Aresuka.— La llamó una compañera. — ¿Estás bien?— Dijo preocupada.

—Sí.— Le dijo sonriendo. —

—Sé que no me incumbe, pero...— Dudó por unos segundos. — ¿Te has peleado con Shinsou-san?—

—Algo así. — Dijo sin saber que responder.— Pero no te preocupes, no es nada grave.— Trató de olvidar el tema.

—Ojalá se amisten pronto.— Le dio una sonrisa.— Ustedes dos se ven felices cuando están juntos.— La castaña sonrió incómoda.

—Estaré bien.— Le dijo para que se fuera. Lo cual hizo, ella suspiró, «¿Desde cuando me volví una sufrida» pensó con burla, «Ahora falta que me ponga a cantar esas canciones para las perras básicas y sufridas» no pudo evitar reír por eso.— Ay, ni en estos momentos puedo mantenerme enojada...—Suspiró. — De verdad adoro a ese chico...— Susurró para si misma, viéndolo.

¡Se iba a disculpar!

Iba a llamarlo, pero la voz del héroe se lo impidió. — Para decidir quienes pelearán contra quien, ¡Lo dejaremos en un sorteo!— Gritó con una bolsa llena de papelitos.— Quienes tengan los mismo números tendrán que pelear entre sí. — Explicó.

La chica se acercó para tomar uno, luego el chico, por suerte no les había tocado juntos.

Chale.— Dijo con burla viendo su papel.

—¿Quiénes tienen el número 1?— Preguntó el maestro.

La castaña y otro peli-negro levantaron su mano al mismo tiempo.

—¡Muy bien!— Les mostró la arena donde iban a pelear.— El que salga primero del círculo pierde.— Explicó.

—¡Vamos, Satoshi!— Gritaron sus compañeros, la singularidad del chico era ser capaz de sentir las vibraciones del suelo, muy útil al momento de predecir un terremoto. Pero, catalogado como inútil según el estándar de héroe promedio.

El de cabello morado observaba la situación, pero no se atrevía a darle animos a su amiga, aún se sentía avergonzado por como la había tratado antes.

—¡Empiecen!— Gritó el rubio, dando por inicio al combate.

El cual no duró ni tres segundos, pues el chico ya había sido lanzado fuera del círculo. Y sin que la chica moviera un solo músculo.

Todos se quedaron en silencio.

—Listo.— Dijo fastidiada saliendo del círculo también.

—¿Eh?— Soltó asombrado por como habia pasado todo tan rápido.— B-Bueno la ganadora es la señorita.— Dijo incrédulo. Todos observaron intrigados a la latina, quien sólo tenía las manos en los bolsillos y la mirada baja, no le gustaba ese tipo de atención.

Así pasaron los siguientes combates, algunos más interesantes que otros, hasta que llegó el turno del oji-lila.

—Oye, buena suerte, hagamos lo mejor que podamos, ¿Te parece?— Le dijo al chico del frente.

—Ah, muchas graci-...— No pudo continuar pues ya estaba bajo su control.

—¡Noo, Takumi, idiota!— Gritó de impotencia uno de sus amigos.

La castaña no pudo evitar reir.

—¡Comiencen!— Grito All Might. Aunque el ganador ya estaba decidido.

—Sal del circulo.— Ordenó Shinsou simple, quien lo obedeció.

—¡Increíble! — Gritó la castaña sin poder evitar sentir admiración hacia él, quien se sonrojó al escuchar las palabras de su amiga.

Mi razón ; Shinsou HitoshiWhere stories live. Discover now