Mein Schatz König

Capítulo 70 "Amor en tiempos de situación de rehenes"

Me arrastraba por los ductos de ventilación, el metal helado me quemaba la piel, pero debía avanzar, el lugar era reducido y apenas podía respirar.

Al fin había encontrado la cápsula, parecía una bomba casera, y debía desactivarla, justo debajo del ducto de ventilación había un salón de clases repleto de niños en sus pupitres rodeados de hombres de negro que venían de parte de Jørgen.

- Aquí beta, encontré la cápsula. - informé a través del intercomunicador.

- ¿Ves algo más? - interrogaba Price.

- Hay 4 secuestradores en un aula, hay demasiados niños aquí dentro. - susurré.

- Ve con cuidado, corta los cables de la cápsula y estará desactivada.

Tomé con dificultad una navaja que guardaba en un bolsillo y corté los cables que me indicaba Price.

- Listo señor.

- Trae la cápsula, hay que destruirla.

- En camino.

Cómo pude retrocedía halando hacia mi la cápsula pesada hasta que pude salir de los ductos, el viento frío me golpeaba el rostro.

Caí al suelo exhausta, me dolía todo, afuera parece que todo estaba mucho más tenso, veía a König a lo lejos apuntandole a Jørgen con el rifle de francotirador.

Me acerqué a Gundersen y a los demás con la cápsula en las manos, la hicieron a un lado y siguieron en lo suyo.

- ¿Que viste? - interrogaba Price.

- Está repleto de protestantes.

Price veía a Gundersen con las manos posicionadas a los lados de su cintura.

- Jørgen, necesito que se retiren en paz, nadie saldrá herido, tienes mi palabra. - Gundersen anunciaba a través del altavoz.

- Si tanto confías en mi, que uno de ustedes venga hasta aquí. - retaba.

Todos se veían entre sí, MacTavish se adelantó unos pasos pero Luciana lo detuvo en seco.

- Iré yo. - decretó mi hermana.

- ¿Qué haces? - cuestioné.

- Hay que darle lo que pide. - respondió ella.

- Sierra 15, ¿Qué es lo qué estás haciendo? - interrogaba König a través del intercomunicador.

- No pasará nada. - respondía mi hermana temblando.

Se acercó poco a poco con las manos en alto hasta Jørgen, y éste la sujeto con fuerza tomándola de rehén y apoyando el cañón de su rifle sobre su sien.

- Nos vió la cara. - refutó Price furioso.

- ¡Larguense de aquí!, ¡Apoyan la herejía!, ¡Bastardos! - amenazaba.

- Jørgen, esto no es lo que habíamos acordado, suéltala y nos iremos. - comunicaba Gundersen.

- Bravo 6 a todos los Bravo, rodeen el lugar, entren y liquiden en sigilo. - ordenaba Price.

- Bravo 6 permiso para derribar al secuestrador. - solicitaba König.

- Espera un poco König.

- Va a matarla. - refutaba König.

Jørgen movió el dedo sobre el gatillo del rifle y en seguida ví como una bala le atravesaba la cabeza desde la distancia, el disparo que Jørgen tenia planeado para Luciana se desvió y penetró en el pie del comandante Gundersen, derribandolo en el suelo.