Es Igual A Mi...- Sirius Black

#41- La verdad.

Anna bajaba con toda prisa de las cocinas. Dentro de unas horas era el partido contra Ravenclaw. Estaba un poco nerviosa, si perdían el partido, perderían la copa de Quidditch. Si ganaban, tendrían la revancha con Slytherin. Estaba tan concentrada en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando chocó con alguien.

-Lo lamento- murmuró, levantando la mirada- Oh, Reg, hola.

El chico le sonrió.

-Hola, Ann. ¿Cómo estás para el partido?

-Nerviosa- rió, negando-.

-Escucha... necesito hablar contigo.

-Hablemos- se encogió de hombros la chica.

-Ahora no, concéntrate en el partido- le sonrió, dándole un beso en la mejilla- Quiero la revancha en la final.

-¡Ahora verás, Black!- rió, recordando que la última vez Regulus había tomado la snitch antes que ella- Juro que ahora ganaremos.

-Ajá, sigue pensando eso- sonrió alejándose de ella- Te veo luego del partido, Jordan.

Sonrió, mientras caminaba a buscar su escoba, para poder ir a la "rutina de precalentamiento" de James.

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Vio la snitch cerca del pie de Jonhson, el guardián de Ravenclaw. Voló lo más rápido posible hacia allí, el buscador de la casa azul. Bufó, luego ver cómo una buggle se acercaba a ella, se hizo a un costado, esquivando el balón. Volvió a dirigir su mirada tratando de saber si la snitch estaba ahí.

-Maldita sea- murmuró, al notar que la pequeña pelota dorada había desaparecido-.

Luego de un rato vio que Kitten, el buscador de Ravenclaw, empezó a volar a toda velocidad. Anna vio a dónde se dirigía, un destello dorado fue lo que vio. Voló lo más rápido posible, mientras veía como la snitch comenzaba a moverse de nuevo. Fue atrás del objeto, estando a unos pocos centímetros. Estiró su mano, sosteniéndose de la escoba con la otra, tratando de alcanzar la snitch. Bufó, acariciando la pelota con los dedos. Cuando por fin la tuvo, se resbaló de la escoba, cayendo al suelo.

-¡Gryffindor gana!- gritó el locutor- Jordan tomó la snitch y se llevó el partido con 360 puntos. También se llevó un golpe contra el suelo muy doloroso.

-¡Vete a la mierda, Cooper!- le gritó la chica, mientras se levantaba dolorosamente-.

-Solo si es contigo, hermosa- le sonrió, mientras Anna escuchaba a Sirius gruñir.

-No, Black, se un buen perrito- le sonrió, mientras el ayudaba a que se parase.

-Déjame que lo muerda- pidió el azabache.

.-.-.-.

Regulus estaba sentado, cerca del lago negro, esperando a Anna. Suspiró, no estaba seguro de lo que estaba por hacer, pero igualmente lo iba a hacer. No podía seguir viviendo de esa manera.

—Tierra llamando a Regulus.— llamó, tratando de tener la atención del chico, lo cual logró—.

El chico miró a su amiga, sonriéndole. Aunque estaba muy nervioso.

—¡Estoy aquí!— rió, mientras Anna se sentaba junto a el—.

—Dime, ¿de qué querías hablar?

—Quiero contarte algo— soltó un suspiro— ¿Recuerdas cuando fui a buscarte a la casa de Evans? Bueno, esa misma noche me iniciaban, por eso estaba tan nervioso... Soy uno de ellos, aunque no quiera. Tengo la marca, Ann.— la chica lo miró con una mezcla de pena y cariño— Eso no es todo. No me mires así, hace más difícil decirte lo que quiero decir. Anna, antes que nada, lo lamento. No pude controlarlo y tampoco pude negarme. La noche que nos hicimos la marca, se nos iba a asignar una misión. Alguien le dijo al señor que... que yo era tu amigo. Me dieron una misión imposible. Una misión que no puedo y quiero cumplir.

—Reg, no debe ser tan malo— trato de consolarlo—.

—Anna, no entiendes. Mi misión eres tú. Es traerte a nuestras filas. Estar contigo. Vigilarte y controlarte.

Anna tragó saliva, viendo al chico un poco sorprendida.

—Yo no quiero hacerlo. Pero tengo miedo, Anna. Si no lo hago nos matará a mí y a mis padres. Pero tampoco quiero traicionarte— murmuró, con la mirada baja.

—Rugulus— lo llamó, tomando una pausa— Tranquilo. Me propuse no preocuparme por ése tipo de cosas. ¿Qué dijiste hasta ahora?

—Dije que comenzaba a hablarte de éstas cosas. Qué me hice más cercano a ti. Ése tipo de cosas. Cissy me ayuda, inventa algunas cosas en las reuniones.

—¿Cissy?— murmuró, sonriendo— ¿Me haces un favor?

—Es mi prima... Dime.

—La conozco. Dile a Cissy que la extraño y que, a pesar de que ya no estamos del mismo lado, sigue siendo una de mis mejores amigas— le sonrió— Sobre tu problema, vas a seguir haciendo lo que haces. Ya pensaré algo para cuando salga.

—¿Conoces a mí prima?— ella asintió— ¿No estás enojada por lo de la misión?

—Nop, solo que me deberías haber dicho antes. Te ayudaré a solucionarlo, Regulus. Eres mi amigo.— abrazó al chico— No te librarás de mi...

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Catta, si lees esto, aguante Holanda. Adivina quién soy (?