Fantasías Eróticas

5. Lanzando el anzuelo

―Gracias, fue el trabajo de un decorador profesional y tú... te ves realmente diferente de la última vez que te vi.

―Diferente de un modo positivo, espero ―respondió Jayden metiéndose en su papel de mujer adulta.

―Muy positivo ―dijo Yunho con voz ronca―. Estás hermosa.

―¡Que sorpresa! ―exclamó Bo Ah, acercándose para saludarla con un beso en cada mejilla―. Como dijera Yunho, estás muy hermosa. 

―¡Muchas gracias! ―Jayden sonreía complacida, se sentía bien ser aceptada por ambos.

―Yunho ―Bo Ah se dirigió a su esposo―, ¿irías por una botella de vino?

―Enseguida, mi amor ―dijo éste dándole un beso en la mejilla.

Yunho bajó hacia el sótano, allí tenían una cava de vinos. Tomó una botella de vino tinto. Recordó su conversación de esa  mañana. Mientras se cepillaba los dientes, Bo Ah, de pie en la puerta de baño le hizo una sugerencia que en ese momento le pareció ridícula.

―Me agrada la chica del pastel de queso para la fantasía del trío.

Se enjuagó la boca lo más aprisa que pudo y lanzó su negativa de inmediato.

―¿Estás loca?

―¿Loca por qué? ―Bo Ah seguía recostada a la puerta de baño―. Mientras más lo pienso, creo que es la chica adecuada. Es linda, manipulable y virgen. Lo prefiero así por cuestiones de salud. Su hermana podría pegarnos algo.

―Ya ni me acordaba de su hermana; pero, ¿ella? ¿No crees que sea demasiado joven? Debe tener unos dieciséis. Además, como sabes que es virgen, las niñas de hoy son bien precoces. Y en todo caso, en ninguna de mis fantasías está hacerlo con una virgen.  Ya tuve suficientes vírgenes en mi vida. 

―Lo de virgen es por salud, en cuanto a su edad, en realidad tiene dieciocho ―continuó Bo Ah― y como aún sigue en preparatoria... podrías cumplir dos de tus fantasías, en una sola.

―Nunca dije que quería dormir con una chica de preparatoria, sino que tú te vistieras y aparentaras ser una. Como lo de la violación, en realidad tú no querías ser violada, solo querías que yo actuara como si lo estuviese haciendo.  Es lo mismo en este caso, no soy un pervertido que anda seduciendo niñas de preparatoria.  

―En otros países ella ya es considerada mayor de edad, piensa que está a un paso de tener veinte. 

―No lo se, se me hace muy aniñada.

―No la rechaces aún, la invitaré a cenar y después hablamos.

Yunho se pegó de su mujer y la rodeó por la cintura.

―Está bien ―le dijo―, pero si después sigo pensando igual, entonces olvidarás esa idea y seguiremos buscando.

―Trato hecho.

Solo había bastado abrir la puerta y verla con ese vestidito rojo, para estar totalmente de acuerdo con su mujer. Vestida y arreglada de aquel modo, dejaba a la vista unas curvas que no había notado antes. Era hermosa e imaginarla a ella y Bo Ah en la misma cama, jugueteando, ambas dispuestas para él lo ponía a mil. Cuando regresó a la sala, Bo Ah le mostraba algunas fotografías de su luna de miel. Incluso una donde se bañaban desnudos en una cueva. Aunque no se veía nada se notaba que no llevaban ropa.

—Esa fue en una playa nudista —dijo Bo Ah con naturalidad.

—¿Una playa nudista? —Jayden se sonrojó—. ¡Entonces... ustedes estaban desnudos en esa foto!