Richard And The Dead's

#3 Familia

Un caballero de blanco y negro corría en la oscuridad tratando de escapar, una bestia lo perseguía. Aquella poseía ojos rojos como la sangre y cuernos como bastones, junto a unas emplumadas y coloridas alas.

Trataría de escapar pero no obstante sintió un peso, su corazón dolía. Sentía que el aire escapaba de su pecho, sus piernas temblaban logrando que perdiera el equilibrio cayendo directo contra el suelo.

solo sintió que cada paso de aquella criatura lo hacía empeorar horriblemente hasta que sin poder soportar más el dolor solo cerró los ojos.

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Al abrir los ojos, Richard sentía aquel dolor en su pecho pero también en su rostro y demás partes del cuerpo pero no eran tan fuertes como en el sueño, al mirar noto que estaba en el suelo enredado en las sábanas. Llegó a la simple conclusión de que se cayó de la cama mientras dormía.

" Un sueño... solo fue un sueño.." - se dijo a sí mismo para luego tratar de desenredarse de ese trampa de sábanas que lo tenía atrapado.

Pensé en que el sueño podría significar algo pero no quería comerse la cabeza pensando en darle lógica a algo tan ilógico como lo son los sueños, bajando de las nubes el sonido de su teléfono llamó su atención, al acercarse a su mesita para revisar vio que era un recordatorio de su calendario.

Este a veces iba a una de las compañías financiera de su padre pero este solo pasaba por la oficina por qué se le requería o había un evento importante, era contador pero siempre su padre hacia lo posible para que tengo poco trabajo normalmente su misma presencia hacia que las personas actúan diferente con el. Se sentía como si estuviera maldito, la recepcionista siempre le daba crucifijos y rosarios como supuesta ayuda.

".. Veamos .. según el calendario es la fiesta de aniversario, seguro mi padre estará... quisiera no ir... pero supongo que no estaría mal ver a la familia ... " - dijo lo último tratando de subirse un poco el ánimo, no tenía ganas de ver a su padre. No lo odiaba pero tampoco hablaban, desde que sus padres se divorciaron casi ninguno trato de mantener contacto.

Fue a buscar un traje presentable, recordaba que su padre es algo quisquilloso con los pequeños detalles, también que era mucho de las apariencias a si que tendría que dar su mejor imagen.
Se vistió con su camisa y sus tirantes, traje e pantalón negro pero como no era de usar corbata se puso su pañuelo con el broche familiar el cual era un Ruby con un borde dorado, entonces bajo las escaleras a desayunar algo rápido.

Al bajar los espectros algo curiosos de su nuevo y repentino cambio en apariencia no podían evitar mirarlo.

" Pero bueno, ¿quién se murió?... Parece que vas a un funeral "- dijo Frank mientras estaba mirándolo de pies a cabeza con el único ojo que tenía ya que no recordaba dónde perdió el otro.

" Nadie... pero es casi lo mismo, volveré algo tarde o tal vez temprano. Lo que surja primero... "- contestó con pocas ganas, se tomó un café rápido para luego ir tomando su saco y bufanda saliendo sin olvidar su bastón de la familia para tomar un taxi.

pero ahora solo trato de respirar y suspirar. Eventos así solo provocan que se sintiera peor, cuando era más pequeño solía ir mucho a esos eventos por diversión pero ahora solo sentía que iría a que vean que sigue con vida.

Los muertos observaban como el taxi se alejaba cada vez más de la mansión hasta perderlos de vista.
Era temprano y como siempre mantenía su puntualidad, llegó al lugar de reunión y se noto bastante su llegada, mentalmente contaba la cantidad de personas que evitaban mirarlo a los ojos, es una mala costumbre que él tenía.
Entonces tomó una copa de champagne pero solo le dió un pequeño sorbo mientras deambulaba por el gentío al llegar a cierta zona vio al mayordomo de su padre, Lo bueno es que era el único que se dignaba a mirarlo a los ojos aunque tal vez era por qué era algo viejo pero le agradaba.

" Buenas tardes Alister, ¿me recuerdas?..." - dijo con una sonrisa amigable, las personas junto a este se quedaron calladas de golpe. Algo que era bastante común.

" Joven Richard, ¿es usted?... Se ve tan cambiado..."- este hizo una sutil reverencia ante el joven, aunque ya no era su mayordomo aún le seguía teniendo respeto a los miembros de la familia Ruby. " Es una grata sorpresa verlo tan sano, El señor Stephen salió a atender una llamada..."- mencionó antes de que el otro pudiera tan solo mencionar algo relacionado a su padre.

" Siempre fue alguien ocupado, bueno... ¿Hay algo nuevo de él?.."- pregunto solo para tratar de conversar, quería que el tiempo pase más rápido y nada era mejor que conversar con alguien .

" Pues el Señor Stephen ha estado bastante ocupado desde su nuevo compromiso, su nueva esposa es algo demandante de atención... la señora Silvia debe estar por aquí si quiere conocerla.."- eso lo tomó por sorpresa, él nunca estuvo enterado de eso, ni siquiera recibió una invitación o una llamada de su padre o alguien.

"... ¿Cuándo pasó eso? ... Yo no estaba enterado de nada... "- estaba bastante desconcertado, con esa noticia.

" Si mi memoria no me falla... desde que usted empezó a vivir en la casa del difunto señor Victor..."- contestó amablemente sin notar aquella expresión tan sorprendida del joven.

Entonces la mencionada hizo aparición, una mujer joven de cabello castaño y con un lujoso vestido de gala, aquella se acercó a hablar con el mayordomo pero entonces hizo contacto visual con Richard está sintió un escalofrío recorrer su cuerpo y desvió la mirada.

" Señora Silvia, este es el hijo del señor Stephen. El joven Richard... "- comentó el hombre para aliviar el ambiente pero cada vez se sentía más tenso e incómodo.

" Oh vaya... eh... Esto es incómodo pero... mi Stephen... nunca mencionó que tuviera un hijo.. "- con solo escuchar eso este apretó la copa provocando que el vidrio se agrietaba por la presión, trato de no hacer ningún gesto con el rostro y verse amigable solo respiro e suspiro.

" No sé preocupe, seguro se le olvidó mencionarlo... un gusto conocerla y bienvenida a la familia, espero que nos llevemos bien... "- al notar que la mujer se veía más calmada, tomo de un trago su champagne.
Aún que no la conocía tampoco podía quejarse de nada. - " iré a tomar un poco de aire si me disculpan..."- solo quería salir, se sentía como un niño cuando no tenía con quién estar y el malestar que tenía solo empeoraba, se estaba arrepintiendo de haber ido en primer lugar al evento.

Se sentía tan fuera de lugar, pensó en hablar con su padre pero ya se sentía horrible, le dolía el pecho. solo salió para respirar un poco y decido tomar un taxi de vuelta a la mansión.

Había tanto que quisiera preguntar o más bien recriminar pero... solo sentía que terminaría peor que ahora a si que está vez se mantendría alejado voluntariamente. En los viejos tiempos aquellas cosas lo hubieran agitado tanto que su marcapasos estaría pitando como loco pero su corazón estaba bien así que sólo descansaría tampoco quería jugarle mucho al destino.

Al llegar fue recibido por aquellos espectros quienes lo miraban con curiosidad ya que querían saber qué anduvo haciendo.

" Te ves del asco... ¿acaso la fiesta fue pésima?.." - habló primero Frank mirándolo y sonriendo confiado de su suposición.

" Nunca te daría la razón pero si... no creo que vuelva a ir a otro evento... "- contestó de mala gana.

La pequeña que estaba cubierta por su belo sacó una insecto del jardín ofreciendola al mortal como regalo para tratar de animarlo, Marilyn apenas se veía de nueve pero parecía comprender cuando alguien se sentía mal.

El esqueleto miró en su dirección y se cruzó de brazos, conocía esa mirada.

" Entonces ve a cambiarte y haz otra cosa, En mi época no había tiempo para andar triste!.."- dijo autoritario Eduar.

Está vez Richard decidió hacerle caso y subió las escaleras a cambiarse, aún tenía el resto del día y aunque le cueste esos espectros se preocupan por él... bueno solo dos de ellos.

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Mal escrito o redactado seguramente pero cualquier corrección es bien recibida, gracias por leer. Nos vemos en el capítulo cuatro.

Atte: Ice