hunt | #8 | teen wolf

4 | The new hunter.

| El nuevo cazador.

Allison.

Parker me envió un mensaje de texto tan pronto como Brett y Lori estuvieron a salvo y él quemó el veneno del sistema de Brett para que pueda sanar, contándome que estarán escondidos un par de días hasta que él esté completamente recuperado y después van a dejar la ciudad. Aunque las cosas salieron bastante mal esta noche, es agradable saber que va a estar bien al igual que Isaac. Brooke todavía estaba llorando en el momento en el que la ambulancia finalmente llegó y los paramédicos la alejaron de él hace casi dos horas ya, pero la madre de Scott nos dijo hace un rato que las heridas habían comenzado a sanar, así que teníamos que sacarlo del hospital pronto o los doctores se darían cuenta de que estaba curándose por sí mismo después de haber sido brutalmente golpeado por un auto enorme y haberse roto una cantidad importante de huesos, además de toda la sangre derramada en la escena.

—Ahí están —anuncia Liam desde los asientos de atrás de mi auto, apuntando a Scott y Brooke ayudando a Isaac a caminar hacia nosotros. Enciendo el auto y conduzco hasta ellos, mirando los asientos traseros sobre mi hombro y veo a Liam abrir la puerta para que Isaac pueda entrar—. ¿Cómo te sientes? –le pregunta en cuanto sube al auto.

—Como si me hubiera arrollado un auto —contesta en un gruñido, todavía adolorido por el golpe de hace rato.

—Lo siento —se disculpa Liam con una mueca.

Isaac asiente en respuesta, pero no dice nada más, mirando a Brooke cuando sube junto a él al tiempo que Scott sube en el asiento del copiloto y entonces arranco, saliendo del estacionamiento tan pronto como puedo antes de que alguien note que nos llevamos a un paciente a quien los doctores no le han dado el alta. Sin embargo, como temía desde que descubrí que Gerard está tras todo esto, las cosas vuelven a salir mal después de un rato cuando comienzo a tener problemas con el auto.

— ¿Qué pasa? —pregunta Scott.

—Creo que es un neumático —respondo y me quito el cinturón para bajar y revisar si mi sospecha es cierta.

—Sar, ustedes quédense aquí —dice Scott mientras me imita, quitándose el cinturón de seguridad también. Brooke asiente y Scott rodea el auto por detrás después de cerrar la puerta, acercándose a mí—. ¿Con que se pinchó? —me pregunta y se inclina hacia el frente para mirar, curioso.

—No tengo idea —respondo de cuclillas en el suelo, pasando con cuidado la mano sobre el neumático en busca de que lo pinchó, pero pronto el sonido de autos acercándose me llama la atención y giro la cabeza a un lado, cubriéndome los ojos con un brazo frente a la cara para no ser cegada.

Cuando los motores se apagan y las luces con ellos, mi visión vuelve a ser clara y es en ese momento que puedo notar que son dos camionetas y dos hombres robustos bajan de cada una de ellas con las miradas puestas en nosotros. No tardo en ponerme de pie de nuevo y me coloco junto a Scott, mirando a los tipos que se acercan.