tomó de la mano nuevamente ayudándolo a pararse.
-Espero que no mientas.- Acarició la barbilla del contrario y estampó sus labios con los suyos. Posó sus fuertes manos en las delicadas caderas del castaño, y las acarició con ternura sobre la tela del suéter.
Taehyung llevó sus manos al cuello del azabache profundizando más la situación, pero aún sin perder el toque dulce del beso.
-Te amo, Tae.- Susurró Jungkook separándose de los labios de su novio, mientras unía ambas frentes de manera tierna.
-Yo m~¡Ah!- Una queja nomlo dejó terminar, y llevando ambas manos a su estómago. Eso alertó a Jungkook, quien se puso algo nervioso.
-Bebé, q-que sucede- El azabache ya estaba alarmado, esperando una respuesta por parte de Taehyung.
-T-Trae las pastillas.- Susurró, pues no tenía muchas fuerzas.
Jungkook con cuidado cargó a Taehyung y lo dejó en la cama, para ir corriendo por los medicamentos.
Entró al baño y rebuscó en los cajones del lavadero las pastillas recetadas para Taehyung, por si llega a tener malestares como este. Luego fue a la cocina a por un poco de agua.
Al entrar de nuevo a la habitación llevó su mirada a la cama, donde yacía su adolorida pareja con una mano en el vientre y otra en la cabeza. Tragó duro y se acercó.
-Aquí tienes, mi amor.- Le entregó el agua y las pastillas al castaño, quien abrió desesperado la envoltura, y sacó torpemente la piedrita blanca.
La llevó a su boca y empezó a tomar agua como si su vida dependiera de ello. Jungkook lo miraba fijamente esperando a que terminara.
-Toma, y ven rápido.- Tae le entregó el agua y la envoltura con el resto de pastillas, Jeon asintió y las llevó a su sitio.
Já, Ahora miren quién era el sumiso.
Cuando el azabache regresó del mandado, se encontró con la tierna figura de Taehyung abrazando una almohada, a punto de conciliar el sueño.
Soltó un pequeño suspiro. Se acercó a la cama matrimonial, y se sacó la camiseta para dormir más cómodo al lado de su pareja.
Estaba acomodando las sábanas, cuando siente algo halándolo hacia abajo. Taehyung tironeaba del brazo del mayor, provocando al mismo reír enternecido ante la ternura que emanaba su pequeño novio.
-Ya, ya, estoy aquí.- Otra risita salió de sus labios, contagiándole su alegría al somnoliento castaño al lado suyo.
-Kookie, abrázame~- Se sentó en la cama y extendió sus brazos haciendo un lindo puchero.
-Niño caprichoso...~
Sa acomodó junto a él, y abrazó protectoramente a Taehyung, mientras el nombrado escondía su cabeza en el pecho desnudo del azabache.
-¿Puedo...?
-Aish, ¡Me lo haz pedido ya cinco veces!
-Y ahora seis.- Sonrió.
Taehyung rodó los ojos divertido, y subió un poco su suéter, dejando a la vista su aún plano vientre.
Jungkook se acercó, y con cuidado posicionó su oreja en la barriguita de Taehyung. Cosa que no duró mucho, ya que el azabache de despegó a los 2 segundos.
-¡Ah! ¡Tu hijo me pateó!- Se quejó el azabache despegando la cabeza.
-¿Tan temprano?
-Será igual que tú.- Dijo, ganándose un leve golpe en el hombro. -¿Lo ves?- Rió.
-Ya cállate Jeon.- Jungkook se apegó a su pareja y volvió a abrazarlo. Besó tiernamente su cabeza y Taehyung se lo devolvió con un besito en el pecho. Jeon empezó a besarle el cuello, seguido del hombro, y luego sus brazos para terminar con besando delicadamente su mano. Taehyung rió.
-Bobo.
-Amas a este bobo.- Terminó dando un sonoro beso en la mejilla de Taehyung, y este relajó su cabeza en el hombro de su pareja.
-Lo hago, y mucho.- Ambos sonrieron como el par de enamorados que eran, y se dejaron llevar por la paz que el otro le brindaba, cerrando los ojos e inconsientemente cayendo en sueño profundo, así, abrazados.
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