—¿Yo? — Se señaló a si misma —Pero si fue el quien se ofreció— Me dijo, yo abrí los ojos y las dos se rieron.

—Te lo dije —Me dijo Lena, Rubí solo sonrió.

—Ayúdame —Le dije de broma a Rubí —Ha estado así todo el verano.

—Es que es la verdad —Se excuso.

—Oye ¿No ha venido Emilie? — Pregunté.

—Le dije que viniera, pero dijo que no, que ella ya iba a salir con otras personas —Yo rode los ojos.

—Bueno, Emilie es Emilie. —Dije.

Pasaron las horas y estábamos bailando, cuanto más miraba a Viktor sin camiseta más caliente, estaba segura de que era culpa del alcohol, había tomado mucho.

—¿Sabes Lena? Tenías razón me gusta Viktor y mucho. — Le dije y ella asintió con una sonrisa.

—Amiga ya lo sabía —Me contesto riéndose.

—Gracias por esto —La abraze.

—Quítate, me vas a acalorar, hace un calor insoportable. —Dijo riéndose.

—Yo creo que es porque hemos tomado mucho y hemos estado bailando.

—¿Rubí donde está? —Me pregunto.

—Fue al baño —Le dije — Voy a buscarla ¿vale? —Lena asintio riéndose.

En vez de encontrar a Rubí, encontré a Viktor.

—Vaya, vaya mira quien tenemos aquí —Dije cantando.

—Deberías de dejar de tomar, no te esta haciendo bien, además todavía eres menor de edad —Me dijo con una sonrisa.

¿Como podía ser tan guapo?

—Tu también lo eres y también tomas, además es mi cumpleaños —Hice un puchero, el miro mis labios.

—Tu cumpleaños ya paso —Me dijo con una sonrisa.

Por dios que sonrisa más bonita.

—Me gusta tu sonrisa —Dije con otra.

—A mi me gustas tu —Se acerco más a mi y yo me acerque a más a el.

—Y a mi también me gustas tu —Le conteste.

Y me beso.

De repente sentí una luz muy fuerte  en mis ojos y los cerré más fuerte. Los abrí lentamente y sentí un fuerte dolor en la cabeza.

Auh ¿Porque tome tanto? ¿Porque Lena me dejó beber tanto?

Estaba arropada por una sabana, creo que estaba en una cama y sentía que estaba desnuda.

Abrí los ojos de repente y mire bajo la sabana.

Estaba completamente desnuda, de arriba a abajo, mire a mi alrededor y estaba en una habitación de chico.

¿Que había hecho?

Había varios trofeos de rugby.

Y en mi cabeza algo hizo clic, esta era la habitación de Viktor. No, no, no ¿Que habia hecho? Trate de recordar algo de lo de anoche, pero no pude, eran recuerdos borrosos.

¿Le dije algo de que me gustaba?

Por dios que vergüenza. Mire a mi alrededor para ver si encontraba mi teléfono y estaba en la mesilla de al lado.

Me mire en el reflejo del teléfono y abrí los ojos, tenía dos chupetones en el cuello, uno más arriba y otro en la clavícula.

No podía recordar nada y me dolía la cabeza mucho. Tenía 8 mensajes de Lena y 5 llamadas de mi madre.

La obsesión de mi hermanastroWhere stories live. Discover now