~•Errores~•

Depuis le début
                                        

–Te extrañe mucho. ¿Cómo es eso de que estas saliendo con el señor Rossetti?

Ya empezamos con las preguntas.

–Sí, y por favor. Dile a Rafael que no diga cosas que no son ciertas, esta hablando sin saber y él no toma decisiones por mi. Soy adulta y se lo que hago.

–Pensé que eran rumores...

–No es ningún rumor, y que le quede claro a tú esposo que yo no soy su marioneta como para que me use a su antojo o quiera decidir mi vida.

–Te dije que lo llames como lo que es, tú papá.

–No se lo merece.

Una de las mujeres que trabajan aquí se nos acerca con una bandeja con dos tazas de café.

La deja en la mesita y se va sin decir más, mi madre toma una taza, yo no. No vine a tomar café con ella, vine a hablar con ella.

–¿Cuando dejaras de justificar lo que Rafael te hizo?

–Te dije que no lo llames por su nombre y lo llames por lo que es.

–No. Responde mi pregunta y dime, ¿Cuando te quitaras la venda de los ojos?

–No hay ninguna venda, tú solo te estas creando un problema que ya no existe.–Bebe de su café.

–¿Que ya no existe? Ja, mamá. Date cuenta de una maldita vez por todas, el solo te está manipulando, ¿Crees que le importo cuando te fue infiel? ¿Crees que él pensó que estaba haciendo lo correcto? No era un niño de cinco años y sabía lo que hacía, cuando te dejaste de él me sentí feliz, pero cuando lo perdonaste y volviste con él se te olvido lo que te hizo y la razón por la que ya no estabas con él. Por algo no seguías con él. Nunca me creíste cuando te dije que me golpeaba.

–¡Deja de decir estupideces! ¡el no te golpeaba!

–Claro que si, yo sufrí, no recuerdo casi nada más que él golpeándome ¡ Y no digo estupideces! ¡Digo lo que es, digo que me duele ver como tu sigues con él él y no te das cuenta que todos estos años desperdiciaste tú vida junto a él!

–¡No he desperdiciado nada, yo lo amo!

–¡Exacto, porque lo amas todavía sigues con él. Tú  amor no te hace ver que él es un hombre que no te merece. ¡Él te fue infiel tres veces! ¿Y que hiciste? Las tres veces lo perdonaste diciendo que era un error que cualquiera podía cometer, diciendo que era un desliz. No mamá, quien ama no es infiel, y si fue un error que cualquiera comete ¿Por qué no lo cometiste tú?

Sus ojos se abren, su mandíbula se tensa y se queda callada.

–Exacto, porque lo amabas y lo sigues amando, pero por más que duela lo que voy a decir, él no te amo, porque quien verdaderamente ama nunca piensa en fallarte, en manipularte y hacerte creer que tú hija está en contra de tu felicidad y es una egoísta.

–N-no digas cosas que no son ciertas.–Me mira como si no se pudiera creer lo que digo.

–No, ¿Crees que no me duele decirte esto?¿Crees que no me duele ver como te manipula y tú lo justificas diciendo que son "Errores"? Mamá, te fue infiel tres veces. Siempre que intentas dar una opinión él te calla y no te deja hablar, te dice que yo solo soy una egoísta que no quiere que seas feliz, cuando quieres hacer algo él no te deja hacerlo y hace lo que quiera. ¡Incluso una vez no te dejo ir de fiestas con tu hermana solo porque él no estaba invitado! ¡Ya date cuenta y quitate esa jodida venda de los ojos!

–¡Eliana! ¿¡Que es esa maldita manera de hablarle así a tú madre y hablar de mi así?–Escúcho que dicen a mi espalda, reconozco la voz y es la del que me engendro.

Correr en las llamas ardientes.Où les histoires vivent. Découvrez maintenant