1. La llegada.

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Desperté en medio de una especie de elevador, enmedio de la oscuridad absoluta, me costaba trabajo respirar por el aire viciado y polvoriento.
El piso se sacudió y me hizo caer cuando me golpeé contra el piso choque con una superficie dura y fría.
Hubo otra sacudida y el cubículo se empezó a mover hacia arriba y yo no sabía lo que pasaba, me arrastré hacia una esquina y me concentré en recordar que pasaba pero no podía; no podía recordar nada, nada excepto mi nombre.
-Me llamo ________.
No recordaba cuántos años tenía, ni mi apellido y mucho menos hacia donde me dirigía o como había terminado ahí.
Mis ojos empezaron a acostumbrarse a la oscuridad y vi varias cajas con las siglas C.R.U.E.L. Por instinto lo más probable era que esas letras no significaran nada bueno.
Aun así decidí pararme a ver el recinto en lo que se detenía el elevador, no me gustaba estar ahí sin hacer nada, estaba triste por no poder recordar algún dato de mi vida pero no iba a llorar, no podría solucionar nada.
Me paré de la esquina en la que me había acomodado empecé a deslizar mi mano a través de todo el recinto que era de metal; sentí el techo y el piso y todo estaba hecho del mismo modo.
Traté de investigar algunas de las cajas y tenían cosas básicas como agua, semillas y algunas cosas más que no alcanzaba a distinguir.
Sentía demasiada curiosidad pero no podía hacer ya nada ahí dentro, solo esperar.
Pasaron aproximadamente unos 15 minutos y empezó a sonar una alarma muy fuerte después de que se detuviera el recinto por completo, me levanté una vez más y comencé a pedir ayuda, investigué de nuevo el recinto en busca de una puerta, cuando de pronto el sol entró por una abertura que comenzaba a hacerse más grande en el techo, no podía ver nada solo una intensa luz y escuchaba voces que provenían de arriba.
De pronto sentí un movimiento en el piso, alguien había saltado dentro de la especie de caja.
Por fin pude ver y distinguí a un chico con el cabello rubio y ojos café oscuro.
-Vas a decir que ves Newt.-Dijo alguien desde arriba
-Es una chica.-Exclamó el chico
Después de que hubiera dicho ésto se escucharon muchos murmullos entre los que destacaban.
-¿Qué tal está?
-La pido para mi.
-Yo la ayudo a subir.
El chico al parecer llamado Newt no les hizo caso y me extendió su mano
-Hola, soy Newt, tranquila no dejaré que te pase nada mientras estés conmigo ok?-Me dijo
No sabía porque pero él me daba confianza, tomé su mano y él me ayudó a subir.
Cuando llegué veía como todos me miraban. Algunos con ternura otros con deseo otros como perdidos y mientras iba girando veía como eran las mismas expresiones en sus caras y me di cuenta que era la única chica del lugar comencé a estresesarme por la situación hasta que mi vista se cruzó con la de un chico en especial, era alto, fuerte y tenía los ojos rasgados, él me miraba de una forma distinta, como si lo hubiera hinoptizado y al lado de él había otro chico; también era alto y sus ojos cafés me veían con delicadeza, como si fuera lo más preciado para él en ese instante lo miré fijamente y comenzó a sonreir.
Me hizo sentir bien, pero no lo suficiente ya me había cansado de que todos me vieran de esa forma y en mi mente solo vi clara una palabra CORRER.
Me dirigí hacia donde habían menos prrsonas los tomé por sorpresa y pase entre dos chicos comenzaron a gritarme que me detuviera y escuché a lo lejos como gritaban
-Vamos para.
-No te haremos daño.
-Thomas, detenla.-No tenía idea de quién era Thomas, así que volteé y vi al chico de los ojos cafés que venía corriendo unos 5 metros más lejos de mi, pero no me detuve, observava el lugar donde estaba mientras corría lo más rápido que mis piernas me permitían estaba en una especie de cuadrado rodeado por muros de piedra gigantes, cada uno tenía cuatro aberturas y una estaba enfrente de mi, me dirigía hacia ella.
Volteé hacia atrás y Thomas estaba a unos 2 metros atrás de mi faltaban unos 8 metros para llegar a las aberturas; me esforcé en correr aún más rápido pero sentí como algo me agarró de mi pie izquierdo y eso me hizo caer.
Me giré y vi que Thomas me seguía sujetando.
-Lo siento.-Me dijo y me miró a los ojos yo sonreí instintivamente al escuchar su voz era dulce pero también grave.
De pronto se acercó el chico de los ojos rasgados y me extendió la mano para ayudar a levantarme.
-Hola soy Minho.-Me dijo un poco sonrojado por haberle tomado la mano.-Disculparás al shank que esta ahí en el piso por haberte tirado.
-Está bien.-Dije.-No me dolió.
-Me preocupó que fuera a salir Minho es todo.-Dijo un poco molesto.-Soy Thomas, no shank.-Me aclaró sonriéndome.
-¿Dónde estamos?-Pregunté. Minho hizo un gesto extraño, como si la pregunta le hubiera hecho fuera algo que le costaba trabajo responder. Pero en eso alguien nos habló
-Minho y Thomas, tráiganla.-Nos gritó un chico que se veía más grande que todos los demás y que tenía la piel oscura.
Ellos obedecieron de inmediato así que supuse que debía ser el líder, en eso Thomas me dió la vuelta para quedar de espaldas a él y me sujetó de los brazos como si estuviera arrestada.
-Oye suéltame ¿Qué haces?-Le dije a Thomas
-Ah disculpa, ¿Te lastimé?
-No pero si me dolió.-Le contesté
-Perdón es solo para que no salgas corriendo de nuevo.-Y en cuanto dijo eso comenzamos a caminar.
-Eres rápida.-Dijo Minho volteándonos a ver.
Miré a Thomas y se veía en el rostro de ambos que era algo más que solo un cumplido.
-Gracias.-Me limité a decir
Llegamos a los 3 minutos, era bastante grande ese lugar, todos los chicos se habían acercado y las miradas comenzaron de nuevo. Todos hicieron un círculo y Thomas, Minho y el chico que me recibió que se llamaba Newt se quedaron atrás de mi y yo veía de frente al chico de piel morena.
-Hola, mi nombre es Alby y antes que nada, bienvenida al área novata.

The Maze Runner (Thomas, Minho y tú)Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu