Fueguitos (Natsu Dragneel x reader) [ACABADA]

Cap 1-¿Magia?

Siempre me he preguntado. ¿A todos los humanos los transforman en demonios? ¿O solo a nosotros? Pues parece ser que sí, somos los únicos que hacemos esto.

También al investigar he encontrado algo parecido a lo que nosotros usamos, se le llama magia. Parece que hay un grupo de gente que la usa para hacer el bien, como si fuese un oficio, se les llama magos. Cada mago pertenece a un gremio, que es como un lugar al que pertenecen una serie de magos con un jefe desde donde se les dan misiones de distintos tipos.

Hay un gremio que ha llamado toda mi atención, se llama Fairy Tail. Es un gremio que causa un montón de problemas, y casi todos sus integrantes son de mi edad o un poco más grandes. Del que más he leído es sobre Titania, y también del Salamander. Es un chico de mi edad, tiene el pelo rosa y dicen que siempre lleva una bufanda que es supuestamente de escamas de dragón.

-¡¡¡¡__!!!!- Guardé mi revista semanal algo asustada. -¡¿Otra vez distraída?! ¡¡te he dicho miles de veces que dejes la mierda de Fairy Tail y vayas a practicar tus poderes!! ¡¿acaso estás sorda?!- Me gritó como hacía papa últimamente.

-Lo siento- Siempre tenía que decir eso, pero no conseguía nada a cambio. Menos golpes y más golpes en cada parte de mi cuerpo por parte de papa. Todo desde que mama se convirtió en otra.

Me dio por última vez en la tripa una patada. -¡¡Y como lo vuelvas a hacer lo pasaras peor, ¿me oyes?!!!- Contesté un sin sonoro "sí". Se fue y yo decidí tener una nueva etapa en mi vida.

-Ya estoy harta de esto, al ser la única demonio entre los chicos me han dejado de hablar, papa y mama ya no me quieren......¡¡¡pienso huir de casa!!! ¡¡Y me uniré a Fairy Tail!! Aunque tenga que mentir sobre mi verdadero ser- Pensé mientras cogía lo necesario.

Mientras que todo el mundo estaba en sus apartamentos o comiendo aproveché para salir y decirle adiós para siempre a este infierno.

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-¿¡Cómo te atreves a molestarme?! ¡¡estaba trabajando así que no me vuelvas a traer otra bolita de arroz!!- Me giré y vi una híper mansión. Allí se encontraban un señor mayor con bigote rubio y una niña de mi misma edad rubia, ella estaba llorando y él le estaba gritando.

-Yōsei no dansu- Susurre para que un montón de hadas de luz bailasen alrededor del señor, para que cayese dormido.

-¿Qué es......esto....?- Y cayó en su sueño profundo. Me giré a ver a la niña rubia.

-¿Quién eres?- Me preguntó asustada, aunque yo también lo estaría.

-Puedo ser tu mayor felicidad, o tu mayor pesadilla, ¿cuál de las dos prefieres que sea?- Le pregunté con voz fría, distante.

Ella se tranquilizó y me sonrió ampliamente. -¡¡Quiero que séas mi amiga!!- Pero yo solo me sorprendí ante su respuesta.

-Denegado- Me di la vuelta.

Pero ella me paró agarrándome de la mano con las dos suyas. -¿Prometes que volverás a verme?-

-No te prometo nada- Me solté y me fui, pero a la noche volví a ver que tal estaba.

-¿¡Quién narices era esa mocosa?! Se atreve a hacerme eso....¡¡¡la mataré!!!- Gritó el señor del bigote, creo que es el padre de esa niña.

-¡¡No le harás nada!!- Me quedé mirándola. -¡¡Porque ella es mi amiga, y a prometido venir a verme!!- Me sorprendí. Y antes de que su padre la tocase hizo otro truco para que se quedase quieto.

-'Megami! !- Se quedó quieto en sus sitio, lo único que le permitía mover eran sus ojos, la nariz pare que respirase y la boca. -¿Quién dijo que me iba a matar? ¿y que le ibas a hacer a ella qué?- Dije mientras saltaba desde la ventana y caía de forma heroica al suelo.

-¡¡Tú eres la niñata de antes!!-

Sonreí de forma burlona al verle la cara. -No soy la niña esa, me llamo __ y a partir de ahora viviré en tu casa, para proteger a esa tonta rubia de ti, su padre- Me acerqué a la niña, la cogí de la mano y me la llevé a cualquier otra sala. Al llegar la hice sentarse. -¿Y? ¿por qué tu padre te pega?-

Agachó la cabeza. -Mama murió y él desde entonces es así, le importa más el trabajo que yo, ¡pero me da igual, ya que seré una gran maga celestial como mama y me uniré a Fairy Tail! ¡ya que ellos me salvaron!- La mire por segunda vez sorprendida.

-¿Quiere unirse al mismo sitio que yo?- Me pregunté algo cansada. -¿Y cuál es tu nombre?-

-¡Lucy, Lucy Heartfalia!- Sonrió otra vez.

-__- Me di la vuelta, me acosté y me dormí. -Esto va a ser difícil- Pensé, pero con el tiempo le fui cogiendo a Lucy cariño, tanto que no podía dejarla sola. Era demasiado frágil.

Un día decidimos dar un paseo por la ciudad de Harujion. Aunque tuvimos que tomar el tren.

Fuimos lo que quedaba de camina en carro pero al parecer nos atacaron ya que este estaba volcándose. -¡Lucy!- Grité y luego la empuje afuera para ponerla a salvo. El carro se quedó quieto, aunque estaba por caerse a un acantilado que se había provocado con el ataque. -Mierda- Susurré.

-¡¡__!!- Gritó Lucy, para que luego el carro cayese y no me quedó otra más que cerrar los ojos. Del miedo no pude evitar gritar.

Esperaba el dolor, pero no llegó. Supongo que morí de forma rápida. Abrí los ojos y vi unos pelos rosas moverse al compas del aire. -¿Estas bien?- Una bufanda blanca con rayas negras me dio un poco en la cara.

Me levanté y vi mejor a la persona que me había salvado. Era un chico de pelo rosa, alto, ojos de color jade oscuros y la bufanda era blanca, pero parecían escamas de un dragón. En su brazo derecho, parte del hombro, tenía la marca de un gremio de color rosa. -¿Eres de....Fairy...Tail?- Pregunté sorprendida.

Él asintió un poco dudoso. -Bueno, yo ya me tengo que ir. ¡Ah sí! Mi nombre es Natsu Dragneel, ¿y el tuyo?-

-__.....me llamo __- Le miré sonrojada.

Y se fue, para no verle.

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Sonreí al recordar como le conocí. -Después de todo, te he podido volver a ver Natsu.......vuelve pronto por favor- Miré al suelo y decidí irme a investigar.