Oí los pasos atrás mío y supuse que eran de Valeria. Ambas entramos en mi habitación y nos pusimos a buscar el teléfono.
Tras unos minutos, la voz de mi hermana me sacó de mi búsqueda.

-¿Se puede saber qué hace tu móvil encima del ventilador de techo?

-Esa es una muy buena pregunta para la cual no tengo respuesta. -le sonreí inocentemente, ella rodó sus ojos y me dió el móvil. En el habían varios mensajes, uso de ellos era de Alice y los otros de mi madre.

Alice: Ven al punto de encuentro y tráete a todos tus hermanos.

¿Qué? Eso no tiene sentido alguno. Es una de las estupideces más grandes del mundo entero.
¿Por qué querría ella juntar a todos mis hermanos en nuestro sitio de reuniones?

Yo: ¿Estas loca? ¿Como que lleve a mis hermanos?

Casi al segundo me llegó su respuesta.

Alice: Hazme caso, yo también voy a llevar a mis hermanos.

Miré incrédula el móvil y me giré a ver a mi hermana que, al igual que yo, estaba confusa por las palabras de mi amiga.

-Pregúntale para qué quiere que nos veamos todos.

Asentí y volví a dirigir mi vista hacia el móvil, formulando la pregunta.

• Yo: ¿Me puedes explicar el porqué de esta petición?

-Estamos en el siglo XXI, deja de utilizar tantas formalidades cuando hablas por mensajes. -rodé los ojos a lo dicho por Valeria y sentí mi móvil vibrar en la palma de mi mano.

O Alice ya se esperaba mi pregunta o tiene mucha práctica escribiendo mensajes, porque responder tan rápido no es normal.

Alice: Mis hermanos y yo necesitamos vuestra ayuda con la Rubia destroza familias. No preguntes más y date prisa.

Me reí escandalosamente y escuché la risa de Valeria a mi lado. -No han aguantado ni dos semanas. -asentí dándole la razón. -Supongo que a esto se refería Aaron.

-Supongo que sí. -nos quedamos unos segundos calladas y yo me senté en mi cama para ponerme las zapatillas. -Vamos, hay que encontrar a los demás y llegar cuanto antes al punto de encuentro.

-Vale, despierta tú a Andrea y ve a por Jacob, Ethan, Becky y Crawford. Yo me llevaré a James y buscaré a los demás. -Asentí de acuerdo con su idea y ella salió de la habitación. Yo volví a coger el móvil para darle una corta respuesta a Alice.

Yo: Enseguida estamos ahí.

Nada más salir de la habitación vi como Ethan y Jacob salían de la habitación del último nombrado.

-Dejar lo que quiera que estéis haciendo y acompañarme, que tenemos que ir todos a un sitio. -ambos fruncieron el ceño en mi dirección.

-¿A dónde? -ignoré por completo la interrogativa de Jacob y me dirigí a la habitación del glotón de la familia. Al abrir me encontré con Crawford mirando al vacío mientras se llevaba un puñado de doritos a la boca.

-Venga rarito, levántate de ahí que nos tenemos que ir -él hizo caso omiso a mis palabras y siguió comiendo. -Puedes comer tus doritos por el camino. -se levantó de la cama aún sin mirarme y salió de la habitación con una sonrisa en la cara, comiendo más. -¿Era tan difícil concederme unos hermanos normales? -pregunté mirando al techo sin esperar contestación.

Los cuatro bajamos las escaleras y vimos a Becky, aún con el móvil y con intenciones de subir arriba sin notar nuestra presencia.

-Ya te enfadas con él más tarde, ahora tenemos que ir al punto de encuentro, es urgente. -le quité el móvil y así conseguí su atención. Ella asintió comprendiendo mi punto, pero luego señaló a nuestros hermanos -Ya lo entenderás cuando lleguemos allí. -al parecer estaba en modo autista porque simplemente volvió a asentir y se dió la vuelta para ir hacia el salón.

Guerra de FamiliasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora