Mi nombre es Kagome Higurashi,tengo 16 años y vivo en Tokio Japón con mis padres y mi hermano Sota.
Mi vida es totalmente normal, o por lo menos lo había sido hasta el día de hoy.
Algo inesperado ha puesto mi mundo entero de cabeza y estoy segura d...
Naomi.- ¡KAGOME! DESPIERTA YA, ¡¡¡LLEGARAS TARDE AL COLEGIO!!!
Kagome.- ¡¡SI MAMA!! - valla...me despertó en lo mejor de mi sueño, pero bueno que se le va a hacer... ¿Qué hora es? - ¡QUE! ¡Las 7:40 am! ¡Llegaré tarde!
Me arregle lo más a prisa que pude y me fui a la escuela sin desayunar. Tuve que correr los más rápido que mis piernas me lo permitieron, a tal punto que casi no podía respirar, pero valió la pena, logre llegar justo a tiempo, apenas puse un pie dentro de la academia y cerraron la puerta tras de mí. -uff estuvo cerca-
Sango.- Hola Kagome
Miroku.- ¿Otra vez tarde?
Sango.- ¿Te quedaste dormida de nuevo??
Kagome.- Si, lo que pasa es que me quede leyendo hasta tarde y debido a eso no me podía despertar
Sango.- Kagome no deberías de estar despierta tan tarde, recuerda que después te duermes en clase y el profesor terminará enviándote a dirección otra vez
Kagome.- Ya lo sé, pero cuando leo antes de dormir tengo sueños muy extraños que me gustaría descifrar, son tan vividos que pareciera que he estado ahí.
San/Mir.- ¿sueños? ¿sobre qué?
Kagome.- pues no lo sé, en realidad son bastante confusos, solo veo un campo de flores y un enorme castillo. Y después aparece un joven, pero antes de poder verle el rostro...me despierto.
Sango.- ¿y eso que tiene de extraño?
Kagome.- En realidad nada, pero tengo la ligera impresión de que ese joven tiene algo que ver conmigo. Pero no tengo la menor idea de quién es, nunca lo he visto en la vida, pero aun así siento que debería importarme; es como una especie de presentimiento.
Sango.- No deberías de preocuparte, es solo un sueño.
Kagome.- Tienes razón - (aunque es muy extraño)
Tras esa pequeña platica ya no mencionamos nada más, el profesor entro al salón y comenzó su clase con la misma monotonía de siempre.
Fue un día horriblemente aburrido, pero lo que me consolaba era que saldría con Sango y Miroku al cine, la pasaríamos en grande y descansaríamos de todo; solo nos quedaban dos horas más de clase, dos horas más de tortura y podríamos irnos.
El plan era que a la hora de salida me iría con ellos, pero Sango tuvo que ir a recoger a su hermano a la secundaria y Miroku dijo que tenía que ir con sus padres (aunque no le creí, lo más seguro es que el mujeriego se haya ido a ver a una chica) eso me dejaba a mí, por lo que tendría que caminar sola hasta mi casa el día de hoy.
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Al llegar a mi hogar me sorprendí de ver que mi madre había limpiado toda la casa y que la estaba arreglando de una manera realmente elegante, parecía realmente digna de una princesa, no recordaba la última vez que había visto la sala tan ordenada, esto no era normal, algo debe de traer entre manos, ella odia la limpieza y no lo hace a menos de que sea una situación realmente MUY importante.
Kagome.- Hola mama, ¿Que es todo esto?
Naomi.- Que bueno que llegas hija, ve a bañarte y a ponerte lo más hermosa que puedas. Tendremos visitas importantes a la hora de la comida
Kagome.- ¿puedo saber quién vendrá?
Naomi.- Ya lo sabrás cuando lleguen. Ahora ve a arreglarte.
Subí a mi cuarto, no muy convencida, meditando sobre la extraña actitud de mi madre, tratando de imaginar alguna situación por la que ella haría todo eso, pero no la encontraba, trate de dejar de darle vueltas al asunto y hacer lo que ella me había pedido, pero al abrir la puerta de mi habitación me quede sorprendida al darme cuenta de lo que había sobre mi cama:
un hermoso vertido negro tipo coctel, con una nota encima
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Querida Kagome:
Espero que este pequeño presente sea de tu agrado.
Ansió verte esta tarde. Por fin podremos conocernos.
Siempre tuyo I. Taisho
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¿Taisho? ¿Quién demonios será? Nunca en mi vida he escuchado de nadie llamado así.- Otro misterio más que añadir a la lista. - Decidí no darle mucha importancia y después de bañarme me puse ese vestido (por alguna extraña razón sentía que debía hacerlo) me maquille, me pinte los labios de rojo para que resaltaran con el vestido y me deje el cabello suelto, una vez estuve satisfecha con el resultado baje a la sala para buscar a mi madre y preguntarle sobre como habían llegado la nota y el vestido a mi habitación.
(Asi se ve Kagome, solo que con el cabello suelto)
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Kagome.- ¡Mamá! ¿sabes quie.... ¡oh!...
Para mi sorpresa nuestras visitas ya habían llegado, era una pareja algo joven, (O al menos eso parecía), el hombre tenía el cabello color plateado y ojos dorados, mientras que la mujer tenía ojos y cabello color chocolate; mi padre me los presento como el señor Inu no Taisho y su esposa la señora Izayoi...
...Después de saludarlos me fui a la cocina con mi madre para ayudarle a poner la mesa, olvidándome por completo sobre el asunto del vestido...
Terminamos de servir los alimentos y me di cuenta de que mi mamá había puesto dos platos de mas (que extraño se está poniendo esto), ni tiempo me dío de meditarlo cuando me pidió que fuera a avisar que la comida estaba servida. Y al momento que todos ocupamos nuestros lugares me di cuenta de que en los lugares "extras" se estaban sentando dos jóvenes muy apuestos a los que nunca había visto (o eso creía) el que parecía ser el mayor estaba muy elegante, tenía el cabello hasta la cintura de un color plateado, sus ojos eran fríos de color miel dorado y tenía unas extrañas marcas en su frente y mejillas, mientras que el otro muchacho era un poco más informal y se veía algo rebelde, al igual que el mayor tenía el cabello largo y color plata pero él lo lucia de una manera despeinada y despreocupada y sus ojos eran de el mismo extraño color miel característico de esta familia pero sus ojos mostraban la altanería que el tenia... a decir verdad ninguno de los dos me simpatizo...
Inu no taisho.- Kagome ellos son mis hijos, el mayor es Sesshomaru y el menor es Inuyasha
kagome.- Ya veo. Encantada de conocerlos
Sesshomaru.- Es un placer
Inuyasha.- Un gusto
Naomi.- Ellos no vinieron solo de visita Kagome
Kagome.- A ¿no? entonces ¿a que vinieron? bueno, si no es indiscreción
Izayoi.- Claro que no es indiscreción querida, es solo que vinimos aquí porque tenemos que comunicarte una noticia muy importante
Kagome.- ¿A mí?
Izayoi.- Si querida, a ti
Kagome.- ¿Qué es lo que pasa papá?
Sr. H.- Hija mía, lo que pasa es que el joven Inuyasha es tu prometido.
