Yo ¿una princesa? y tú ¿mi guardaespaldas?

Capítulo 1

Escucho mi despertador sonar y seguido de eso escucho a Sara mi madre adoptiva entrar en mi habitación. Si madre adoptiva, no soy capaz de decirle mamá ya que esa palabra la estoy guardando para cuando encuentre a mi verdadera madre. La mayoría de personas odiaría a sus verdaderos padres por haberles abandonado pero yo no, yo pienso que tuvo que haber algún problema al yo nacer y que por ese problema decidieron darme en adopción. Lo primero que haría sería preguntarles el por qué haberme abandonado y si fuese por que no me querían les empezaría a odiar pero primero necesito saberlo y así saber si se merecen mi perdón o no. Lo único que tengo de ellos es un colgante en forma de un corazón hecho de oro y que por detrás tiene grabado una flor que es una rosa. Es lo único que tengo y siempre lo llevo encima soy incapaz de quitarmelo ya que al hacerlo me siento vacía como si perdiera una parte de mí.

-Alexa venga arriba que toca clase y el lado bueno es que es viernes, venga cariño arriba.

-Ya voy Sara -la escucho salir de mi habitación y me levanto de mi cama.

Voy hacia mi ropero y escojo unos pantalones vaqueros ajustados con una camiseta suelta de tirantes en rosa y una chaqueta vaquera del mismo color de los pantalones. Cepillo mi pelo y lo dejo suelto, coloco bien el collar y me pongo unas vans a juego con mi camiseta. Me miro en el espejo y noto que mi color de pelo se está poniendo más rubio y mis ojos verdes están muy brillantes. Mi cuerpo es el normal en una chica que le gusta la natación y disfruta de este deporte lo máximo que puede.

   Voy bajando las escaleras de mi casa cuando escucho a Sara hablar por teléfono e intento saber de qué habla.

-sí....está muy bien... No, no sospecha nada además todavía no ha llegado él -¿él?- quedan unos meses y no podremos hacer nada... -me muevo un poco incomoda provocando que la madera del pasamanos al que estaba apoyada cruja y Sara parece darse cuenta- será mejor que hablemos después hasta luego. ¿Alexa? -me llama y decido desatarme el cordón de mis zapatos para que no sospeche que he estado allí escuchando.

-Si Sara espera que se me a desatado el cordón - la veo asomarse y sonríe

-Te queda muy bien esa camiseta que te regalé -dice con una sonrisa. Esta camiseta me la regaló por mi día, la semana pasada.

   Termino de bajar las escaleras y ella se acerca a mi collar y me lo coloca bien.

-¿Le tienes mucho cariño verdad? -dice refiriéndose al collar.

-Obvio, me lo dieron mis padres antes de darme -digo con una lágrima en el ojo.

-Ay cariño ven -me acerca a ella y me da un abrazo. -Anda ve y desayuna que vas a llegar tarde. -asiento y voy a donde está el desyuno.

   Cuando termino de desayunar me coloco la mochila y salgo de mi casa pero no sin antes darle un abrazo a Sara.

-¿Donde está Andrés? -él es mi padre adoptivo solo le veo a la hora de comer y cenar, tiene mucho trabajo en la oficina.

-En la oficina como siempre cariño. ¿Hoy vas con Lucía? -Asiento, Lucía es mi mejor amiga, ella es la única que sabe sobre mis planes para cuando cumpla los dieciocho. En vez de mejor amiga se merece ser mi hermana la quiero más que a nada.

   Me da un beso y salgo de casa voy caminando hasta que llego al punto de encuentro de Lucía y mío, la veo venir hacia mí con una sonrisa, al llegar a mí me da un abrazo y comenzamos a ir hacia el instituto. Ella tiene el pelo castaño y los ojos azules como el mar, me encantan sus ojos, ella está igual de proporcionada que yo y así aprovechamos para compartir la ropa, somos casi iguales en todo y ambas practicamos el mismo deporte.

-Alexa te tengo que contar una cosa muy fuerte -dice ella ilucionada.

-A ver si adivino, mmm, Pablo te ha pedido una cita -ella se sonroja al momento y yo río.

-Se me nota mucho ¿verdad? -pregunta con una sonrisa que dudo que se le vaya a quitar en todo el día.

-Te lo noto solo yo seguro -digo entre risas.

-Lo más seguro -dice riendo.

   Al momento veo a Pablo cruzar la esquina y seguir su camino por la calle central, miro a Lucía y noto que se queda mirándole con las mejillas de color rosado. En ese momento se me ocurre una idea.

-¡Pablo! -digo yo mientras Lucía me mira con los ojos muy abiertos y me advierte con la mirada.

   El susodicho se gira y se nos queda mirando mientras nos espera en el momento que se da cuenta de que está Lucía se sonroja provocando que yo ría por sus actitudes.

-Hola Alexa y hola Lucía -dice mientras que sonríe a la ultima dicha.

   Llegamos al instituto justo en el momento en que tocó el timbre y entramos a nuestra clase.

-Alexa me voy a sentar con Pablo ¿Te importa? -le sonrío de forma pícara y le asiento para que se siente junto a él.

   Llega el profesor junto a dos nuevos alumnos. El primero es rubio con los ojos azules y alto con un cuerpo que cualquier chica querría ver en su pareja. El segundo tiene el pelo castaño oscuro y unos ojos verdes con un cuerpo igual de trabajado que el primero. En ese momento los dos dirigen su mirada hacia mí y me hacen intimidar.

-Chicos chicos callaros un momento -la clase se da cuenta de los nuevos y callan de golpe- genial, bueno os quiero presentar a dos compañeros nuevos es el Álex -dice señalando hacia el rubio que no quita la mirada de mí- y él es Eric -señala al castaño que al igual que Álex me está mirando. -Álex siéntese junto a Alexa -dice señalándome- y Eric usted junto a Daniela. -los dos se sientan en su lugar y el profesor comenzó a dar clase...