KORSAG

Encuentros misteriosos

Todos nos quedamos estáticos y siento como mi piel se eriza y mi cuerpo se estremece, sin proponermelo recuerdo la primera vez que escuche ese sonido, tenia 5 años y estaba acompañando a mi madre a la pastelería a comprarle una torta para celebrar el cumpleaños número 8 de mi hermano, Ethan.

Estaba comiendo un helado de chicle cuando ese sonido inicio, los autos, las personas y todo se detuvo en un instante por lo que vi a mi madre y le pregunte qué pasaba, ella se agacho y mirándome con angustia me dijo que esta no seria la ultima vez que escucharía ese sonido pero que no tuviera miedo pues solo era una forma de informar que había un peligro menos en nuestro mundo. Después de eso y comprar la torta subimos a su camioneta y a mitad de camino fue que caí en cuenta que mientras mi madre me hablaba había dejado caer mi helado.

- Buenas tardes a todos, se les solicita que por favor regresen a sus labores donde se reunirán con sus jefes inmediatos. Gracias- Dijo la Sra Picket, la viscepresidenta de la compañia por lo que Jessi y yo nos depedimos, quedandome con mis compañeros del departamento de informatica.

- Qué creen que haya sido esta vez- dice Lisa con un gesto de preocupación

- No se tal vez algún chico que se convierta en Conejo- Dice Cassie tratando de sacarle tensión a la situación

Volteamos a la derecha en donde nuestro supervisor nos indica que lo sigamos a una de las salas para estar más comodos.

Siento una sensacion extraña en los ojos como si estuviera llena de polvo por lo que me paso las manos por lo ojos tratando de limpiarme los ojos, pero la sensacion no desaparece por lo que me excuso con las demas y voy al baño.

Como era de esperar esta vacio, así que aprovecho y me mojo las manos y me las paso por la cara intentando eliminar la sensacion que persiste, cuando los abro me encuentro directamente con unos ojos negros como la medianoche que me deja paralizada, no solo porque son unos ojos hermosamente atemorizantes sino porque me ve con intensidad e intigra, y solo es en ese momento en que me doy cuenta que por alguna razón ya no estoy en la oficina sino en un tipo de fabrica abandonada, donde hay mucho polvo y hace mucho frió.

El hombre de ojos impactantes empieza a caminar hacia mi ocasionado que mi corazón empiece a bombear sangre de una manera que estoy segura no es nada saludable, justo cuando esta por extender su brazo hacia mi cierro los ojos con fuerza.

- Tami ¿estas bien?- Pregunta Lisa con preocupación a traves de la puerta.

- Qué... yo...es que...

- ¿Tami?

- Lo siento, me maree un poco pero salgo en un segundo

- De acuerdo, no tardes el supervisor quiere vernos a todos ya

- Voy- cuando percibo que se ha ido por las sombras debajo de la puerta del baño me permito soltar el aire que estaba conteniendo. Qué mierda paso,  estoy segura que estuve en ese lugar con ese hombre y por alguna razon volvi a la empresa.

Vuelvo a cerrar los ojos en espera de que algo pase pero auqnue lo intento algunas veces nada sucede, asi que decido reacomodar mi ropa y volver con los demas. Llego justo a tiempo, y me siento a la oarte de atras de la sala.

-Hola a todos- dice el Sr. Thompson nuestro supervisor- se como se están sintiendo en estos momentos debido a lo que paso

¿qué fue lo que paso? me pregunto desorientada

- Efectivamente se ha encontrado un nuevo Korsag- con lo cual vienen los recuerdos de ese sonido que me pone tensa- pero no se preocupen ya fue controlado

- Esas cosas merecen que las lleven a ese lugar- comenta Brandon de forma despectiva

- A qué te refieres- pregunta Cassie viéndolo, a lo que Brandon desvía la mirada evitando responderla- ¿Y bien a dónde te refieres ?

- Son llevados a la Triada- responde nuestro jefe en lugar de Brandon en un tono cortante

-La qué- dice Susy, una compañera mitad coreana. Me alegro que lo pregunte porque creo que somos varios los que no tenemos idea

- La Triada es el lugar al cual envían a los Korsag después de que son capturados, estudiados y clasificados y pues están a la disposición de los laboratorios H para investigaciones que nos ayuden a combatirlos y dominarlos

Se hace un silencio en toda la sala que hace que más de uno se ponga tenso, yo entre esos, si es posible que este mas tensa de lo que estaba.

-En fin eso no es algo por lo que se deban preocupar, lo que venia a decirles es que por ordenes de la viscepresidenta se ha decidido que finalicen inmediatamente sus labores y se vayan a sus casas a descansar y en dos días retomaremos de forma normal. Así que organicen su trabajo y pueden retirarse- quince minutos después todos estamos saliendo para nuestras casa

Alisto rápidamente mis cosas y me despido de los demas, pero antes de que llegue a la puerta Jessi me alcanza y me trata de hacer detener diciendo que me veo palida, como puedo me logro safar de ella diciendole que es agotamiento y me voy dejandola con la palabra en la boca.

Al salir, ruego por tomar un taxi lo mas pronto posible pues no me siento de animos para coger el transporte publico y no me quiero encontar con nadie de la empresa, afortunadamente mis ruegos son escuchados.

Mientras transito por la ciudad vuelve a mi mente lo que me sucedio en el baño y me concentro en recordar al hombre que vi.

Era alto y se le marcaban los músculos necesarios para saber que esta en forma, tenia el cabello un poco largo negro justo como sus cejas, ojos y pestañas largas. Su piel era blanca sin llegar a ser extremo, con unos rasgos que simplemente lo hacían ver maravilloso y una barba de unos 3 dias dias que acentuaba mas su rostro. Utilizaba unos pantalones negros un poco ceñidos, botas de cuero negro y una camiseta blanca de manga corta, sobre la cual descansaba un cadena con un colgante que por alguna razon se me hacia conocido.

Sin darme cuenta llego a mi destino, pago al taxista y subo a mi departamento. Al llegar me quito los tacones y rapidamente me cambio de ropa por mi pijama, sirvo un vaso de jugo y decido meterme a la cama, ha sido un dia demasiado loco y necesito descansar.

La oscuridad se apodera de mi y sin poder evitarlo entro al mundo de los sueños, de repende siento como me halan de la muñeca izquierda haciendo que mi cuerpo gire hacia esa dirección y me topo con esa mirada que ha hecho que mi cerebro dibague el resto de la tarde.

-Por fin te he contrado- dice con una voz gruesa y profunda haciendo que mi estomago se encoja una vez mas.