Narra Silvia...
Caí en el suelo, mi pie está lastimado, si Luciana no se hubiese defendido como lo hizo la hubiese matado, estuve a punto de matarla, ni siquiera la reconocí con esa nueva máscara, pensé que era un operador aleatorio de KorTac.
Intenté pedir ayuda a través del intercomunicador pero no había señal, no había respuesta, se había estropeado, ¿cómo pudo pasar eso justo ahora?
Me levanté del suelo pero me resbalé con las rocas filosas y mojadas, un pie lo tenía torcido y el otro completamente lacerado, no podía levantarme por más que lo intentara.
A lo lejos veía como se acercaba König, junto a dos operadores más, uno de ellos había estado luchando con Simon cuerpo a cuerpo, fue el espectáculo más intenso que he presenciado, el otro operador tenía una tela verde que le cubría la cabeza y parte del cuerpo.
Empecé a sudar por el calor tan intenso y los nervios, tenía que estirar mi cuello por completo para poder ver a König, su sombra me cubre por completo, estoy muerta.
Era como ver a una muralla venir hacia tí, por primera vez viendo a mi cuñado, sentía pavor, las manos me temblaban y no podía hablar.
Tomé una pistola de mi pechera y le disparé en el torso varias veces hasta que vacié el cargador, pero las balas no lo penetraron, era como intentar dispararle perdigones a un jefe final.
El de negro se acercó a mí y me desarmó, arrojando la pistola hacia la cascada detrás de mí, veía sus ojos azul claro inyectados en sangre, ni siquiera pude despedirme de nadie.
- Agradecele a ya sabes quién porque sigues con vida. - soltaba König en tono amenazante claramente refiriéndose a mi hermana.
König y los otros dos pasaron de mi, ignorandome por completo, y perdiendose entre la naturaleza oscura del lugar, dejándome sola de nuevo.
Pasaron algunos minutos y me arrastré para apoyar mi espalda de algún árbol cercano, creo que me he fracturado una pierna.
Tomé ramas y hojas y cubrí mi cuerpo con ellas para camuflarme mejor, no podremos con KorTac, son demasiados, y son demasiado buenos, nos están cazando como a animales.
Escuché ramas quebrándose a mi alrededor y unos pasos firmes junto a una respiración pesada, pude ver el reflejo de la máscara nueva de Simon y siseé para llamar su atención.
- Tonta, pensé que habías muerto. - susurró acercándose a mí.
- Estuve a punto, créeme.
Simon me tomó por la cintura y me cargó en sus brazos, lo hizo con tanta facilidad que creo a causa de mis vomitos, quizás he adelgazado más de lo normal.
El conflicto KorTac - SpecGru había durado tantas horas que nuestro bando pudo armar tiendas de campaña y refugios en la selva para descansar entre los combates.
- Bájame, intentaré caminar. - le pedí a Simon.
Él accedió y apenas toqué el suelo, tuve que doblar mis piernas y dejarme caer porque no soportaba el dolor, definitivamente me había fracturado varias cosas.
- Te rompiste algo. - concluyó Simon.
- Eso creo, caí por un risco y luego me doblé el tobillo con unas piedras.
- Auch, debió doler. - comentaba Soap.
- No respondías la radio Silvia. - comentaba Farah sosteniendome de un costado.
- Se averió, no sé cómo. - respondí.
- No se averió, alguien de KorTac debió haber hackeado la radio. - respondió Simon para luego arrancar de mi pecho la radio y arrojarla con todas sus fuerzas hacia un río que se encontraba del otro lado.
DU LÄSER
Mein Schatz König
FanfictionWARNING: En este AU, KorTac (todavía) no existe, sino más adelante. Luciana, una joven doctora de ascendencia italiana y radicada en Bristol en la frontera inglesa con Gales, trabaja como médico para el Servicio Aéreo Especial Británico, terminará u...