—Killian es amigo de Liam, seguramente tu hermano lo hará de todos modos.

Lia rodó los ojos una vez más y continuó evaluando los platillos.

No tenia idea de lo que hablaban, pero parecía ser un tema controversial y de aguas turbias, así que decidí no involucrarme demasiado.

—Bien, para los aperitivos podemos elegir un poco de...

—¡Flan de mascarpone! —propuse sin pensarlo demasiado.

Sarah Woodgeth me miró como si le hubiera sugerido servir cabezas de vaca cruda como aperitivos.

—¡No!

—¿Por qué no?

Sabía que la tradición familiar indicaba que debía usarse para las penas del corazón, pero aquello aplicaba siempre y cuando el individuo en cuestión conocía la teoría. Cuando no lo hacia era libre de comerlo.

—Porque es un platillo corriente y de ninguna manera podría ser bien visto.

Lia la miró como si le hubiera dado una bofetada en público.

—Es el postre de la abuela —recordó frunciendo el ceño en su dirección.

—Como dije es un plato corriente —negó con la cabeza—. Fortress stilt fisherman indulgence —pidió antes de explicarme con sorna lo que significaba aquello—. Es cassata italiana preparada a base de champaña en algunas ocasiones colocan un poco de oro comestible y crema irlandesa, de sirve con mango, granada y un poco de chocolate.

¡¿Estaba hablando en serio?! ¡¿Oro comestible?! ¡Pero qu[e diablos!

—No quiero comer oro —aseguré.

Ni siquiera quería usarlo, bastante hacía con usar un anillo de compromiso de oro blanco.

—Además, agregaremos diferentes tipos de vinos —continuó ignorandome.

Crucé los brazos y espere a que la madre de Liam terminara de ordenar cada platillo. Desperdiciar tanto dinero y comida era un crimen para mí, pero realmente no creía que pudiera hacer algo para cambiar su opinión y declararle la guerra a una mujer tan firme e influyente como Sarah Woodgeth no me hacia ninguna ilusión.

El resto de la elección del banquete la pasamos escuchando a la señora Woodgeth dar ordenes a diestra y siniestra, la tarjeta no se cansaba de pitar cada vez que ella ordenaba algún platillo extra. Ella pagaba todo con mucha alegría.

—Bien, es hora de irnos —anunció tomando su bolsa de mano—. Tenemos que llegar temprano con Lady Cuppton.

—¿Con quién? —pregunté intentando seguirle el paso.

Ella no respondió al instante, en realidad no respondió en absoluto hasta que salimos del restaurante por completo.

—La elección del vestido es algo sumamente importante. Yo elegí el vestido de América y fue realmente impresionante. Habría dado mucho de que hablar si no hubiera sido por... —Me miró—. Otros incidentes.

¿Elegir mi vestido? ¿Mi vestido de novia? ¿El vestido mas importante que usaría en la vida?

¡De ninguna manera! ¡De ninguna maldita manera!

—No —respondí tajante.

Podía meterse conmigo, podía meterse con mi banquete de bodas e incluso con mi esposo, pero nunca con mi vestido.

Sarah giró sobre sus talones, bajó las gafas y me miró de arriba a abajo sobre el marco de estas.

—¿Disculpa?

Lucky Love (LR #3)Where stories live. Discover now