El Despertar del suplente. [BL]

Capítulo 128.

Pero no se preocupó, la noche todavía es muy larga.

Levantó el pie y se estiró sugestivamente hacia Yan Heqing. Se estiró durante mucho tiempo pero no lo tocó. Estaba confundido y deliberadamente derribó algo y bajó la cabeza. Justo cuando se inclinó, escuchó el movimiento. Se abrió la silla, seguido de una voz clara: "Voy al baño".

La respiración de Cheng Jian se detuvo de repente.

La voz era más atractiva de lo que imaginaba.

Cogió la servilleta con calma y se levantó, justo a tiempo para ver la silueta de Yan Heqing irse.

Después de servir una copa de vino, Cheng Jian y Xiao Zhou se guiñaron un ojo. Xiao Zhou tomó la copa, se levantó y caminó hacia el lado de Lu Muchi. Se inclinó y le ofreció el vino: "Sr. Lu, he tomado tres copas. Éste es tuyo."

Al mismo tiempo, Cheng Jian se puso de pie y dijo: "Mientras charlas, atenderé una llamada".

Después de salir de la habitación privada, Cheng Jian caminó rápidamente hacia el baño.

En el otro extremo del pasillo, Yan Heqing estaba en la esquina, observando tranquilamente a Cheng Jian alejarse y luego lo siguió.

○●

Cheng Jian no podía esperar para llegar al baño. En el baño silencioso lleno de perfume, las cuatro puertas estaban entreabiertas. Se acercó confundido y revisó una por una. Cuando llegó al cuarto cubículo, una voz sonó detrás de él, "¿Qué estás haciendo?"

Cheng Jian se dio la vuelta de repente y vio a Yan Heqing entrando al baño y caminando hacia el lavabo para lavarse las manos.

La luz del baño también era una costosa lámpara de cristal. La luz naranja cayó sobre el costado de la cara de Yan Heqing, lo que hizo que a Cheng Jian le picara el corazón. Se acercó con una sonrisa y dijo: "En el baño, naturalmente resuelves los problemas físicos. Tú..."

Cuando llegó al borde del lavamanos, sostuvo la encimera con una mano y miró a Yan Heqing con los ojos, "No he preguntado todavía, ¿cómo te llamas?".

Yan Heqing parecía tranquilo, "No es necesario que lo sepas".

"Estás siendo humilde", Cheng Jian hizo un juego de palabras: "Cualquiera que pueda entrar a los ojos del presidente Lu es el mejor entre los hombres".

El tiempo casi había terminado. Yan Heqing retiró la mano y el grifo automático se detuvo. En el espacio tranquilo, se oyeron pasos débiles que se acercaban. Yan Heqing sacó un trozo de papel para limpiarse las manos, el cuarto de baño se volvió silencio.

Lu Muchi sospechaba que estaba gravemente enfermo. Cuando Yan Heqing fue al baño, Cheng Jian iba a contestar el teléfono. Siempre sentía que algo andaba mal, y la forma en que Cheng Jian entró a la habitación privada y miraba a Yan Heqing lo inquietaba, tuvo que ir al baño a echar un vistazo.

En realidad--

Cheng Jian está en el baño.

"El Sr. Cheng contestó el teléfono y fue al baño". Lu Muchi frunció el ceño,  muy infeliz.

Cheng Jian lo sabía, quería llevar a Yan Heqing a la habitación de invitados de inmediato. Era solo que era inconveniente hablar demasiado sin rodeos. No quería que Lu Muchi se aprovechara de él en el contrato. Entonces insinuó: "No hay manera. Tengo prisa después de hablar por teléfono. Pensando en conocer al pasante del Sr. Lu, quería hablar más con él.

Justo cuando Lu Muchi estaba a punto de hablar, entró un hombre. Yan Heqing también se secó las manos y salió. Lu Muchi apretó las manos, reprimió temporalmente su insatisfacción, se dio la vuelta y lo siguió.