luz de luna

capitulo 1

Han pasado 2 horas desde que llego la carta, en este momento me encuentra en mi oficina y en 3 días tendré que ir a la junta del consejo en euphemia:

-tiene que ser una maldita broma- fue lo primero que dije después de haber leído la carta.

-tranquilízate- dijo Andrew el beta de la manada un joven de 18 años alto, de pelo castaño y ojos verdes, se podía ver en su cara un poco de terror al ver cual enojada estaba.

- estos malditos primero nos desprecian y ahora quieren que vayamos a su escuela para mejorar la convivencia- dije con un tono muy sarcástico.- esto es un maldito juego-

-algo no esta bien - dijo Andrew un poco preocupado.

-no, no lo esta seremos blanco fácil en la maldita escuela- suspire ¨pero no tenemos otra alternativa, la maldita carta no es una invitación es una amenaza¨ pensé,  pero esta ve no enojada, si no preocupada por lo que le podía pasar a los híbridos ahí. - No tenemos otra opción, asistiremos, pero pondremos nuestras reglas ante el consejo, no dejare que nos dejen sin cartas con que jugar.-

-es peligroso, estas segura de que quieres jugar este juego- Andrew no dejaba de estar angustiado pero si decíamos que no, no nos dejarían tan fácil y podríamos perder muchos miembros.

- si, pero primero tendremos que informar a la manada, reunelos a todos los jóvenes para antes del anochecer.- el asintió y se retiro, sin decir nada mas, yo camine hasta mi ventana en donde podía ver un gran árbol con niños jugando en el, se veían tan felices y despreocupados, no podía dejar que esas sonrisas desaparecieran, aunque tuviéramos que hacer un gran sacrificio. Estaba tan centrada en mis pensamientos que no me di cuenta que estaban tocando la puerta, me tranquilase y abrí la puerta, solo para encontrarme con unas histéricas diez amigas que entraron a la fuerza y cerraron la puerta.

-Explícanos que diablos esta pasando- dijo layna una chica híbrido de 17 años, su cabello es amarillo igual que sus ojos, tiene la sangre de dos demonios un mono y un cochi y la sangre de la diosa relámpago, por desgracia su personalidad es demasiado gruñona.

-¿que quiso decir Andrew con que asistiremos a una nueva escuela?- pregunto Tiara una chica con cabello verde que le llegaba a los hombros y sus ojos de un tono verde muy oscuro con el poder del la diosa naturaleza y un demonio conejo, la mayoría del tiempo siempre va con una sonrisa en su cara pero debes tener cuidado con su carácter. 

-¿es verdad que que iremos a la escuela euphemia?- Maleine nunca se quedaba con las ganas de preguntar, era una chica híbrida de cabello largo y negro como sus ojos su poder es el de la oscuridad y es un demonio caballo.

-esto es malo- menciono Titian con su cabellos ondulado y rojo como unas grandes llamas y sus ojos rojos, híbrida de fuego y murciélago.

-vean el lado bueno, que tal si hay chicos guapos- dijo naida quien nunca se puede quedar callada con su cabello y ojos tan azules como el océano y con el poder del gato y del agua, con su personalidad demasiado pervertida.- que dices coral- pregunto con una gran sonrisa en su rostro. coral era al igual que muy pervertida pero demasiada imprudente y floja. su cabello tiene un tono morado oscuro, al igual que sus ojos y tiene el poder de la piedra como del hamster. Esta le respondió con su sonrisa pervertida.

-mmm ese es un buen punto ¿no crees kiai?- y ahora Zephyr con cabello y ojos rosas, tiene el poder del viento y el perro,  después kiai que se veía ansiosa por ver si era verdad con su cabello y ojos naranjas y el poder de la tierra y el zorro.

 -que genial- dijo kaethea con su cabello y ajos azules muy claros con el poder de la nieve y la ardilla. Me estaban sofocando no paraban de gritar y preguntar, porque Andrew no se quedo callado, la única que se quedo tranquila fue kate, aunque nunca se sabe como puede reaccionar, suele ser muy energética y aventada, ella es un demonio ciervo y un hada, con cabello y ojos cafés muy oscuros, todas eramos diferentes pero eramos muy amigas casi hermanas, pero ya era momento de callarlas a todas.

-ya esta bueno, silencio, - todas se callaron- siéntense, les voy a explicar, es cierto que iremos a la escuela Euphemia pero esto no es para celebrar, tenemos que tener cuidado y abran reglas que llevar a cabo para poder sobrevivir a ese infierno.- note como su rostros se transformaron a unos muy serios. Quería seguir, aprovechando que por primera ves en su vida se habian callado, pero Andrew me interrumpió tocando la puerta.

-ya esta todo listo- entro con una gran sonrisa en su cara hasta que vio la mía-¿ pasa algo malo?-  le hice una seña para que viera detrás de la puerta y lo iso antes de salir corriendo y yo tras de el ¨el maldito es muy rápido¨pensé mientras coria detrás de el. Cuando por fin lo atrape lo tome del cuello de la camisa, casi aorcandolo - no pudiste mantener la boca cerrada- le dije con enojo mientras lo volteaba y con las dos manos lo agarraba del cuello y lo agitaba, hasta que me di cuenta de las risas que se escuchaban por detrás. No me había dado cuenta que ya estábamos frente a la manada, respire hondo, no sin antes mandarle una de esas miradas que sientes que te están matando por dentro, lo solté y me di la vuelta con una pequeña sonrisa, que mostraba confianza.

-bien al parecer venia a darles la noticia de que a partir del próximo lunes todos los jóvenes asistiremos a la escuela Euphemia, pero todo indica que Andrew ya les dijo a todos- lance otra mirada asesina a Andrew que estaba parado a un lado de mi y las risas se volvieron a escuchar - bien existirán reglas que el consejo tendrá que aceptar si quieren que vallamos a la escuela- gritos se espesaron a escuchar- y háganme un favor- todo mundo guardo silencio y yo sonreí- no se los dejen tan fácil.- las risas se escucharon por todo el bosque.