Capítulo 7 "Fuera de combate"

602 60 4
                                    

No sé cuánto tiempo pasó, supongo que no mucho, hasta que sentí que me llevaban en brazos por un pasillo a paso acelerado, sé que era König quien me llevaba por lo que recordaba, me subieron a una camilla, entre mi vista borrosa distinguia una figura de blanco, supongo que era una bata o algo parecido, es decir, tal vez era bata o el uniforme de un médico...

- Solo dejen pasar a König. - balbucee posando mi mano sobre aquella figura blanca.

- ¿Disculpe?, no la escucho.

- Al lugar donde me lleven. - respiré hondo para seguir hablando. - solo dejen pasar a König, por favor.

Cerré mi ojo, mis párpados pesaban brutalmente, nada me importaba más que dormir, el dolor era secundario para mí en ese momento, si vivía después de esta sesión de sueño, lo primero que vería sería a König, y si no, lo último que hubiese dicho en vida sería que quería ver a König...

Abrí mis ojos, me encontraba en una habitación de hospital o alguna clínica, seguía sin poder ver por mi ojo izquierdo, tal vez lo había perdido, no quiero pensar en eso. En las mesas cercanas a mi, habían flores, hortensias lilas, rosas blancas y una que me conmocionó, lirios araña de fuego rojos, todas mis flores y colores favoritas, me sorprendería pero como decía antes, el equipo debe saber hasta mi tipo de sangre, pero... ¿los lirios dónde los consiguieron?, tenía entendido que solo estaban en Asia.

Tantas flores me hicieron pensar que capaz he estado aquí durante más tiempo del que podía calcular, dirigí mi vista hacia el lado izquierdo de mi habitación, forzando mi limitada visión, para encontrar a un hombre de 2.08 centímetros cruzado de brazos y viéndome desde el asiento... König, luego de las flores, era lo primero que mis ojos veían al despertar.

De pronto me desmoroné, al recordar lo que hice, me sentía devastada, había matado, algo terrible, hubiese preferido morir, hubiese preferido que Ghost hubiera llegado 1 segundo después, antes que lidiar con este sentimiento, sentía que el corazón se me había convertido en agua, el vacío en mi interior era infinito. Vi a König, como sus ojos se dirigían a los míos...

- König...- llamaba con voz quebradiza y debió ser casi inaudible.

- Dime lieben... - no sé que es lieben, eso me confundió.

- Maté König, he matado a alguien...- logré soltar, intentaba aguantar las lágrimas.

König se levantó del asiento, tomó la silla, se acercó hasta mi y se sentó posando su mano cálida sobre la mía, sentía mi alma volviendo poco a poco con su tacto.

Sé que dije que maté a alguien, como individual, pero me refería a que cada persona que maté ese noche, era alguien, tenía una vida...

- ¿Crees que Dios me perdone?- preguntaba a König, viendo sus brillantes ojos azules atentos.

- Luciana, eran criminales, le hiciste un favor al mundo liquidando a esos hijos de puta, ellos te dispararían sin importar nada, ¿por qué te preocupas por eso?

Sé que tenía razón, vi lo que hicieron, estuvieron a punto de matarme varias veces, fuese fachada o no igual traficaban personas, no eran santos...

- Tienes razón, solo...nunca había hecho algo así. - respondía sujetando su mano y masajeandola, me calmaba eso.

- ¿Te arrepientes de haberlo hecho?

- Si no lo hubiera hecho, no estaría viéndote. - sonreía.

Entonces, en ese momento, estaba empezando a reflexionar, König había dado su vida por mi también, varias veces durante esa noche...

- Te debo una.

- ¿Por qué lo dices?- cuestionaba extrañada.

- Salvaste mi vida, y estás así ahora por mi culpa.

Mein Schatz KönigWhere stories live. Discover now