2. HILARIDAD.

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Cada sensación tan distante del que eres, tan extraña que has llegado a desconocer al reflejo que te mira desde la otra ventana, la locura es vital en mi existencia pero no sé si mi existencia es vital para esta locura. Así como el pintor retrata sus historias a través de un pincel lleno emociones, así el escritor, crea su propia realidad cargada de argumentos que sostienen su locura, pues el loco, el único capaz de ver lo que en realidad es y lo acepta sin temor. La madrugada acompañada de un sol naciente abre el telón enseñando con luces y un gran resplandor, un nuevo inicio que olvida al día anterior, sales al mundo empuñando tu corazón en vuelto en la soledad que te abrigo la noche anterior, saludas al mundo con la sonrisa más grande, la más grande que un alma hecha pedazos puede hacer. Vives del recuerdo cargando así con tu pasado, un mar de sueños perdidos que han llenado tus lágrimas al llegar el ocaso, y cuando la noche aguarda tu regreso, quien llega es un ser que ha olvidado su pasión, la risa y su felicidad han quedado en alguna almohada sollozante. Cuando miras al cielo lleno de destellos tenlo por seguro, que las estrellas también te miran, cierra los ojos y deja escapar un suspiro, una lagrima, un beso que te de la paz que tu cuerpo tanto anhela, no permitas que la sombra sea el arquitecto que construya tu vida ni mucho menos que la soledad sea tu compañía. Debajo del regazo de tu almohada dejaras una carta, escribirás tu adiós a la tristeza y la melancolía, dejaras tu carta de despedida:

Sé que es repentino mi adiós como lo es la muerte, sabes que llegara a un desconociendo la fecha. He recorrido tantas veces el infierno que camino acompañado de mis miedos, y ahora me debo marchar, darle las gracias a la soledad quien siempre supo serme fiel, a mis sueños rotos los convertiré en historias de aventuras cumplidas, mis lágrimas caerán al vacío cuando mi corazón se estremezca una vez más, no con una tragedia si no con alguna maravilla que alegre el paso de mis días. No perderé mi camino esta vez, pues no veré con mis ojos si no a través de mi alma, entre lo bueno y lo malo aprenderé que es de humanos no siempre ser el más perfecto ni mucho menos el correcto. Caminare hasta un nuevo mundo, empuñando esta vez mi corazón en vuelto en la razón y la compañía del amor que guardare en mi pecho para sonreír, no ante la sociedad que nunca me lograra entender, si no ante al espejo para ver que esta vez luchare por ser feliz, luchare para convertir este sueño el mejor recuerdo que pueda contar cuando sea viejo.

Esta es mi carta de despedida de un alma perdida......

EL DESTELLO DE JUPITERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora