Un Triángulo Celoso

Magsimula sa umpisa
                                    

- ¡Claro que sí! - objetó el, ya furioso y lo que le seguía. Por alguna extraña razón, el que ella le hubiera devuelto la jugada era más amarga de lo que se lo esperaba. Y, para ella, en cierto modo era agridulce.

Para ese punto de la discusión, el tono se había elevado. Por lo tanto, Todos lo habían escuchado. Y el efecto de ese último punto, era que todos estaban pendientes de una exclusivísima discusión entre los que ellos denominaban, la pareja del año. Justin Bieber, el más popular, reservado y "Guapo" joven de todo dreams, y _____ Tried, una torpe chica que se había metido con las personas incorrectas. Incluyendo entre ellas, Justin. 

- ¿A sí? - alzó ambas cejas, y se pasó sus manos por su larga cabellera, intentando comprender un poco la estúpida y egocéntrica mentalidad del rubio color canela. - ¿Quién? - lo retó con su mirada propia. - Dime, ¡¿Quién puedes llegar a ser tú en mi vida?!

- Pues yo... - el.... no era nadie en su vida. Ni su padre; ni su hermano. Ni primo, ni tío. Ni amigo, ni maestro. Ni novio. Nada, absolutamente nadie. Esa era una posibilidad que nunca antes había contemplado, tal vez porque siempre significaba alguien para alguien, pero ____ siento tan distinta e independiente, ella le era totalmente indiferente. ¿Cómo poder comprender algo a lo que jamás de has enfrentado?

_____ comprendió en la mirada de Justin que él había entendido su teoría. Por un momento, no se sintió segura de ese hecho; del hecho de que Justin no fuera alguien en su vida. Si lo era... aunque el orgullo, ostentoso, poderoso y manipulador jamás lo dejara admitirlo. A veces el orgullo llegaba a ser tan fuerte, que ni siquiera se lo podía admitir ella misma, dentro de su cabeza, lejos de cualquier otra persona. 

La chica se acercó peligrosamente al desencajado Justin, compartiendo oxígeno. Y sin decir palabra alguna, sonrió irónica, casi burlona, mientras que Justin seguía en buscas de respuestas. Al final de todo, el rey narcisista había encontrado una rebelde que iba contra la corona, creando sus propias reglas, independizándose de los escaparates y las tendencias. Ella era demasiado.... Ella. 

- Tú, no eres nadie. - Habló ella, labio con labio, mirada con mirada, mientras que lo enfrentaba, por primera vez ganándole pisada a él. - Esto no es un juego. Ya nada es un juego. Eres un inmaduro. Un niñito que piensa que todos estarán a tus pies cuando lo necesites. - _____ rió, y tiró su cabeza hacia la derecha, sin percatarse de los infinitos pares de ojos que la seguían con cautela. - Un niñito que por ser tan infantil, inmaduro y llorón, se queda solo. Tú te quedas solo, Bieber. - y sin más, ____ se alejó hacia otro costado de la playa, dejando a Justin desencajado y si saber a dónde mirar.

Por primera vez en su entera vida.

...

De vuelta en el campamento, los chismes no se hicieron esperar ni para disimular un poco. Habían regresado todos juntos por el que era el camino más corto desde la playa hasta el camping, por lo que era casi imposible no percatarse de la mirada ausente de Justin, y del silencio que provenía de ______. Todo empeoraba por supuesto, cuando algún idiota se acercaba alguno de ellos y lo miraba con cara de "Pobrecito(a)". Idiotas sin vida propia, eso era lo único que eran.

Cuando llegaron al área del campamento, todos se fueron dispersando mientras iban a dormir. Poco a poco el exterior se quedaba solo. ____ Y Anna ya estaban en su casa de campaña junto a las otras chicas: Anna durmiendo, y ______ intentándolo con todo su ser. 

Aunque hubiera hablado totalmente enserio, no pudo evitar que el corazón no se le rompiera con la mirada de Justin, tan perdida. Ahí si se veía como un niño pequeño que buscaba refugio... y el corazón de _____ ser aguadó. Sin embargo no iba a estar aguantando semblantes de celos, ni aunque Justin fuera su "Novio" lo haría. Los celos son malos, obsesivos y matan, más aun cuando lanzan las alarmas de cuando "Los hombres quieren vestirte cuando quieren". Esas son solamente señales de que estas en problemas si continúas con esa relación.

Por lo que, ¿Celos de alguien que no es mi pareja? Ni aunque estuviera loca. 

Cuando todos se encontraban dormidos, Justin decidió salir. Su torso desnudo, con su short para dormir y descalzo en la tierra. Así lo encontró Laine cuando lo vio caminar hacia los troncos de la fogata. 

Ella lo había visto todo: Los celos de Justin, su discusión, todo. Y entonces descubrió que a ella también le dolía el hecho de que el viera tanto interés en tried.

Un triángulo de Celos, Rencores y Secretos Amorosos.... ¿Peor combinación que esa?

- Justin. - habló ella, acercándose cautelosamente hacia él. Justin miró por sobre su hombro, encontrándose a la angelical mujer que lo había traído de cabeza los últimos años. ¿Cómo cambiaba todo tan repentinamente? - ¿Insomnio? - Preguntó ella. Él sonrió, y ambos quedaron frente a frente, para poder hablar claramente. 

- Un poco. - admitió a regaña dientes. Laine hizo una mueca extraña con sus dientes, una que a Justin siempre le había parecido tierna, y bajó su mirada hacia los pies del chico. 

- Justin... ¿Podemos Hablar? - Laine lo miró con miedo, nerviosismo y timidez. Justin frunció el ceño y aceptó con un asentimiento de cabeza bastante claro.

- Claro, ¿Qué pasó? 

- Aquí no. - dijo ella, eh inconscientemente colocó su mano sobre el pecho desnudo del chico. El corazón de Justin latió fuertemente, y ella sonrió entre risas. - Maestra, Estudiante. ¿Recuerdas?

- Claro. - Dijo Justin, y sonrió también. 

Sin decir palabra alguna, ambos decidieron caminar hacia los frondosos árboles. Una vez que se perdieron entre ellos, Laine le tomó la mano. ¿Qué ocurría? Laine jamás era así de.... expresiva, por decirlo de algún modo.

Pero ese día, Justin se sentía diferente.

Laine se sentía diferente.

Todo era diferente, y todo eso por unas simples palabras de ____ hacia el:

Tú no eres nadie en mi vida.

Con eso, Había dejado a Justin pensando y analizando todo. Con eso, él se dio cuenta de que era verdad.

- Justin... - ella le tomó la mano, y entrelazó sus dedos. Justin se sentía frenético; por un momento olvidó a _____. Y otra vez, Laine era su todo. Laine colocó su mano izquierda en el musculoso brazo de Justin, y tan solo sonrió. - Te quiero. Lo sabías, ¿verdad?

- Siempre quise pensar que sí. - dijo el, y Laine se cohibió. Laine, ____. Tan diferentes. Tan iguales. Ambas sabían cómo volver loco a Justin de un modo particular, único y exclusivo de cada una. 

- Te quiero. - dijo ella, y sonrió. 

- Yo también te quiero. - dijo el, sosteniendo con más fuerza aun la mano de ella, tan delicada de una muñeca de porcelana recién salida del empaque. Laine era un Ángel, en prácticamente todos los sentidos de la palabra.

El tiempo no importaba; las palabras sobraban en ese momento. Para Justin, la sonrisa de esa mujer era lo único que estaba en su presente. Ni siquiera ______. No...

Ella no.

Ella no podía ser alguien buena para Justin, no podía porque eran dos polos opuestos. Negativo y Positivo, Blanco y negro, agua y aceite. Alguna clase de sustancias que si las juntas, crean explosiones. Y Crean desastres.

Justo al momento en que el pensamiento de "Quizás realmente me estaba confundiendo con ______..." fue el segundo exacto donde Laine se paró en puntas, enredó sus brazos alrededor del cuello de Justin, y lo besó. Su primer beso, bajo la luz de la luna oculta entre las hojas de los árboles.

Laine y Justin pasarían a ser algo más que amigos esa noche, la misma noche en que _____ se había encargado de poner a Justin Bieber en su lugar.

~C o n t i n u a r a 

¿Quien entiende a los hombres? (Justin Bieber y tu)《Terminada》Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon