The Gate

156 12 5
                                    

—¡Eres un necio Beelzebumon! No perteneces a un tamer y mucho menos al mundo humano, ni siquiera al digimundo, tenemos una mejor oferta en el Dark Area— Demon tenía clavadas sus garras en sus hombros y decía esto mientras lo llevaba por los aires

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—¡Eres un necio Beelzebumon! No perteneces a un tamer y mucho menos al mundo humano, ni siquiera al digimundo, tenemos una mejor oferta en el Dark Area— Demon tenía clavadas sus garras en sus hombros y decía esto mientras lo llevaba por los aires.
—¡Bájame ahora escoria, o te arrepentirás!— dijo mientras forcejeaba para ser liberado, ya que el dolor comenzaba a ser molesto.
—Qué perdida...— Demon invocó de nuevo sus llamas, pero esta vez de las garras inferiores con las que lo tenía sujetado y lo envolvió con abrazadora lumbre que dejaba una estela mientras la bestia le llevaba de un lado a otro. Intentó desenfundar las escopetas, pero le resultó imposible, estaba casi inmovilizado por las extremidades del enemigo y su fuego abrazador.

Sentía que el ascuas estaba afectándole, pero tuvo suerte de que el siniestro ataque de Demon terminara, al parecer no podía prolongar demasiado tiempo las llamas e inmediatamente desenfundó la segunda escopeta ubicada en la pierna disparando inmediatamente a Demon.

—¡Te digo que me bajes ahora, maldito Ogremon sobredesarrollado!— gritó enfurecido mientras hacia todo lo posible por zafarse.

Las balas eran esquivadas por Demon, los disparos eran predecibles, sin embargo, estos le dificultaban mantener a Beelzebumon en el aire, hasta que finalmente ya no pudo más y lo dejó caer.

Beelzebumon confiaba en que las alas con las que protegió a Lisa y a Byron emergerían nuevamente, pero no lo hicieron y terminó en el suelo tras una caída bastante alta que lo dejó aturdido, Demon se reía desde los aires mientras asechaba como si fuera un ave de rapiña.

La bestia se aproximaba a gran velocidad para atacar en picada, así que alistó las garras para recibirlo buscando acabar su vida con un zarpazo, pero los ataques nuevamente eran fácilmente de predecir y Demon en cambio, casi lo despezaba con las suyas. Esta estrategia la repitió constantemente y el filo de sus garras lo estaba debilitando.

—¿Qué sucede, gula, no afilaste tus pezuñas?—

—¿Qué sucede, gula, no afilaste tus pezuñas?—

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—¡¡¡GGRRRRAAAAHHHRR!!!—

—¡Beelze! No pierdas la calma, concéntrate— gritó Lisa a lo lejos, mientras agitaba su digivice mientras Byron seguía inconsciente.

La tamer tenía razón, necesitaba calmarse o de otra forma Demon lo asesinaría aventajándose de sus alas. Respiró profundamente y enfocó todos los sentidos en el adversario, quien estaba preparando otro ataque.

Demon se aproximaba con toda la intención de partirlo a la mitad esta vez y en el último instante desenfundó berenjena —¡QUICK SHOT!— y acertó un disparo que dio exactamente en la articulación de una de sus alas, haciéndolo perder el control del vuelo que retomó para escapar torpemente.

—¡No escaparás, bestia!— desenfundó la segunda escopeta y con ambas apuntó a las alas —¡DOUBLE IMPACT!— y disparó suficientes proyectiles para que ya no pudiera volar, forzando así su aterrizaje al no poderlas mover en absoluto, pues terminaron con agujeros en todas partes.

—¡No escaparás, bestia!— desenfundó la segunda escopeta y con ambas apuntó a las alas —¡DOUBLE IMPACT!— y disparó suficientes proyectiles para que ya no pudiera volar, forzando así su aterrizaje al no poderlas mover en absoluto, pues terminaron co...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Beelzebumon dio múltiples giros a sus escopetas recortadas, con ambas manos para jactarse del éxito y las guardó después de esto, esperando a que Lisa notara la nueva marca de su festejo, pero en ese momento el tiempo se detuvo para él.

—¡¡¡Bien jugado, Beelze le diste!!!— Lisa por la emoción, creyó que ya había derrotado a Demon y había corrido hacia él para abrazarlo, pero antes de hacer contacto, ella se quedó quieta y sus ojos cambiaron un color muy claro, ya no le preocupaba que se hubiera expuesto al peligro, en ese momento había algo más.

—Beelzebumon... regresa al mundo digital y llévate a Demon contigo. No puedo estar durante mucho tiempo en este cuerpo, así que date prisa y usa la distorsión que provocaré, úsala cómo portal, sólo tienes esta oportunidad— se trataba de Homeostasis, quien hizo que apareciera un enorme agujero negro a pocos metros detrás de la bestia.

Sin dudarlo acató la orden de Homeostasis, no podía permitir que el enemigo permaneciera más tiempo en el mundo análogo. Lisa y otros seres como ella corrían peligro y no tenía garantía de la victoria, el enemigo era diferente a todos los de antes y posiblemente el más fuerte.

—¡¡¡Behemoth!!!— Del suelo emergió una motocicleta a la que abordó en movimiento. En el trayecto de los pocos segundos, le invadió una enorme nostalgia por todos los recuerdos que había compartido con su tamer, estaba por marcharse y ni siquiera podría despedirse, por lo que fue inevitable derramar un par de lagrimas que se desvanecieron en el camino por la extrema velocidad a la que manejaba.Había cosas más importantes en juego que vanos sentimientos.

Demon acababa de reincorporarse en instintivamente trató de detenerlo con sus brazos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Demon acababa de reincorporarse en instintivamente trató de detenerlo con sus brazos. La fuerza que tenía era impresionante, al grado de que destruía con sus patas el suelo en su intento.

—Es hora de irnos, compañero— dijo en tono determinante mientas forzaba a Behemoth ir hacia adelante.

—¡¿Qué haces?! ¡Detente!— Demon hacía un gran esfuerzo para quedarse en el mundo análogo.

Quedaban centímetros para ambos se introdujeran en la ruptura, así que saltó por encima de la motocicleta y embistió a Demon para llevarlo consigo al mundo digital.

—Adiós, Lisa...— ambos cayeron en la puerta a su propio mundo y antes de ser enviados de regreso, lo último que vio Beelzebumon fue a su tamer corriendo en un vano intento de alcanzarlo.

Demon Lord Where stories live. Discover now