My Light [Avengers]

Nuevos poderes

Punto de vista de Tony

Después de la bomba de Neón y otros radioactivos, que fue lanzada en Nueva Jork, millones de personas quedaron con esos "poderes", gracias a los "meteoritos" de Neón que lanzó la bomba, tenía una tamaño enorme, como una atómica que lanzaron los de Estados Unidos a Japón en la Segunda Guerra Mundial, pero esta vez una nube gigantesca de Neón se desató en la ciudad, cerca de mi torre; la mayoría de la gente no podía respirar dentro de la nube de Neón, intoxicándola. Yo también obtuve esos poderes, pero a diferencia que lo hice salvando a Steve de un cañonazo de los alterados, aquellos que usaban esos poderes de Neón para matar a los demás civiles. ¿Y de seguro se preguntarán, como demonios, el gran Tony Stark, pudo ser golpeado por esas oleadas de Neón? Como ya dije, solo hacía mi papel de héroe, de Iron Man. Cuando ese cañonazo penetró mi armadura y mi espalda, por un momento me sentí...No sabía como describirlo. Sentí una rápida y gran cantidad de poder corriendo por mis venas, acelerando mi corazón velocidades mortales. Auras de Neón corrían por mi cuerpo, de color rojo, azul y dorado. Sentía que mi cabeza estallaría en cualquier momento. Me mecí de un lado a otro antes de caer desmayado al suelo.

Lo primero que oí fueron las voces de mis amigos, si se les podría llamar así. Murmuraban entre ellos...Nadie escondía nada de mi! Igualmente, abrí lentamente los ojos, despertando de mi (algo dolorosa) siesta. Parpadeé varias vece para poder acostumbrarme a la luz de mi habitación de....Obvio, un hospital. Cuanto los odio! Pero al menos tenía compañía. Al verme despierto, los que estaban ahí, osea todos los de mi equipo de Vengadores, me vieron despierto y soltaron un suspiro aliviado. Steve se acercó a mi sonriéndome feliz de verme "bien".

- Tony...De verdad nos asustaste. Pensé que nunca despertarias. -

- C-calma, Cap...Estoy bien. - Me incorporo lenta y débilmente, aunque Bruce me ayudó un poco. - Que pasó? -

- Esa bomba radioactiva alcanzó 3km en todas direcciones, arrasando una gran parte de Nueva Jork. - Respondió Natasha cruzada de brazos. - Una parte de los habitantes tienen...."poderes", todos los médicos y científicos están tratando de hallar una cura. -

- Ya veo...Y ustedes los tienen? - Pregunté aun aturdido.

Bruce niega cabizbajo. - No, estábamos lejos del radio de la bomba en ese entonces, evacuando a cuantos civiles pudimos...Solamente tú y Steve estaban ahí cuando sucedió. Al parecer tú los adquiriste...Eso será un problema. -

Lo miré muy confundido, y a después a mis manos, que las recorrían pequeñas auras de Neón que las hacía brillar levemente. - Porque...C-cuanto tiempo llevo dormido? - Alcé la cabeza para ver a mis compañeros Vengadores, que se miraron vacilantes por un momento antes de decirme algo.

- Un...Un mes. - Respondió Bruce de nuevo, apartando la mirada preocupada a la ventana. Alcé las cejas de la impresión al oír eso,hace mucho tiempo, por primera vez no tenía palabra alguna que decir.

- Que...Que pasó...en ese mes? -

- Los que tienen poderes adoptaron el nombre de "alterados". Tienen como arma una forma única de materia, en este caso, tu tienes el Neón. Son odiados en todos lados, porque la mayoría de esos alterados usaban esos poderes para hacer....barbaridades. Tal llegó el odio de los demás hacia ellos, que se realizaron ejecuciones públicas de ellos, de cualquiera que se consideraba un alterado. - Thor negó con la cabeza frunciendo el ceño. - Como en la antigüedad....gracias a eso, ahora no hay muchos como antes. - Terminó de contar con los brazos cruzados.

- Pero ahora S.H.I.E.L.D decidió tomar cartas en el asunto y creó un departamento especializado en "cazar" a estos alterados y encerrarlos en una prisión para ellos, llamado Ice Peak Station. Creo que por el nombre ya sabemos donde queda. - Continuó Steve, mirandolo con pena. - Si Fury se entera de que eres uno de ellos, irás de inmediato allí....Preso. -

Sentí un vuelco en el corazón al oír todo lo que Capi Paleta me acababa de decir, yo...el gran Tony Stark, el mismo Iron Man...Ir a prisión? Vivir seguramente detrás de unos muros durante el resto de mi vida, porque conociendo a Fury, nunca me dejará salir por ser uno de esos..."alterados". Me negaba a creer esas cosas, simplemente no! Suspiré sonriendo y los miré a todos incrédulo. - N-no me van a delatar verdad? - Pero obtuve respuesta alguna, todos se quedaron callados. - Hey! Llevamos trabajando juntos como los Vengadores hace más de un año! - Miré a Steve todavía con una expresión suplicante, muy raro de mi, pero de verdad este tema no me parecía para nada una broma. - Steve...Capitán, no puedes hacerlo, somos...muy cercanos, muy buenos amigos. - Fruncí el ceño al escucharme a mi mismo, eso fue muy gay lo que dije, pero bueno. Steve aun me miraba apenado y puso una mano sobre la mía, lo que me impresionó un poco más de lo que ya estaba.

- Tony...No eres mi amigo. Eres una persona muy importante para mi, "amigo" no es la palabra correcta. - Me dijo en voz baja, como si fuéramos los únicos en la habitación. Me sonrió tristemente, aun posando su mano sobre la mía. - Pero realmente...no sé que hacer. -

Suspiré de nuevo, casi dando un bufido de frustración y tristeza y me tapé la cara con las manos echándome hacia atrás. - Esto es increíble...Muchas gracias, mis queridos y leales amigos! Ahora me voy a prisión a vivir horriblemente, detrás de unos muros, con mucha gente que me quiere hacer daño, por algo que ni mi culpa fue....Mi vida es tan miserable, no quiero ir allá...! - Me quejé en tono desamparado, tratando de convencerlos de alguna manera. Seguí quejándome hasta que Risitos Dorados me interrumpió.

- Ok ya! No le diremos a nadie, solo deja de quejarte como un niño pequeño Stark. -

Sonreí victorioso y reí levemente. - Jejeje, siempre funciona. - Todos soltaron un suspiro pesado, eso quería decir que estábamos bien, por el momento. Pero por dentro me sentía tan...apagado, que si descubriera S.H.I.E.LD que tengo supuestos poderes, me van a meter en prisión. Mi vida entera ahora dependía de un hilo, o básicamente de una orden demasiado simple. Parpadeé varias veces para después ver que mi reactor del pecho estaba conectado a una máquina generadora, me recordó muchísimo a cuando estaba en esa cueva en Afganistán y....Yinsen...

- E-eh? Porque...tengo eso conectado? No soy una USB -

- Como hace años, para darle la suficiente energía al reactor. Cuando te encontramos desmayado en la calle, solamente brillaba, y muy levemente el elemento del centro. Tuvimos que reanimarte con la máquina, al parecer de milagro funcionó. - Me contestó Buce.

- Ah...He vuelto a vivir! -

- Vamos Tony, esto no es un chiste. - Me dijo algo desesperado Steve cruzado de brazos. - No te delataremos, pero si no puedes controlar tus poderes, S.H.I.E.L.D se enterará de inmediato y te van a meter preso... - Se sienta a mi lado, mirándome fijamente. - Sabes que me preocupo mucho por ti, y la verdad...no quiero perderte. - Me dijo casi susurrando, para que los demás no oyeran y me sonríe levemente reconfortante. Le devolví la misma sonrisa, animándome un poco por tan solo esa sonrisa. Unos segundos después de vernos directamente, se retiró de mi camilla aun con esa leve sonrisa en sus labios. Me apoyo en mis manos para incorporarme, e intenté mover las piernas pero dolían mucho y dejé de hacerlo.

- No te esfuerces, Stark. Sigues débil. En unos días podrás irte, si no recuerdo mal. - Me dijo severamente Thor. Fruncí el ceño ante sus palabras y sentir un ambiente entre nosotros, demasiado tenso e incómodo.

- Hey...no tengan esas caras largas muchachos. No hay porqué estar así, estaré perfectamente, ya verán! - Me hice una sonrisa a mi mismo, no por algo me decían que era un egocéntrico. Aunque a los demás al parecer no les hizo nada el chiste.

- Como si estuviéramos tan asustados por tí. - Contestó Clint, flechitas, algo frío.

- Eso me dolió. Y mucho. - Contesté de vuelta fingiendo que de verdad me hirieron esas palabras. - Mi propio equipo no me quiere...que desgraciable soy...! -

- Deja ya de quejarte como un niño Tony! - Protestó el Cap, mirandome serio, aunque yo solo lo vi y solté una risa. Eso al parecer animó a los demás, con solo un poco ya me bastaba.
Realmente no pasó mucho cuando estuve en el hospital en esos días que había dicho Thor, aunque el Dios del Trueno se confundió "minimamente" con una semana o dos. Steve cuando podía se la pasaba conmigo, a decir verdad....me agradaba su compañía, y los demás empezaban a notarlo. Me negaba a comer esa asquerosa comida del hospital, pero por suerte mía, se podía comer cosas afuera del edificio, así que de almuerzo me traían pizza y hamburguesas a domicilio al hospital. Un hábito, supersaludable.

Pero el verdadero juego empezaría cuando salí de él...