TAYLOR
La puerta se cierra detrás de Chloe y Dylan, y la casa queda en un silencio raro, casi flotando.
Todavía puedo escuchar las risas de Chloe desde el pasillo, y el “yo ya lo sabía” de Dylan que no sabía absolutamente nada. O eso pensábamos.
Me dejo caer en el sofá con un suspiro largo.
- Bueno - digo - Creo que sobrevivimos.
Nick aparece desde la entrada con una sonrisa que parece iluminada desde dentro.
- ¿Te has fijado en la cara de tu madre? - dice mientras se deja caer a mi lado.
- ¿Cuál de todas? - pregunto - Tenía como cinco al mismo tiempo.
Nick se ríe y se tapa la cara con las manos.
- Y Chloe… Dios mío, creí que iba a saltar por la ventana de la emoción.
- Al menos no chilló dentro de nuestro oído - añado.
- Solo un poco - dice él, inclinándose sobre mí.
Sus risas son contagiosas, y terminamos doblándonos sobre el sofá, recordando cada gesto, cada frase absurda, cada mirada incrédula en la mesa.
Es la primera vez que podemos reírnos como pareja de algo que nos concierne solo a nosotros.
La noche se siente… nuestra.
Cuando las carcajadas se van calmando, lo miro de reojo.
Nick también me está mirando, pero su sonrisa cambia.
Se suaviza.
Se hace más lenta.
Más… peligrosa.
Y antes de que pueda procesarlo, se acomoda en mis piernas a horcajadas, como si lo hubiese hecho toda la vida.
Literalmente se sube encima de mí sin aviso alguno.
Yo parpadeo.
- ¿Y esto? - pregunto, llevándome una mano a su cadera - ¿Qué haces, señor confianza?
Nick se encoge de hombros, pero su gesto es una provocación clarísima.
- No sé… - susurra, con esa voz suave que solo me usa a mí - Me gusta estar así.
Mierda.
Mi corazón se dispara como si alguien lo hubiese prendido fuego.
Su pelo me roza la frente cuando se inclina apenas un poco más.
- Además… - continúa, moviéndose un milímetro, solo uno, lo suficiente para desordenarme la respiración - Creo que ya es hora de que aproveche que puedo hacer esto.
- ¿Ah, sí? - pregunto intentando sonar tranquilo, sin éxito.
Nick sonríe contra mi boca, esa sonrisa pequeña, coqueta, que solo le sale cuando planea algo.
- ¿Por qué? ¿Te incomoda? - bromea.
- No - respondo demasiado rápido.
Él se ríe bajito, orgulloso de su efecto.
Sus manos se apoyan en mis hombros, suaves pero seguras, y su pecho toca el mío apenas.
Un toque casi accidental.
Casi.
- Taylor… - susurra.
- Dime.
- Hoy… cuando todos se fueron… pensé que quería estar contigo así. Sin escondidas. Sin tener que soltarme. Sin tener que fingir nada.
Lo dice con una timidez que contrasta totalmente con la forma en que está sentado sobre mí.
Y luego añade, con una mirada que me derrite:
YOU ARE READING
CANCIONES QUE NUNCA TE DIJE || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR Y NICK GALITZINE ||
FanfictionNick y Taylor han sido mejores amigos desde que se conocieron en la guardería. Hoy, a los 24 años, comparten más que recuerdos de infancia: fundaron juntos una discográfica, viven bajo el mismo techo, y son inseparables. Nick es la voz, el rostro ca...
