Odio que no te odio - KIVI

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-Amor, lo siento. Es que quería ver si me volvías a decir eso de que era tu novia como anoche. - Me dijo Violeta mientras me abrazaba

- Ah vale, encima era para vacilarme. -Dije molesta y Violeta enseguida se dió cuenta que igual me había molestado más de lo que creía.

- Ey, lo siento. He tirado más de lo que debía, no me he puesto a pensar en como podías tomartelo. -Dijo y estaba por seguir hablando y la interrumpí.

- No, que va, si me hace gracia que hagamos bromas con el tema, es que estoy un poco como... No lo sé, es que no se bien que siento y mañana tu te vas y no lo sé, es como si... Da igual... Es eso.

- Vale, lo entiendo -Me dijo Violeta y dió un beso en mi pelo. -¿Rus te apetece ver una peli con nosotras y luego ya te alcanzamos a tu piso ?

-Una peli con las Kivi es un plan al que nadie puede decirle que no. -Dijo Rus y yo sonreí.

-Me pido el medio del sofa - Dije y ambas se rieron porque sabían que era rápida con esas cosas.

Vimos la peli entre risas y caricias. Violeta me miraba de reojo cada tanto porque sabía que estaba rayada y yo estaba cada tanto mirando a Rus para asegurarme que estuviese bien.

Cuando terminamos la peli Ruslana se levantó primera.

-Bua tías me ha sentado genial la tarde con vosotras. Gracias de verdad, sois las mejores amigas. Yo en dos días vuelvo a Madrid por lo que creo que recién las veré de nuevo allí pero eso.

- Rus no tienes que irte tan rápido -Le dije y ella sonrió.

- Que va, necesito ir a casa  y estar sola.

-Cualquier cosa llámame.

-Lo haré, lo prometo.

-¿No quieres que te llevemos? Nosotras debemos ir a mi piso.

-No, tranquilas me apetece caminar y de aquí no es tan lejos.

-Vale Rus, cuídate. -Le dijo Violeta  y ambas la abrazamos para despedirla.

En cuanto se fue Violeta me miró  y luego suspiro.

-Kiki ve a por tu móvil así nos vamos a mi piso. - Me dijo con suavidad y yo fui a buscarlo sin problema. El ambiente se había puesto un poco tenso pero porque sabíamos que esa conversación que veníamos evitando era inevitable que suceda.

Salimos de la casa y nos montamos en mi coche, al fin y al cabo al día siguiente Violeta ya tendría que devolver el coche y eso lo hacía en el mismo aeropuerto así que lo mejor era que tuviera mi coche disponible.

En cuanto entramos a su piso me tire en el sofá y ella hizo lo mismo sentándose a mi lado.

- Supongo que nos toca otra despedida - Dije y Violeta cogió mis manos.

- Nos veremos en nada, serán solo unos días. Intentaré cuadrar con Rus  o con alguno de los chicos o con todos los que pueda para ir a recogerte al aeropuerto.

- Me asusta Madrid.

-Lo se, pero tienes que enfrentarlo.  A fin de cuentas te queda un año y luego ya no tendrás excusas para estar aquí.

-Es que no se si me apetece perder lo que tengo aquí.

- Se que te asusta volver a pisar Madrid después de más de un año pero mi tu eres la misma, ni la situación es igual. ¿Que es lo que más te asusta?

- Es que no lo sé, creo que todo en general. Las guardias, las fotos a traición,   el ritmo, cruzarmela, las reuniones en las oficinas, Manu en persona.