Capitulo 4: Rabia

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El festival qué el colegio estaba organizando tenia a Pan demasiado estresada y entretenida, además de eso, ya casi tenía el examen final de su academia de idiomas; para colmo tenía la sensación de que era una muy mala persona, Goten le había dicho que la amaba y ella simplemente lo había evitado y seguía sin darle una respuesta. Ya era viernes y no sabía cómo hablar con Goten, y estaba tan atareada supervisando que los juegos que haría en el festival no fuesen hacer peligrosos, qué no había pensado nada para decirle a Goten, además de eso le había dicho que saliesen, y no se le ocurría nada para escaparse de sus responsabilidades. Sabía que su amiga Maron, quien era la presidenta del consejo la mataría si se iba a y los dejaba tirados a un día del festival.

– Maron, por favor – había suplicado está a su amiga – Mi examen es el próximo lunes, necesito estudiar, deja que me vaya temprano hoy – Maron la miro un poco molesta, su amiga detestaba la irresponsabilidad, y ella tenía a cargo algo muy importante como para hacer la parte de la pelinegra.

– Pan, realmente no puedo, cada quién sabía lo que tenía que hacer y no puedo designarle tú trabajo a alguien solo porque tienes un examen, no sería justo. – Dijo la rubia con pesar. – Y yo no podría ayudarte amiga, lo lamento.

– Oh vamos Maron – Rogó la pelinegra. Sabía muy bien que ya sería demasiado cancelar su cita con Goten, Dios. ¿Cómo él se sentiría?

– ¿Estas segura que nadie puede hacer su parte? – Pregunto Jonathan, Pan hasta se sorprendió al escucharlo, ella consideraba que él y su amiga hacían una pareja muy extraña, él era muy callado y prudente, Su amiga Bura era muy extrovertida.

– De poder, cualquiera de los del equipo de arte podrían hacerlo. Porque ya no tienen nada que hacer, pero dudo mucho qué quieran. – Dijo la rubia haciendo un puchero. Los ojos verdes de Jonathan se posaron en la cara de Pan y Luego miro a Matthew, sonrió para luego hablar –Es una lástima que ninguno de tus amigos este libre – diciendo esto se marchó, llevándose parte de la utilería para la obra de teatro.

– A veces pienso que él es un psicópata – Dijo Pana su amiga Rubia. – Bueno, iré a obligar a Matthew – Sonrió.

Matthew era muy simple de convencer, tenía un carácter muy extrovertido y eso hacía muy fácil ser su amiga, pero era muy entrometido, y eso lo hacía muy difícil, era casi imposible que él guardara un secreto. ¡Y esa manera que tenía de darse cuenta de las cosas! Él era tan intuitivo.

– No – Había dicho él cuando la vio acercarse. – lo que sea que quieras la respuesta es No. – Explico él.

– Maldito, Pues dice Maron que debes supervisar los juegos para el festival, al menos los del equipo de soccer. – dijo Pan. – Era mi trabajo, pero hubo un problema con utilería y debo arreglarlo. – él se rio.

– En este colegio no pasa nada sin qué yo me entere, tengo ojos en todos lados, NIÑA. – dijo este arqueando una de sus cejas gruesas de color castaño. – ¿Estas muy preocupada por tú examen final? – Preguntó este.

Matthew había aceptado hacer el trabajo de Pan, pero le debía un favor, el cual el diría como y cuando lo cobraría. A Pan se le erizo la piel, pero aceptó.

Ahora solo debía pensar qué debía decirle a Goten, acaso debía ser sincera ¿Debía decirle que no le creía? Un vaivén de palabras cruzaba por su mente mientras caminaba hacia la salida, ya tenía todo planeado, Saldría con Goten donde él quisiese llevarla y luego regresaría faltando 5 minutos a las 6 de la tarde, donde Walter muy puntal la estaría esperando.

Su teléfono comenzó a sonar, sabía perfectamente quien era – ¿Hola? – dijo la menor en él teléfono. – Estoy abajo linda, tengo muchísima hambre ¿Quieres una hamburguesa? – Dijo él alegre, Pan pensó que ella podía distinguir las emociones de él solo con él tono de su voz. – Se escucha delicioso, en seguida bajo, te espero en la esquina. ­– Dijo esto y colgó el teléfono.

– ­ ¿Con quién vas a salir? ¿Por qué nos mentiste? – Pregunto su amiga preocupada Rubia. Pan se puso tensa al escuchar la voz de su amiga. – Es un chico de la academia, estudiaremos juntos – había respondido rápidamente la pelinegra a su amiga. – Se llama Mitchell – Sonrió.

– Oh, entonces será un gusto conocerlo. – sonrió la rubia – Ya qué jamás lo mencionaste – dijo esto último mirando seria a la pelinegra. Pan frunció el entrecejo, se estaba cansando que su amiga se metiese en su vida. – Seria un gusto, pero no quiero que lo conozcas. Deja de molestar – Diciendo esto se marchó, dejando a su amiga rubia muy molesta.

Goten como siempre la había saludado con un beso, la había extrañado, ella podía sentirlo en sus besos, él había tomado la nuca de la joven acercándose más a ella. Goten la había llevado a un restaurante a las afueras de la ciudad, era cierto que se moría de hambre, se había puesto de muy mal humor en el camino, así que no hablaron nada. Cosa qué Pan agradeció.

Durante su cita, tampoco habían tocado ese tema, habían hablado de como él padre de Pan había tomado en cuenta varias ideas de Goten y lo feliz que él se sentía pues solo era un asistente. Pan lo había escuchado atenta. Le gustaba oírlo hablar, era muy expresivo.

Pan noto como la mesera no había dejado de sonreírle a pesar de que ella estaba allí, y se molestó. Esa era una de las razones por las cuales consideraba que Goten no era bueno para ella.

– Seguro piensa que soy tu hermana, por el uniforme – dijo interrumpiendo la historia de Goten. El dejo de hablar y la miro extrañado para luego sonreír y entender de lo que hablaba.

– Seguro sí te beso llama a la policía – Había dicho él y luego rio. Se veía tan lindo cuando reía. Pensó.

– Aun así, te está acosando, deberías poner una queja de personal – dijo está mirando molesta a la mesera, y esta al darse cuenta Cambio la dirección de su rostro.

– ¿Podrías de intimidar a la mujer? – Dijo este divertido por la actitud qué la menor estaba tomando. – Seguro solo quiere qué le de propina extra – Sonrió, y luego la mesera volvió a pasar sonriéndole al hombre.

– Sabes qué yo pagare y no dejare propina – Dijo la menor muy molesta. – Es una abusiva.

Goten soltó una carcajada, ella volvió a pesar que era encantador.

– Tú no puedes pagar, ¿Qué crees que diría tu madre al ver ese registro en tú tarjeta? – Le dijo el hombre a la menor. – además ella está haciendo su trabajo, seguro le funciona, no sabes que problemas económicos tiene así que deja de molestar, niña.

Pan se había molestado en la forma en que Goten le había faltado el respeto, y como la había llamado, y no solo eso, le había dejado propina extra a esa mujer, así que durante todo el camino se había molestado con él, y había decidido no hablarle. Eran las 5:45 para cuando llegaron a la esquina del colegio.

– Te veo a la noche, Pan – Dijo el hombre a la menor, esta no lo miró, realmente estaba muy ofendida. – Te amo. – Ella lo miro muy molesta para luego abrir la boca y gritarle – ¡Se nota! Dijo esto y se bajó del auto

Goten no la siguió, arranco el coche y se fue; eso hizo que ella se molestase más, estaba tan molesta. Se sentía humillada y herida.

– ¿De dónde vienes niña? – Pregunto Walter a Pan, él ya la estaba esperando en la entrada del colegio, Dios su corazón comenzó a latir con fuerza y no sabía que responderle... ¿La había visto con Goten? Dios, su madre iba a matarla.

Notas Finales: 

Martes 7 de Julio, 2020. 22:50 pm

Gracias por votar y por comentar la historia espero qué les guste estoy haciendo mi mayor esfuerzo por terminar la novela antes de qué Julio termine.  si les gusto el capitulo voten y comenten. 

si les gusta alguna otra de mis historias les recomiendo seguirme. 

Buenas noches, espero que tengan un buen día y una buena salud :c 

Besos y abrazos. 

Linda Brief <3


CamuflajeWhere stories live. Discover now