_ Quizás, no lo sé.

_ Si quieres en unos días te llevo. Si no te animas no hay problema.

_ Genial, entonces nos veremos pronto- dije coqueteándole un poco

Mis últimas palabras le hicieron dedicarme una sonrisita boba. Yo no sería la chica más linda de todas pero sabía bien cómo usar mis dotes para conseguir lo que quería y nuevamente había tenido suerte. El cazador que me había cruzado era el más joven de los cuatro y por lo que veía bastante fácil de engatusar.

_ Por supuesto- dijo luego de unos segundos y me saludo con una cómica reverencia antes de salir corriendo. Estaba segura que los otros lo matarían por demorarse.

No me dio tiempo de decirle nada más pero ya tenía toda la información que necesitaba. Misterio uno resulto, ahora necesitaba saber algo de Topher para atar cabos. Y aquello no se veía nada sencillo.

Aproveché que estaba en el centro del pueblo para hacer unos trámites y realizar unas llamadas.

_ ¿Podes hablar?

_ Si

_ ¿Cómo está todo?

_ Se podría decir que bien, igual... él está preocupado, deberías llamarlo

_ Quizás mañana pero, ¿Está bien?

_ Físicamente si, solo te extraña y odia estar peleado con vos

_ Yo también... - no podía agregar nada más, si lo hacía sabía que lloraría- Cambiando de tema, los quiero acá para el Viernes. Y vengan con mucho cuidado.

_ ¿Pasó algo?

_ Todavía no

_ Está bien, vamos a estar ahí a primera hora. Pero quiero que me cuentes que ocurre

_ Mejor al mediodía y vengan en auto.

_ Claro, no hay problema.

_Nos vemos Thea.

_ Besos Will.

Listo, tenía aquello cubierto. Ahora de vuelta al hogar.

La casa estaba vacía y el día se prestaba para dormir. De modo que, aprovechando que era Sábado y ya no tenía nada que hacer, me recosté un rato.



_ Thea, Thea... ¿Vas a comer?- me costó distinguir que era mi huésped quien me hablaba y al girarme la profundidad de sus hermosos ojos celestes me atrapo alejándome de la telaraña de mis extraños sueños que ya ni podía recordar. ¿Qué hacía allí?- Preparé el almuerzo.

_ Ahora voy- dije y él se levantó de mi lado y volvió a la cocina. O eso pensaba. Qué raro era aquello, fuera como fuera a lo mejor esto me serviría para descubrir algo.

La mesa del comedor estaba puesta, la comida servida e incluso había música de fondo.

_ Preparé spaguettis, espero te gusten.

Los probé, estaban riquísimos. Topher se había esforzado bastante en que todo estuviera perfecto y eso me hacía desconfiar. ¿Desde cuándo él era tan atento?

_ ¿A qué viene todo esto?

_ ¿No puedo estar simplemente agradecido por todo lo que has hecho por mí?

_ Podrías... aunque esa no es la razón de este almuerzo. Sé que no te caigo del todo bien, que te parezco una niñita malcriada y tonta, y definitivamente estas aquí porque no te queda otra- había podido descifrar todo aquello por la forma en la que me miraba o trataba-. Asique dime de qué va todo esto.

_ Está bien, parece que no puedo engañarte, lo que dices es cierto pero necesito que me ayudes con la gente de aquí. He intentando interrogarlos sin suerte, no confían en mí o no les agrado para que me digan algo.

_ ¿Qué quieres saber?

_ Eso no es asunto tuyo- Topher era bastante receloso de su privacidad, pero yo también necesitaba información.

_ Si no me dices no puedo ayudarte- respondí y me levante de la mesa sin terminar de comer.

_ Espera- dijo él y me tomo del brazo con suavidad para que no me fuera- No me gusta hablar de esto y me cuesta pero supongo que si quiero saber algo debo decírtelo. Es complicado así que deberás comprenderme... Soy adoptado, lo sé desde que tengo 18 años y desde los 21 que vengo intentando encontrar a mis padres biológicos. He estado en muchas partes y finalmente parece que todo termina aquí, alguien tiene que saber algo de ellos- luego de terminar de decirme aquello, me soltó.

Así que esa era la razón por la cual él había venido al pueblo, no podía procesarlo aun, era una razón tan normal que me quede helada. Estaba completamente sorprendida, igual no se que esperaba, pero algo en mi se apaciguo. Sabía que iba a ayudarlo, si ya antes lo había hecho dos veces sin ningún motivo aparente o sin entender porque, ahora que conocía su verdad y había podido ver y percibir su dolor iba a volver a hacerlo.

_ Llamaré a mis padres. Si alguien puede saber algo o descubrir algo, son ellos.

_ ¿Cómo puedes estar tan segura?

_ Mamá enfermera, papá policía; ¿comprendes?

_ Ahora entiendo...

_ ¿Qué cosa?- su respuesta había sonado algo irónica

_ Nada, gracias.

Cualquier discusión o problema entre nosotros acabó de cierta forma allí; y ni bien terminamos de almorzar llame a papá.

Bleu RivièreWhere stories live. Discover now