Capitulo ·2·

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Llegue a mi casillero, lo mas rápido que pude. Cambie mis cuadernos por los de la siguiente clase, salí casi corriendo de ahí. Me había tardado demasiado en el asuntito de Alonso, que se me había olvidado el examen de Ciencias ll. Nunca me gustaba llegar tarde y menos si iba sola. Mi mejor amiga se encontraba enferma, y no había asistido durante una semana. Lo bueno de todo eso, era que era viernes. Y Hannia había faltado todo una semana para ¨recuperarse¨de su resfriado y poder salir el viernes por la noche, al nuevo club de adolescente en el centro de la ciudad. Era lo único bueno, de ese maldito día por que lo demás apestaba.

-Tarde de nuevo señorita Navarro.

-Lo se y lo siento. Pero tuve algunos problemas.

-Si la escuela entera se entero de su pelea con el señor Villalpando.

-¿¡Toda?!-dije incrédula.

-En efecto, ahora pase por su examen y después a su lugar.

Seguí las indicaciones de la maestra de Ciencias ll, y trate de concentrarme en las preguntas. Leía y releía palabra por palabra, pero me era imposible concentrarme. Los labios de Alonso seguían impregnados en mi cuello, como una herida reciente.

Y podía jurar, que sentía que ardían en mi cuello. Con el reflejo de mi iPod, observe mi cuello, dos marcas rojas, una arriba de la otra. ¡Maldito fuese Alonso! ¡Mil veces maldito!. Lo odiaba. ¿Como pudo atreverse a hacerme esto?, menuda idiota.

El timbre sonó y yo solo llevaba dos de tres hojas contestada. Todos salieron como animales mientras yo me quedaba.-Me temo que tendrá que compartir clase con los de ¨3·A¨-Hablo la maestra haciéndome mirarla. Los de 3·A, maldije en silencio. La clase de Alonso, suspire y re-voltee los ojos.

Al cabo de algunos segundos, la clase ¨A¨ comenzó a entrar al salón, no mire a nadie y me concentre al examen que estaba enfrente a mis ojos. Me había calmado un poco, pero todo se desvaneció al escuchar su voz, su risa. Una melodía para mis oídos.

Aunque me negase admitirlo de apresure a acabar el examen.

-Hola gatita-dijo cerca de mi oído.-Es un orgullo saber que esas marcas que traes en el cuello fueron hechas por mi.

-Estoy ocupada, imbécil-Murmure.

-Ya veo gatita, pero estas sentada en mi lugar.-Lo mire algo nerviosa.

-También es el mio.

-Si pero es la clase ¨A¨no la clase ¨B¨, tu hora a pasado gatita. A si que quiero mi asiento.

-¿No puedes sentarte en otro lugar?.

-No-Sonrió-Dame mi asiento puedes sentarte en mis piernas si quieres.

-Es lo ultimo que haría en la vida-Lo mire murmurando y este acerco su cara hacia mi, otra vez estábamos cerca. Que no evite mirarlo a los labios, tan carnosos, tan rosados ¡Dios!.

-Eso ya veremos, por que se que suplicaras, por estar bajo mi cuerpo, por que te penetre hasta el fondo-Entre cerré los ojos y lance un suspiro- Por que entre en ti y gemirás mi nombre- Se acerco a mi oído-No sabes lo duro que me pones -Mordió el lóbulo de mi oreja delicadamente.

-Me das asco-Dije y me pare de ahí tomando mi examen.

-Quédate ahí gatita, puedo sentarme atrás-Dijo sonriendo. Lo more por segundos y después volví a sentarme. La maestra entro y toda la clase ¨A¨, le pusieron atención. Repartieron los exámenes y después el silencio inundo el salón.

Al cabo de la pregunta #38, una bola de papel cayo enfrente de mi. Suspire estresada y la abrí ¨Tengo una muy buena vista de tu trasero desde aquí gatita¨. Apreté los labios nerviosa ¿En verdad estaba viendo mi trasero? ¡Claro!. Sin pensarlo me sonroje, tome el plumón negro y escribí ¨¿Es una especie de cumplido? déjame decirte que no funcionara de nada¨. Lo aventé hacia atrás y escuche su risa, haciéndome estremecer ¨Tómalo como quieras, ese shorts se ajusta muy bien a tu cuerpecito gatita (Multimedia). Por cierto tu piel es demasiado deliciosa¨. Me estremecí por un segundo quise seguirle el juego, pero no lo haría. No caería tan bajo, yo no. Me apresure a terminar las dos ultimas preguntas.

Termine el examen y me levante, lo deje en el escritorio de la maestra quien me miro sonriendo.

-No te acostumbras a tardarte en los exámenes _____. ¿Pasa algo?

-¡No! no, para nada. Solo tengo un poco de flojera.

-Duerme bien, no quiero que se vuelva a repetir. Anda ve por tus cosas .-Sonreí y asentí-. Me pare frente a mi asiento y me agache a tomar mi mochila. Alonso me miraba sonriendo.

-Ese top y la chaqueta se ajustan bien a tus pechos, gatita-Susurro, lo mire sin mucha importancia y comencé a guardas los lapices. Al termino me levante y gire; sentí una nalgada y me gire bruscamente. Alonso estaba viendo su examen, pero con una sonrisa perversa. Luego me las pagaría, lo único que quería era salir del salón donde prácticamente me sentía asfixiada y acalorada ¨Síndrome de excitación hacia alguna persona _______¨dijo mi vocecita interior. Quizás tenia razón pero la ignore.

Secret Sex ·Alonso Villalpando· {Hot}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora