¿Quién conoce realmente a Draco Malfoy?

cap. 32 Batalla (parte II)

-No soy un bebé, huroncito. -me miró fijamente, ofendida.

-Lo sé, pero Hermione me mataría si te pasa algo. -la cogí del brazo y corrimos por el pasillo, esquivando trozos de pared, mortífagos y alumnos que peleaban con verdadera saña- Hay que reconcer que nuestros compañeros les tenían bastantes ganas.

-No veas el infierno que hemos vivido. Ni te lo imaginas.

-¿Tú crees? Yo he tenido a Voldy de okupa en mi casa todo el curso -Ginnysoltó una carcajada. Llegábamos al tercer piso cuando una fuerte explosión nos tiró al suelo- ¿Qué demonios....?

Parte de la fachada había desaparecido. Por el hueco podíamos ver a los cientos de mortífagos que lanzaban embrujos desde el Bosque. De repente Ginny soltó un alarido y salió corriendo hacia los escombros. Intenté agarrarla pero resbalé con algo. Cuando pude levantarme, me encontré cara a cara con Potter, Hermione y uno de los Weasley mayores (Percy, creo). Y todos miraban al suelo. Bajé la mirada y me encontré con uno de los gemelos (nunca he logrado distinguirlos) allí tirado, los ojos abiertos, sin vida. Todos estaban petrificados por la sorpresa y el dolor. Pensé en dejarles unos minutos, pero una araña del tamaño de un elefante decidió que el interior del castillo era mucho más interesante que los jardines.

-¡CORRED! -cogí a Potter y a Ginny del brazo y los empujé hacia la pared, lejos del bicho.- ¡EXPELIARMUS! -la araña salió despedida por el hueco, pero otras muchas trepaban hacia nosotros. Giré a Potter para que me mirara- Sácalos de aquí. Él ya ha muerto. No queráis uniros a él.

Asintió con la cabeza. Entre él y Weasley cogieron el cuerpo del pelirrojo muerto y lo ocultaron detrás de una estatua. Percy cogió su varita y salió corriendo detrás de un mortífago, la cara inexpresiva. Cabeza de zanahoria intentó seguirlo, con las mismas intenciones, pero logramos refrenarlo entre Hermione y yo. Potter le sujetó por los hombros, intentando calmarlo.

-Ron, se ha ido y no podemos hacer nada. Ahora nuestra prioridad es encotrar la serpiente y matarla. Entonces esto no tardará en acabar.

-¿Qué serpiente? -pregunté. A estos se les ha ido la pinza.

-La mascota de Voldemort -Potter seguía sujetando a su amigo, que parecía mucho más calmado- Es el último horrocrux. La matamos y Voldemort será mortal otra vez.

-¿Nagini un horrocrux? -me extremecí- Lo vais a tener un poco dificil. Por lo poco que he visto, el Señor Tenebroso nunca se separa de ella.... aunque ahora lo entiendo.

-Pues tenemos que matarla como sea.... -Potter se dobló por la cintura. Weasley y Hermione le miraron preocupados- Está en la Casa de los Gritos. Ha mandado llamar a Snape. Está con tu padre, Malfoy.

-Se lo regalo. -A ver si de una vez le mata y me hace el gran favor de mi vida.

-Tenemos que ir allí.

-Ve tú con Ron, Harry -Hermione se quedó a mi lado- Nosotros vamos a tratar de ayudar aquí. Nos están superando.

Se cubrieron con la capa de invisibilidad y desaparecieron. Nosotros buscamos por dónde empezar. Aquello era el mismísimo infierno.

HERMIONE P.V.O

McGonagall parecía estar disfrutando lo suyo. La vimos pasar liderando una manada de pupitres desbocados. Al final vimos a Parvati, Lavender y Neville. Este último llevaba una Tentacula Venenosa en las manos, y la planta estaba disfrutando de lo lindo agarrada al cuello de un mortífago. Cuando estábamos a punto de alcanzarlos, Greyback saltó sobre ellos, atrapando a Lavender. Grité, aterrorizada. Draco soltó una maldición y corrió hacia ellos. Cuando estuvo a su altura, aparecieron las espadas que tanto me fascinaban. Greyback soltó a Lavender, que se quedó en el suelo inmovil. ¡Que no esté muerta, que no este muerta!