Capítulo 34 "Psicología inversa"

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Fin del flashback

Narra Ghost...

Zanetti seguía dándome la espalda en la cama sin decir una palabra, solo suspiraba y acomodaba su cabeza sobre la almohada, la situación empezaba a tornarse incómoda y se me estaba ocurriendo algo, que tal vez era cruel pero podía funcionar.

- Creo que lo mejor es que dejes la 141. - sentencié con malicia.

Zanetti giró con violencia y con el ceño fruncido dirigió su mirada confundida a la mía.

- ¿Qué dices?, ¿Por qué? - interrogaba, veía como su pecho se elevaba y descendía con fuerza.

- Si no eres capaz de soportar una situación como esta, lo mejor es que te dediques a otra cosa más tranquila, porque este será tu pan de cada día.

- ¿Una situación?, casi me violan Riley.

- Sé lo que pasó, pero cosas terribles pasan en el mundo todos los días, y no puedes venirte abajo por cada cosa que te pase.

- ¿Qué es lo que te pasa?, ¿Por qué me dices eso?

- Lo mejor será que te vayas a trabajar a un hospital, tampoco eres tan buena en esto.

- ¿De que hablas?, ¿No me has visto cabalgar y disparar un rifle al mismo tiempo?- refutaba decidida y orgullosa.

- ¿Y acaso eres buena?

- ¿Buena?, claro que lo soy, y además de eso les curo el trasero cuando están heridos, ¿qué más quieres?, no me iré solo por qué tú lo digas. - Zanetti me señalaba con el dedo índice furiosa.

- Solo te estoy jodiendo, sé que eres un soldado decente.

- Claro, decente, hijo de puta. - Zanetti me propinó un golpe en el hombro.

- No puedes dejar que situaciones así te derriben, hay que seguir Zanetti, hay que seguir...

Narra Luciana...

Ghost me estaba probando, intentaba sacarme de mi trance a su manera, y bueno, había funcionado.

Sé que Ghost ha pasado por cosas delicadas, y no precisamente estando de servicio, lo que le ha pasado seguramente viene de mucho antes, viene arrastrando traumas desde su infancia probablemente, esas cicatrices y quemaduras que tiene datan de hace muchos años, muchos más años de los que tiene él en servicio.

- ¿Has pasado por cosas así? - interrogué curiosa, cruzando mis piernas y acercándome a él para escucharlo.

- Cosas parecidas, sí. - Ghost bajó la mirada, suspiró con pesadez y cerró los puños sobre sus rodillas.

- ¿Cómo hiciste para superarlo?

- No lo he superado, esas cosas no las superas nunca, simplemente sigues con tu vida, el trauma sigue ahí y tú creces alrededor de él. Sin embargo, la terapia te da herramientas para poder manejarlo.

- ¿Vas a terapia?

- Sí, desde hace mucho tiempo, por el insomnio y la depresión diagnosticada que tengo, debo ir a terapia con regularidad, espera, ¿por qué te estoy diciendo todo esto?, ¡Jódete!

- Disculpa por reírme. - no podía evitar carcajearme.

- Tú también deberías ir a terapia. - Ghost dirigió su mirada a la mía y sugirió viéndome con sus ojos vacíos detrás de la máscara, lo que hizo que mi risa se congelara.

- Totalmente de acuerdo.

Hubo un silencio luego de eso, veía con detenimiento su máscara, al igual que König parecía que nunca se la quitaba, luego de haber pasado por tanto es lógico que no quiera que nadie lo reconozca, ¿quién sabe que habrá hecho?

Mein Schatz KönigDonde viven las historias. Descúbrelo ahora