- Con este aire te vas a resfriar, me la puedes dar después – dijo y la campana sonó – Te veo por ahí – dijo y corrió en otra dirección. No tuve tiempo de tirarle su casaca en la cara, pero no tenia ganas de ir hasta mi habitación, asi que me la puse.

Era gigante, pero la única cosa que tenía para cubrir mi brazo. Aunque no lo parezca, soy muy cuidadosa con eso. De verdad, ¿quien habría pensado que justo HOY alguien le derramaría un pote de alcohol entero sobre sus heridas?

Entre a clase en contra de la corriente de alumnos que estaba saliendo y cogi mis cosas de la mesa de laboratorio rápidamente  para evitar preguntas del profesor Smith.

-Ella – escuche a Tania gritar al segundo que salí de la clase – ¿Es verdad que te tocó con Tyler en el laboratorio y luego escaparon a besuquearse a los baños? – dijo saltando a mi costado para alcanzarme.

Ni siquiera la mire, solo me di un facepalm mental.

- Si es mi comprañero, pero ¡claro que no fui a besuquearme con él! – dije irritada. ¡¿De donde saca esas mentiras la gente!? No soy una fácil.

Tania sonrió como si le hiciera gracia - Sabia que era mentira, tú no das las vibras de ser así, de la clase de mujeres que él usa para una noche y luego las bota como si nada. Si no como las que le dan una patada a n la entrepierna si molesta mucho - dijo y me aguante una sonrisita. No estaba equivocada - Ademas, Tyler suele ignorar a las chicas que babean por el hasta que las necesite para algo, es un caso perdido– dijo explicándome. A veces Tania hablaba un poco de más. Pero tenía razón, era un mujeriego sin sentimientos – Juraba que el chico seguía con Samanta.

-Oh, ¿en serio? – dije sin interés. Este tema era incluso más aburrido que las clases de literatura. Ademas, no entiendo quien es Samanta hasta ahora.

La vi analizándome de pies a cabeza, hasta que se dio cuenta que esa casaca definitivamente no era mia.

-¿Esa es su casaca?- grito tapándose la boca sorprendida, y toda la gente que estaba alrededor volteo a ver que pasaba con estas locas.

- Um... si – dije finalmente.

-¿Como te la dio? Osea digo, si no hubo sesion de besos en el baño ni nada- dijo confundida.

- Si me siguio al baño, pero porque arruinó mi sudadera y me fue a ayudar, y me dio la suya, la mia esta mojada – le explique. Creo que desde he llegado a este lugar, nunca había dicho una oración tan larga. No me gusta.

- Que extraño, su marca normalmente es un chupón – dijo analizando la situación en su cabeza para si misma, pero lamentablemente escuche lo que dijo.

Sentí como mis pies se pararon de mover y me quedé helada de la cosa más depravada que había escuchado en mi vida.

-¿Qué? – pregunte confundida.

-Osea- dijo rascándose la cabeza nerviosa. Ya se dio cuenta que la cago - A las chicas con las que se va a acostar, o mejor dicho, las que tiene en su mira, les hace un chupón para que los demás chicos o chicas se alejen de su conquista, pero nunca les da una pertenencia – me explico. No puedo creer que sea tan animal, tan repugnante. Me dieron arcadas -Como ejemplo esta esta chica Samanta. Es una nerd, pero una nerd que esta buena y bueno, ha sido su objetivo de la semana – dijo explicandome – Si ves a una chica con chupon en el cuello o donde sea, es porque ya se la levantó o lo va a hacer.- dijo separando el aire en dos con sus manos.

- Para tu carro, él solo me preguntó que si tenía frio y me la dio aunque me haya negado. Estaba a nada de devolvérsela pero se fue corriendo sabe dios a donde – dije con con el ceño fruncido – Eso es todo lo que pasó – dije fríamente, no puedo creer que eso puede significar que soy objetivo de un animal.

- Bueno, hoy dia, haremos una pijamada, no dormiremos, y te contare todo lo que deberías saber, y de quien – dijo y yo solo negué con la cabeza – Ya pues – dijo haciendo un puchero y dando saltitos.

- Esta bien, lo que sea – dije sin interés aun caminando hacia educasion física.

- Si – dijo Tania emocionada, orgullosa de si misma.

¿Por qué haces esto? Te tienes que alejar. No puedes confiar en esa gente.

Tenia que sacarme esos pensamientos de la cabeza hasta ahora lo estoy haciendo bien, poco a poco, como debe ser.

*~*~*~*

Llegamos al gimansio mientras que Tania hablaba del regalo que Bruno le dio. Cosas que no me importaban, asi que solo pretendi estar escuchando.

Toda la clase ya había llegado, menos el entrenador. Que demoron. Aunque sea los chicos que conoci en la cafetería estaban con sus uniformes practicando con su propio entrenador de futbol americano.

- ¡TU!- alguien grito detrás mio- ¡Tu eres la perra que va babeando y arrastrándose detrás de Tyler!

Voltee mi cabeza hacia donde provenia el grito, como toda la clase lo hizo también. Mi linda compañera de habitación se estaba acercando a mi a paso rápido, señalándome molesta.

- ¡¿No te da vergüenza arrastrarlo para que se bese contigo?! – me enfrentó.

Que mierda le pasa a esta loca.

- ¿De qué estas hablando?- pregunte confundia, no se ni que esta pasando en este momento.

-¡No juegues a la inocente perra! – me gritó – Hasta tienes su casaca. ¡Eres una desgraciada!

Antes de que pudiera hacer algo, sentí un fuerte impacto en mi mejilla. Mi cabeza giro hacia el lado izquierdo, haciendo que caiga al piso.

Sarah la hija de puta se atrevió a tirarme una cachetada. ¿¡Quien se cree que es esta pedazo de zorra!?

Me iba a parar a atacarla, como hizo ella, pero una mano me detuvo, ayudando a pararme.

Si no hubiera sido por esa mano, les juro que hubiera saltado encima de esa arpía y le hubiera sacado todas su extenciones y pelos de verdad de la cabeza. Y que yo sepa, no me llamo Samanta.

Acaba de declarar la guerra, y déjame decirles que se va a arrpentir por hacer esto sin razón alguna. Nadie sale vivo de una guerra con Ella Saunders.

Todas las chicas se quedaron viendo a la persona detrás mio, como si hubiesen visto un fantasma.

Voltee mi cabeza para ver quien era. Tenia que ser él... Tyler.

CambioWhere stories live. Discover now