El Planeta Desconocido - El Error.

Sección 0.1

Sección 0.1

<Inicio de bitácora, sub territorio espacial 3951, Planeta 9632—Hf3 o Tierra Polaris Binaria, al habla La Agente Cibelina 01.>

Soy el Arma más peligrosa de todos los planetas y territorios, podría hacer estallar miles de bombas estelares en cuestión de segundos. Y, para ser sincera me encanta serlo, hace que todos los seres humanos sean dependientes de mí, me encargo de actualizar sus computadoras militares, de crear robot para cualquier misión que deseen... y lo más importante, puedo hacer que se rindan a mis pies con sólo un clic...
Soy la Agente Cibelina.
Increíblemente vivo en un planeta con excelentes reservas de oxígeno y un medio ambiente bastante agradable, de hecho, se parece a la tan añorada y deseada tierra. Es increíble que el sistema operativo que dejaron para la reconstrucción de este planeta durante de la guerra de asteroides, sea llevado por una computadora en el centro del continente más amplio de este mundo, funciona increíblemente, y aún más increíble es que siga trabajando desde más de 100 años. Lo cual, a mi parecer, es un hecho significativo para la antigua (casi) sociedad de este planeta...
Ese sistema se encargó de limpiar la atmósfera y plantar árboles, crear una reserva de animales para los distintos ecosistemas y lo más sorprendente que creó fue la barrera que no deja ni entrar ni salir a ningún individuo. Imagínate una burbuja dentro de otra burbuja... Pero esa hermosa capa protectora tiene un Error, a donde actualmente me dirijo, en la Isla del Sur.
Es un agujero en la capa causado por un misil después de la guerra de los asteroides. He pasado muchos meses intentando buscar ese material por la cual está constituida pero nada. Ni una señal de él.
Ya han pasado 15 años después que llegue a este planeta... Y te preguntaras como sigo viva, viéndome tan joven. Pues existen unas inyecciones que neutralizan el deterioro del cuerpo, yo tengo una docena intacta que me enviaron después de mi último trabajo, yo cobro con diferentes monedas, y esa fue una de ellas, yo prefiero llamarlo canjear objetos por el "Bien Mayor para los Líderes"... Es una forma de verlo ¿No crees? Y créeme yo no me veo tan mal... Era pequeña, estaba en plena adolescencia cuando comencé con las dosis. Supongo que no podía soportar más las pesadillas y me comencé a inyectar sin saber las consecuencias, fui desinteresada y totalmente ignorante con lo que le ocurriría a mi cuerpo.
Después de un par de años, mi cuerpo no reaccionaba a mis cambios hormonales, las inyecciones funcionaban excelentes, pero no era el momento indicado para utilizarlas, dejé de usar el tratamiento hasta que mi cuerpo se desarrolló completamente, y así estoy desde hace 15 años, con la misma apariencia, y con las consecuencias de inyectarme prematuramente.
Mi rutina para mantenerme entretenida en este exilio es en temporadas, utilizo meses para organizar todo, casi siempre los utilizo revisando el planeta, haciendo trabajos para Los Mandatarios, o simplemente vagando de isla a continente, es un trabajo muy "complicado" como puedes observar...
Lo interesante ocurrió hace un par días, después de despertar, me llegó una alerta sobre alteraciones en el ambiente de las Islas del Sur. Eso es verdaderamente raro ya que sólo existen insectos y unos pocos animales de mediano y relativo gran tamaño, en la isla más grande. Fueron alertas con excelente información, sin embargo, no quiero fiarme de ellas, al menos, hasta verlas por mí misma, quizás notaron un comportamiento animal extraño, quizás sólo sea una falsa alarma; así que estoy a unas horas de arribar al único puerto del lugar.
Desde mi posición podía observar el Gran Error, y si lo ves desde un punto de vista más abstracto podrían entrar dos vehículos de desplazamiento por allí... Me dirigía al lugar donde guardaba las máquinas y todos los complementos para una estancia agradable, en pocas palabras, una pequeña casa bajo tierra... Tarde unos 15 minutos del puerto al refugio, bajé con mis maletas y caminé hacia allá, cuando entré a la Sala de Inteligencia, TODO era el caos, mis computadoras decían alertas y luces rojas por todos lados, era exasperante enfocar a un solo sitio porque se veía como si fueran flash de fotografías rojas.
—Alto.— mi voz sonó por toda la estancia y todo se apagó tan rápido como la última letra pronunciada dejó de sonar. Sí, eso es un excelente equipo, estoy orgullosa de construirlo así— ¿Qué sucede?
Rápidamente el holograma preparado como Patrick apareció frente a mí con toda la calma y serenidad que fue diseñado.
—Señorita, las cámaras han captado movimientos extraños y desiguales mientras usted no se encontraba en los territorios de la Isla. Procedemos a verificar el origen y destinatario de los individuos, sin embargo, no estamos diseñados para explorar ese campo. ¿Continuamos el procedimiento?— dijo él con sus facciones apenas moviéndose para gesticular las palabras.
—Patrick… ¿Cuál Procedimiento?— dije ladeando un poco la cabeza, sinceramente nunca tuve una situación así, no sabía exactamente cómo actuar, y menos como actuarían mis máquinas.
—El que usted nos ordene, estamos a su servicio.— dijo él con una pequeña reverencia de cabezas. Siempre él tan servicial.
—Está bien, continuaremos con La Observación e Investigación de Los Individuos. Manténgame informada de cualquier eventualidad.— dije retirándome a mi habitación, si se podría decir así, era una sala equipada con varias pantallas de acceso táctil y controles de mandos manual, una cama con varias almohadas y muebles con diseños variados, al igual que los cojines. Mi habitación era grande, pero nada comparado con el armario, donde dejé las valijas y me cambié los zapatos; era tan grande, como la mismísima habitación. Tenía un baño privado y un equipo de sonido.
Los "movimientos extraños y desiguales de los individuos" como lo nombró Patrick, sólo se trata de nueve Humanos y pequeños artefactos que hacían interferencia con las antenas, su existencia es bastante obsoleta al frente de mis máquinas, pero supongo que debo dejarlo pasar, son Humanos al fin y al cabo.
Han hecho bastante revuelo entre mi equipo porque no es permitida la entrada de Humanos en este planeta. Y ocurrió una falla técnica entre ellos, ya que mi equipo lo asumían como monos o chimpancés; sin embargo, cuando uno de los Humanos se acercó demasiado a uno de los sensores, la información da entender que evolucionó en cuestión de segundos, fue divertido notar la falla, porque cualquiera puede notar quién es humano; pero mis máquinas no lo hicieron, y por eso mandaron la alerta.
Para ellos existe la Capa Protectora, y sólo existe una explicación lógica al asunto, entraron por el Error. Ya había releído el informe que me envió Patrick hace unas semanas. Era un asunto bastante interesante. Según lo leído han estado aquí varios meses, cinco y medio en realidad, y ya tienen una casa construida con madera y ramas, una fuente de agua, ya que se situaron a unos metros del lago, una fuente que sustenta sus necesidades principales, saben cazar y han explorado la mitad de la isla, obviando afortunadamente casi todas mis antenas y mi refugio.
Después de salir del baño y cambiarme de ropa, decidí ir a supervisar cómo van las máquinas con El Asunto, era extraordinario lo maravilloso y excelente que se veía todo después de tantos años de ausencia, como si mi equipo hubiera limpiado antes de yo llegar aquí, cosa que era posible.
—Patrick, ¿Cuáles fueron los resultados?— dije sentándome en un sillón delante de las pantallas.
—Señorita, hemos determinado que no hay novedades acerca de los individuos, sólo se pasean en una determinada área buscando suministros alimenticios y en varias ocasiones cortan las ramas secas de los árboles para hacer fuego cerca de su establecimiento para descansar.— dijo él con el mismo tono inexpresivo y sin dejar de mirarme.
—Gracias por su reporte, ahora dame tu opinión como analista y estratega.
—Es irrelevante señorita, pero si la desea, se la daré. Es evidente que están aquí por no tener a donde ir. Nosotros deberíamos eliminarlos con virus o intoxicación. Sería mucho más eficiente el desempeño de la mayoría de los arbustos y árboles si hace eso.
—Eso es inaceptable, Patrick. No podemos matarlos. No somos asesinos... Es mejor que le digamos que deben desalojar la Isla y el planeta. ¿Debería hacer contacto con los Humanos?— dije con el mismo tono calmado y ágil, pero estaba realmente nerviosa, no había tenido contacto físico con Humanos desde hace muchos muchos años.
—Esa es su decisión Señorita, sin embargo, es más viable que se lo comunique mañana, ya está anocheciendo. Es impredecible la reacción de los Individuos.— dijo y se volteó a uno de los monitores donde se visualizaba una escena de nueve Humanos charlando alrededor de una pequeña fogata, también dirigí mi atención a la imagen.— Así nos dará tiempo para preparar las armas, en la peor situación las deberá usar. ¿Dónde desea comunicárselos?
—Es su mismo entorno. Quiero verlos, saber sus reacciones me causa una gran curiosidad, coloquen las armas somníferas en cada árbol cerca de su refugio. No debemos lastimarlos.— dije. Acto seguido me levanté y me dirigí a la cocina.
No comí casi, supongo que la emoción o el nerviosismo no me dejaban conservar mi apetito. Me obligué a descansar un poco antes de enfrentar a los Humanos. Eran nueve contra una, tenía esa guerra perdida, sin embargo, ellos no tenían armas ¿O sí?
No.
La información decía que tenían armas rudimentarias y las usaban para cazar, así que supongo que tenía una pequeña ventaja sobre la situación... ¿Y si me lanzaban piedras? ¿Y si tal vez no querían irse? ¿Qué pasaría entonces? ¿Tendría que matarlos, o dejarlos vivir como parásitos en la Isla? Y así me quedé dormida, pensando en las incógnitas.