De mi sangre, a tus ojos (Yaoi)

Cap. 7 Admitirlo y Superarlo

-Que a pasado? -Preguntó Al en algún punto ciego de la pista.

La sirvienta me ayudo a levantarme, extrañamente tenía bastante fuerza, pero ahora mismo me creía que pudiera hacer cualquier cosa, ya que no era humana.

-Edgar! -Soltó Al al ver a la sirvienta levantarme.

El sujetaba a Ratón por las riendas así que adivine que seria el quien casi me mata.

La sirvienta me ayudo a caminar hasta donde estaba el y sujeto a Ratón.

-Estas bien? -Preguntó secándome unas lagrimas que se habían formado en mis ojos por la caída.

Yo asentí con la cabeza y no pude evitar ponerme rojo a la vez que bajaba la mirada, el lo noto y me beso en la frente haciéndome poner mas rojo todavía.

-Te había prometido enseñarte a montar cuando hiciera mejor tiempo, pero me da que ahora no estas en tu mejor condición, no? -Preguntó casi a mi oído.

Yo me puse todo lo rojo que se puede poner alguien y más, intentaba olvidar lo que había pasado la noche anterior y el me lo ponía difícil.

-Qu-que haces? -Pregunte intentando desviar el tema de la conversación.

-Entreno a Ratón, aun es un caballo tozudo -Contestó separándose de mi-. Al contrario que su madre, el no quiere un jinete.

-Su madre?

-Esmeralda, Ratón venia en el lote cuando la compre, aunque no lo sabia.

-Entonces a Esmeralda la tienes de hace poco -Comente sorprendido.

La verdad es que pensaba que ya llevaba tiempo con los caballos de las cuadras, excepto Ratón, que ya me había dicho que todavía era joven.

-Si, solo la tengo de 5 meses mas que a Ratón.

El se volvió a subir a Ratón y me pidió que me mantuviera en el centro de la pista, para que no me pasara nada. Aunque yo no entendía el porque.

Al trato de que Ratón le saltara un simple obstáculo pero se le negó bastante, en un momento estuvo a punto de tirarlo pero el no se dejó caer tan fácilmente.

Al cabo de un par de ejercicios Ratón ya estaba bastante quejicoso y no quería hacer nada, ni siquiera caminar, me dolió ver como Al tenía que darle con la fusta pero al mismo tiempo sabia que tenía que entrenarlo.

Ratón al usar la fusta con el empezó a caminar, pero en vez de caminar por la zona de la pared se fue metiendo hacia el centro de la pista, Al intento que volviera a caminar cerca de la pared pero Ratón le brinco y se le termino levantando en las patas traseras. Vi a Al caer cual peso muerto en el suelo y al segundo a Ratón poniéndose sobre sus dos patas traseras justo a mi lado, caí al suelo otra vez pero esta vez no grite al sentir el dolor de la caída, sino que cerré los ojos e intente taparme la cabeza con mis brazos aunque sabía que no serviría de mucho ante un caballo. Una de sus patas solo me rozo en la pierna izquierda.

-Edgar! -Gritó Al.

Aunque yo no sabia de donde, tenía miedo de abrir los ojos.

Cuando sentí a Al tocarme en la nuca abrí los ojos de golpe y lo abrace como si la vida me fuera en ello.

-Edgar estas bien?

La voz de Al sonaba tan preocupada, pero mis nervios no sabia si eran mas provocados por que casi me aplastan o por que lo vi caer como una bolsa de patatas al suelo.

-Debería de preguntar yo si tu estas bien!? -Espete separándome de el y sintiendo como las lagrimas venían a mis ojos.

Al me beso en los labios y me seco la primera lagrima que empezaba a salir.