In my feelings

Semana 8 pt.I

-Yo pago lo que debo, ya lo sabes- soltó sin vergüenza ninguna la chica haciendo que a Violeta se le subiesen los calores, y los colores también.

Casi cuando habían terminado apareció Lucas que bromeó con ellas y se fue a los lavababos, poco después tambien apareció la aragonesa.

-Miralas parecen madre e hija, ayudando a Kiki con la ropa- le dijo la morena al chico.

-Más que su madre su MILF- bromeó el uruguayo.

La interacción entre ambos, el comentario de Naiara y la broma de Lucas no pasaron desapercibidos por Violeta que desde esa mañana estaría atenta a las reacciones de la chica.

Bea eligió una canción de Adele para su nominación y Lucas Night Changes de One Direction, uno de los grupos favoritos del chico. A Paul y a Álvaro les tocó juntos igual que a Chiara y Martin que harían Hopessly Devoted to you de Grease. Los dos morenos estaban muy felices de que, por fin, les tocase juntos. A Juanjo le volvió a tocar solo por salir nómada favorito, también Naiara cantaría sola. A Violeta le tocó con Rus, con quien tenía muchas ganas de cantar, These boots are made for walking.

El resto del día fue muy tranquilo. En la cena Chiara propuso cenar todos juntos ya que cada vez eran menos pero la idea no cuajó y acabaron separados en las dos mesas de siempre. Tras la cena la menorquina le enseñó a Paul su última canción mientras que Vio y Rus ensayaban su canción.

-Mis dos pelirrojis- dijo Chiara abrazando a ambas chicas.

-Aunque a una la quieres más que a la otra eh- bromeó Rus.

-Ay Rus me siento fatal porque esta semana casi no hemos estado juntas.

-No te preocupes Kiki, entiendo que era lo que necesitabas- dijo mirando, nada discretamente a Violeta.

Chiara estaba inmensamente feliz. Se había salvado de la expulsión, su relación con Violeta estaba mejor que nunca, ambas cruzaron la pasarela asegurándose dos semanas más en el concurso, tenía un dueto con Martin y ahora Rusli y Violeta cada día se llevaban mejor.

El miércoles fue un día ajetreando para las dos, entre las clases de la mañana y los ensayos por la tarde apenas se habían visto más allá de la comida y la hora de la merienda. Durante la grupal no paraban de mirarse y buscarse mutuamente. Chiara estaba, como de costumbre, sentada en el suelo y apoyada en la piernas de Violeta quien, de vez en cuando jugaba con los mechones cortos de su pelo o lo acariciaba la nuca, ahora practicamente visible.

Piano después de cenar? escribió en su libreto la morena para después pellizcar la pierna de la mayor y llamar así su atención. La única respuesta de Violeta fue un beso en la coronilla que la menorquina tomó como un sí.

Ahora que las dos sabían lo que era el sentimiento de ver a la otra en la cuerda floja querían aprovechar todo el tiempo que pudiesen juntas en la academia. Cada semana en OT era un regalo y una experiencia que nunca volvería. Aunque su relación estaba mejor que nunca el miedo de como sería al salir no desaparecía del todo por eso también, querían aprovechar la burbuja en la que tenían la suerte de estar.

-Tengo muchas ganas de seguir trabajando en mi single- le contaba Violeta mientras Chiara tocaba despreocupadamente las teclas del piano de la sala de Manu.

-Buah es que tiene una pintaza Vio, estoy deseando que lo grabes.

-Creo que vamos a meter algo del concepto de cristal que hablamos- continuó explicando, la morena paró lo que estaba haciendo la miró unos segundo directamente a los ojos, algo que puso bastante nerviosa a la pelirroja, y agarró su libreta buscando una hoja en blanco.