Hace mucho tiempo, los guardianes de los cuatro elementos se unieron en uno solo, formando una gran esfera de fuego, agua, viento y luz, a la cual llamaron Tierra.
Pronto, su creación cobró vida propia, saliendo de su interior miles de criaturas hermosas, llenas de ilusión y felicidad. De los árboles nacieron pequeños seres, denominados Ninfas, que argumentaban la vida con música y canto. Del agua, nacieron criaturas hermosas que regaban los campos y creaban nubes blancas, que pintaban el cielo con alegría.
Todo era precioso y pacífico, hasta que un día, el guardián del fuego emergió a la superficie. Los campos se tiñeron de un color marrón horrendo y las nubes tomaron un color grisáceo. Los árboles marchitaron sus hojas y un permanente frío de instaló en la Tierra.
Viento, Agua y Luz, siendo los guardianes más débiles, intetaron, con éxito, salvar de aquella condena un trocito de Tierra, al cual denominaron el Claro. En aquel lugar, siguió reinando el color, la esperanza y la paz.
El resto, fue gobernado por el guardián del fuego hasta el final de sus tiempos. De la ira más caliente y escondida del guardián, nacieron unos seres independientes, llamados Humanos, capaces de elegir, entre seguir a Bien o a Mal.
De esta manera, la Tierra quedó dividida en dos partes, el Claro y la Vida.
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Ámbar. #Wattys2016
Fantasy-¿Para qué utilizas esto?-en sus manos descansaba una vela de cera sin prender, fue entonces cuando Ian se dio cuenta de que, en ausencia de la luz de las velas y sin tener las ventanas abiertas, la estancia estaba tan iluminada que parecía que el...
