𝑷𝒂𝒔𝒂𝒅𝒐 𝑫𝒆 𝑳𝒊𝒏 𝑱𝒊𝒂𝒏

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Su teléfono sonó, al ver quién era remitente sonrió contenta, era su querida abuela, se llamaban mutuamente para saber cómo estaban.

―¿Halo abuela? ¿Cómo te encuentras?― preguntó un poco preocupada por ella. ―¿Ya no te duele el corazón como en la mañana?―

―Mi querida Jian, tu abuela está bien! Las enfermeras solo exageran, está abuela no puede morir sin ver a mi Jian casarse!― Exclamó contenta por el teléfono.

Jian se sintió culpable al escucharla, ella solo quiso a un chico con todo su corazón pero el no correspondío sus sentimientos, ella no se rindió con el y lo espero, llevándola dónde está ahora ―Abuela ya te dije que aún no es el momento...― Mintió nuevamente para aliviar el peso de la verdad.

―Y cuando lo será? Está abuela no es para siempre Jian, se que te gusta trabajar pero deberías relajarte y tener un novio― dijo su abuela, allí va de nuevo "debe relajarse" esa frase rondaba por la mente de Jian.

―¡Abuela soy joven todavía! Apenas tengo 23! ¡Abuela es muy fuerte, estarás aún cuando me case!― hizo un puchero el cuál solo lo hacía con su abuela. ―Cuando conosca a un hombre te lo presentaré definitivamente!―

Su abuela sonrió y rio un poco al imaginar a su única nieta casarse, que más podría pedir, que ver a su tesoro ser feliz como ella lo estuvo con su esposo.

―Estare esperando ese momento mi pequeña Jian, está abuela solo quiere que seas feliz― se tranquilizó ―Bien pequeña Jian te debo ir a dormir ya, cuídate mucho, te quiero―  Jian se despio de su abuela mientras sonreía contenta, hablar con su abuela le subía los ánimos.

Por otra parte la abuela miro a través de la ventana como caían algunas gotas sobre el vidrio, en un momento sintió un pequeño malestar en su pecho que se incremento....

Jian aún caminaba sosteniendo el celular en la mano, mientras se dirigía a visitar a Min-hwan pues queria ir a verlo aunque sea solo un momento, No le aviso quería que sea una sorpresa para el, está llevando su comida favorita para cenar juntos.

Min-hwan fumaba como si no hubiera un mañana en su habitación, puso una carta sobre la mesa donde estaba apostando con sus amigos un poco de dinero, lo necesitaba para comprarle a su novia lo que quería sin gastar lo de su sueldo.

―Mierda, otra vez perdi― se quejo molesto, mostrando su seño fruncido.

―Se un buen perdedor y paga― respondió brusco uno de los chicos de la habitación. ―¿Quieres seguir perdiendo Min-hwan?, tu perrito debe a verte dado algo de valor no?― se rió.

Min-hwan lo miro sin ofenderse o defender a ese supuesto "perrito" solo le jodía perder, busco entre sus cosas la camisa que le regaló su perrito.

―Cállate imbécil, yo no me rindo fácilmente, Todo o nada, está camisa vale más que tu sueldo― Exclamó Min-hwan queriendo ganar o perder más.

―Uy huhu, ¿Jian no se molestará que ya no lo tengas?― preguntó otro chico el cuál miraba la situación divertido.

―¿Ella? Naa, solo debo poner cara de chico bueno y arrepentido y me dejara en paz― respondió sin darle importancia. ―Además no tendría que molestarse no es mi novia―

―Lo sabemos pero ella te ha querido conquistar desde la universidad y tú ni oportunidad le diste― comento el primer ganador, repartió nuevamente las cartas. ―No entiendo cómo no le haces caso si es hermosa―

―Hermosamente estúpida, no es mi tipo― acomodo sus cartas. ―Siempre preferí a la mujeres malas y ella es como un bonito perro que busca atención―

La Bella y las Bestias  | Renaci como la villana sirena?!| Onde histórias criam vida. Descubra agora