Reina de Corazón© [Saga griegos #7]

Capitulo 9

Dimitri

— ¿cómo estás?  — Ares me observa y luego estrecha mi mano.

— bien — lo veo un poco molesto y algo cortante... no hay que ser adivino para saber que ya conoce lo que pasó entre Eileen y yo — me he enterado que han terminado.

— algo así — estiró mis piernas mientras él me mira con el ceño fruncido.

— ¿algo así?  — asiento.

— no me he dado por vencido Ares — enarca una ceja y luego lo veo relajarse un poco.

— te vi anoche y honestamente no me gustó mucho que se tratan como extraños.

— ¿espiabas  Ares? —  él se inclina y entrecierra los ojos.

— no me importa que Eileen sea la mayor de los dos, protegere a mi hermana... de quién sea.

Desvió la mirada y aprieto la mandíbula.

— creo en está historia él que ha hecho el papel de tonto he sido yo.

— por que has querido Dimitri — apretó los puños ante sus palabras
—  Muchas veces te dije que el noviazgo de ustedes no me gustaba, se trataban como amigos, no toda la culpa es de mi hermana. No hiciste que ella te viera como un hombre.

Me pongo de pie, sé que tiene razón.

—  sabes que lo hice para no presionarla.

— ¿de qué te sirvió? No sirvió para nada Dimitri, le enseñaste a verte como un amigo... un hermano, él que tapaba sus travesuras.

— fallé di por hecho muchas cosas, ¿Apollo sabe?

— que yo sepa, no —  nos quedamos en silencio por un momento — me he enterado que Karissa está de visita en Atenas.

Suspiró.

— se hospeda aquí en mi casa — Ares aprieta la mandíbula y un nervio salta.

— como vuelan las noticias.

— ¿de qué hablas Ares?

— debe saber que Eileen y tú no están juntos.

— lógicamente, es mi prima.

Ares estira las piernas por un momento y luego me observa.

— ¿dónde está?

— salió con mi hermana, supongo irán donde Eileen ¿cuál es el problema que tienes con Karissa?

— ninguno.

— sabes que si, antes eran muy unidos y de repente todo cambio.

Ares se pone de pie, mete las manos en sus bolsillos y saca las llaves de su auto.

— todo bien con ella... una consulta ¿crees en el amor entre primos?

Niego.

— ¿de qué rayos hablas? Sabes bien que para mi la familia es sagrada.

— Karissa es preciosa — enarcó una ceja —  es un comentario.

— es bellísima — creo entender por donde va la conversación de Ares —  pero amo a Eileen.

— entonces no hagas sufrir a mi hermana.

— sufro más yo pero trato de que ella me separé del amigo que conoció y empiece a verme como el hombre que soy.

— en un mes es el viaje a Medrea, estaremos en el terreno de Apollo.

— lo sé — suspiró hondamente — creo que no iré.