A mi manera. [Luis Fer Huerta, LUCAH]

Perdón.

Ya habían pasado dos años desde que Luis y Carlos se fueron de aquí y yo aún no lo podía olvidar, cada día y cada noche me torturaba más escuchando su voz en las canciones de Lucah, era inevitable, yo había estado con ellos desde el principio y siempre iba a estar hasta el final.

Un día estaba revisando el News Feed de Facebook y vi su publicación.

Luis Fernando Huerta Pompa.

"De regreso a nuestras raíces, estamos emocionados, @carloscolosio."

Mi corazón latió tan fuerte que pensé en morir de un paro cardíaco. Venían, él venía, regresaba aquí, él regresaba a mí, después de dos años, lo volvería a ver, aún que fuera a escondidas, yo lo podría ver.
Llevaba todo el día esperando su llegada, ya para las 7 de la noche yo estaba desilusionada, tal vez no llegaría hoy, es más no tenía certeza de cuando si quiera saldrían para acá.

Era viernes, nunca fui alguien de salir de noche, de fiestas o alcohol, pero hoy saldría, Jaz -mi mejor amiga- me había invitado a una fiesta a la cual no quería ir sola y tras mi larga espera decidí acompañarla.
Me había puesto unos Jeans negros, una camiseta de los guns n' roses adornada con un collar dorado y unos vans, también negros. Si usaba maquillaje, lo primordial, rímel, labial y yo ya estaba más que lista.

Bajé corriendo las escaleras, Jaz me iba a recoger afuera del fraccionamiento de mi casa, así que me dispuse a salir, me despedí de mamá y abrí la puerta.

Casi me desmayo. Él

Estaba tan guapo, más de lo que hubiese estado años atrás, más alto, más fuerte, más todo.
Me quedé pasmada en la puerta de mi casa, estaba caminando por la acera frente a mi casa y yo, no podía dejar de verlo, era precioso. Llevaba su cabello distinto, peinado hacia arriba, su cara se había puesto mucho más masculina, vestía casi como yo, a diferencia de que el llevaba una camiseta negra y sobre de esta una camisa azul desabotonada, se veía tan distinto, pero a la vez tan él.

No supe cuánto tiempo me quedé admirando su caminar por delante de mi, pero supuse fue mucho. Pasó por delante justo de mi casa y me vio, y yo no pude disimular que no lo había estado mirando todo este tiempo, elevó la comisura de sus labios y me sonrió, sus ojos se curvaron de una manera tan linda, su dentadura perfecta me iluminó la vida y lo vi seguir su camino.

¿NO ME IBA A SALUDAR? Dios mío, tanto tiempo y sólo me sonríe y se va. Más lágrimas querían salir a chorros por mis ojos o por donde pudieran pero el sonido de mi celular no dejó que lo hicieran, era Jaz.

-Estoy afuera Houston.
-Lo siento, voy en camino Jaz.
-Pues apresurate porque aquí afuera hay dos cosas tan lindas que yo creo que no te quieres perder ver. -Dijo ríendo

Salí casi corriendo de mi casa, no por ver las "cosas lindas" que seguramente serían chicos, si no porque odiaba estar tarde.
Cuando llegué a la salida del fraccionamiento divisé tres autos, el de Jaz y otros dos autos, negros, demasiado nuevos, demasiado costosos y recargados en ellos, varios chicos -guapos- pero nada que me interesara, no por ahora, hasta que los vi, Luis y Carlos, hablaban animadamente con otros de los chicos que estaban con ellos y de nuevo mi mirada no dudó en posarse en Luis, me perdí en él hasta que oí el claxon de Jaz, fue tan repentino que todos los chicos, incluidos Luis y Carlos giraron sus cabezas.
Y me encontré con la mirada de Carlos, en una milésima de segundo su cara cambio, su sonrisa cayó para darle pasó a una boca ligeramente abierta y un brillo pasó por sus ojos, se abrió paso entre sus amigos y caminó hacia mí.

-¿______?-Su voz sonó incrédula y se acercó más a mi, volteé a ver a Jaz disculpándome por todo lo que la he hecho esperar y me miraba con cara de 'no lo creo, ¿quién es?'-Si, tienes que ser tú, no lo creo. ¡Luisfer! Mira a quién tenemos aquí. -gritó ganando la atención de Luis.