CORRER O MORIR (Editando)

La primera tragedia

Han pasado tres semanas desde que llegue a Los Ángeles, y creo que jamás me había sentido tan viva en toda mi vida.
Los primeros días en la escuela eran incómodos ya que no conocía a nadie, bueno solo a Mia pero en general todos miraban extraño.
La primera semana después de clases me la pasaba con mi padre en su taller, haciendo tarea ya que él me respondía todas mis dudas. Parecía que él era un genio ya que se acordaba de todo lo que había visto hace más de 18 años, además estando en el taller era la forma más cerca de estar junto a un auto.
En toda la primera semana no vi a Dom, ni a Brian, en general a ninguno de sus amigos, solo a Mia y ella me dijo porque estaban trabajando y no volví a preguntar.
Pero la segunda semana es cuando comenzó la acción.
En primer lugar ese lunes salí de la escuela a la hora acostumbrada solo que ese día había estado completamente sola ya que Mia no había ido a la escuela, así que yo iba saliendo del colegio y el primer auto que me encuentro es un Charger negro y justo recargado estaba Dom. Llevaba una camiseta blanca sin mangas que dejaba al descubierto sus brazos y no pude evitar ruborizarme.
Camine hacia el solo para saludarlo y decirle que perdía su tiempo ya que Mia no había asistido al colegio.
-hola preciosa; dijo con una voz tan imponente
-hola, qué haces aquí?; pregunte
-no es obvio vengo a recoger...
Lo interrumpí siendo no esa mi intención.
-si ya se, pero no vino Mia
-Y quien dijo que venia por Mia, entra al auto
Me quede pensando, hace casi un mes que no me subía a un auto y eso sin contar la carcacha de mi padre.
-Que? No me digas que te dan miedo; pregunto Dom de una manera muy desafiante
Lo mire y di la vuelta al auto para subirme al asiento del copiloto.
Todo ese día me la pase con Dom, fuimos a un estacionamiento público al parecer abandonado ya que no había ni un alma cuando llegamos. Se estacionó, apago el carro y me dijo "veamos si es cierto que puedes conducir"
-Quien te dijo que sabía?
-Mia es mi hermana y tú eres la chica que quiero, tenía que hacer preguntas
Bajé del auto y me senté en el asiento del piloto y el en que era mío.
-No me vayas a dejar inválido; dijo Dom riendo
-A veces ay que correr o morir

Después de ese día todas las noches salía de mi casa para ir a las carreras de Dom.
Pero no fue el hasta el día en que Dom me metió a una carrera y jamás salí de ellas.
Una noche yo ya estaba acostada cuando suena mi teléfono, era Dom
-Son las tres de la mañana Dom
-Solo el tiempo nos separa de lo que queremos
-Que pasa, estás bien?
-Si solo quería que me acompañaras a una carrera
-No puedo, mañana tengo cosas que hacer en la escuela, además mi padre ya sospecha sobre las carreras
-El no se tiene que dar cuenta, asómate de tu ventana
Salí de la cama y me fijé por mi ventana, y ahí estaba el viéndome con esos ojos que solo pocos pueden expresar.
-Salta
-estas loco?, me voy a romper algo
-corres autos a toda velocidad en el tránsito normal y te de miedo saltar por la ventana.
Colgué el teléfono tome unos pantalones limpios y una chamarra. Abrí la ventana con mucho cuidado intentando no hacer ruido, tome mi mochila para que en el camino le diera una última repasada a una exposición que tenía para mañana. Lo primero que lance fue la mochila y Dom la atrapó, espero que haga lo mismo conmigo.
Empecé a bajar por la pared y llegue hasta el piso sin tener saltar.
Fui hacia Dom, y el impulso me gano antes que mi cerebro pensara, y en lugar de abrazarlo le di un beso, pero me di cuenta rápido de lo que había hecho y me aleje de el.
El se quedó inmóvil y dijo " espero uno mejor para cuando gane la carrera"
Nos subimos al Charger y fuimos hasta el lugar de la carrera
Como siempre Dom iba primero, y yo me quedaba con Mia y Brian. Ese día me presentaron a otro amigo, Han. Un hombre de pocas palabras pero jamás se quitaba las manos de la boca, seguramente fumaba antes.

Fui junto a Brian para ver un auto y los dos estuvimos de acuerdo de que lo probara. Jamás pensé que esa carrera cambiaría más mi vida.
Me subí al auto y conduje como nunca, y antes de llegar a la carrera un idiota se estampó frente a mí ya que perdió el control intentando dar unos giros.
Salí del auto con la mano sangrando y estaba asustada, mi brazo derecho estaba lleno de sangre y sentía que se me caería en cualquier momento, no sabia que había pasado, ni como salí del auto. Por un segundo me paralice, estaba en el suelo el asfalto aun seguía caliente debido a los giros del carro que me estampo. Por el tronar de los cristales mis oídos retumbaban, y no escuchaba que Brian, Han, Mia y dom corrían hacían mi. Hasta que Mia y Fom me ayudaron a levantarme es cuando empece a ver con normalidad y ademas empece a escuchar.
Las típicas preguntas, ¿estas bien?. Pam tu brazo etc. Hasta que escuchamos una voz gritando hacia nosotros.
-Oye Toreto, espero que tu nueva zorra pague mi auto
Dom dejo de sostenerme y fue directo al hombre
-Repite lo que dijiste; grito Dom empujando al hombre
-Que tu nueva zorra pague mi auto;
Fue suficiente para Dom para soltar el primer golpe y así empezó la pelea. Todos se empezaron a golpear mientras que Mia y Brian intentaban separar a Dom, pero todo se volvió un caos cuando se escucharon sirenas y las patrullas llegaron. Todo el mundo corría y solo perdí de vista a todos, a Dom, Han, Brian y Mia hasta que alguien me tomo del brazo, era Dom, tenia la cara llena de sangre, me dirigía a su Charger en donde subí, y verifico que su hermana estuviese con Han, Brian desapareció. Dom subió al auto cuando las patrullas ya estaban arrestando a diferentes personas y arranco haciendo rechinar las llantas.
El viaje fue silencioso, por la adrenalina había olvidado que el brazo me seguía sangrando. Llegamos a la casa de Dom, y se quedo men silencio por un segundo.
-Tengo que curarte ese brazo; dijo Dom mientras me volteaba a ver
Estaba muy callada desde que bajamos del carro, entramos a su garaje en donde el saco unas vendas y alcohol. Ardía mas que cualquier cosa, pero estaba mas nerviosa por la policía, y si me vieron?, y si le dicen a mi padre, y si me regresan a Mexico, no quería irme, pero seguía haciendo y cometiendo los mismos errores que me había llevado a Los Ángeles.
-No nos vieron; dijo Dom distrayéndome del trance. Lo mire a los ojos y no pude retener las lagrimas, tenia miedo, y el lo sabia.
-Ya no puedo seguir haciendo esto, intento cambiar y no puedo, vuelvo al mismo lugar, vuelvo a los mismos accidentes, si los policías me vieron, me regresaran. No quiero regresar.
Dom iba a decir algo hasta que escuchamos gritos afuera.
-TORETTO!
-Maldita sea; dijo levantándome de la mesa en donde estaba sentada, me puse mi chamarra y agarre mi mochila, era mi padre.
Dom abrió la puerta del garaje y mi padre estaba ahi, cuando me vio salir de la casa de Dom una decepción en su rostro se formo.
-Maldita sea Pamela, Maldita sea. Donde estabas?
Solo me quede callada.
-Las patrullas han estado por todo el vecindario Pamela, Quieres que te atrapen!.
Mi padre me tomo del brazo herido y grite del dolor, se quedo inmóvil.
-Estabas corriendo... Entra a la maldita casa!
-Señor yo puedo explicarlo
-No Dominique, No puedes. Aléjate de mi hija, no voy a permitir que por tus juegos y tus tretas le arruines su vida. Pensé que eras un buen chico!
Dom se quedo en silencio, logre mirarlo de lejos antes de entrar a la casa.
Desde ese día mi padre me prohibió incluso ir con el al taller, directo a la casa después de la escuela y no tener ningún contacto con los Toretto. Mia solo se sentaba a lado mío, y cuando le conte por fin el porque había llegado a LosAngeles solo me abrazo y entendió.
Pasaron tres semanas sin hablar con Dom, había días que pasaba a lado de su garaje y ahi estaba el con su grupo de amigos arreglando sus carros, pero no me dirigía la vista.
Todo era así, hasta una noche, una madrugada en donde algo golpeaba mi ventana. Era alguien mas bien, lanzando algo a mi ventana.

(Dedicado a CarolPaz )