I AM UNSTOPPABLE

ACTO I

Una noche de 1985 el matrimonio Stark compuesto por Howard y María, volvieron a casa después de varios meses fuera, siendo recibidos por un adolescente de unos 15 años algo malhumorado pero el semblante de este cambio de manera radical cuando se percató de cierto bulto que cargaba su madre.

Ante la mirada desconectada de su hijo, el patriarca Stark hablo y le explicó que por eso había sido su ausencia tantos meses, en un principio Tony se sintió dolido pues nuevamente sus padres le habían hecho aún lado pero cuando su madre le pasó a la que ahora era su hermana, este dejo lejos todo enojo y se perdió la pequeña bebé, la cuál apenas estuvo en brazos de su hermano abrió los ojos y le regaló un pequeño quejido.  Desde ese momento ambos hermanos fueron muy unidos y de cierta manera la familia Stark se volvió más cercana, incluso Howard se disponía a pasar más tiempo en su hogar.

(...)

Con el pasar de los años aquella bebé a la cual nombraron Athenea, ya que María quiso que sus dos hijos tuvieran una A en  sus nombres, rápidamente cumplió 6 años y en el transcurso de esos años, ella y Tony se volvieron inseparables,  aún en sus momentos de rebeldía, Athenea era a la única que no trataba mal por el contrario era bastante protector, salvó cuando el mayor le gastaba una que otra broma.

Esa tarde ambos hermanos discutían o mejor dicho Tony se encontraba molestando a la menor, ya que estaba no lo había querido dejar dormir.

—Ya para Thena o te vamos a devolver de donte de adoptamos.— un Tony bastante crudo le decía a la menor, claro que era broma pero sí la quería fuera, necesitaba dormir.

Pero para Thena aquellas palabras si la dejaron pensando, pues físicamente no se parecía ni a sus padres o a Tony, sobretodo en su cabello rojo.

—¿Soy adoptada?— pese a tener 6 años no era tonta de hecho era bastante inteligente e intuitiva para su corta edad.

— Ajam— respondió su hermano.

Haciendo que está saliera corriendo de la habitación de este y fuera a la de su padre.

—Papá Tony dice que soy Adoptada.... ¿Es verdad? — a esas alturas sus ojitos ya estaban aguados y amenazando con querer llorar

Howard miro a su hija y soltó una pequeña risa negandolo.

— Por supuesto que no... ¿Tú le crees?— a estás alturas el mayor ya tenía a la menor sentada sobre su escritorio dejando el trabajo aún lado.

Ella asintió — No me parezco a ustedes y mi cabello es rojo... — 

— Eso es por qué lo heredaste de tu abuela, se dice que todo Stark siempre consigue a su pelirroja, varias generaciones anteriores así lo han hecho — le fue explicando con toda la sinceridad del mundo, claro que por su bien ocultando otras cosas.

— Pero porque tú no conseguiste una pelirroja, mamá es rubia.— cuestionó la menor

—Me gusta romper las tradiciones, cariño.— este le guiño el ojo

Provocando que ambos rieran. Después de esa tarde padre e hija se pusieron a trabajar o mejor dijo Howard le explicaba cosas de su trabajo a la menor y ella escuchaba atenta.

Aún así no todo fue color de rosa, aquella felicidad solo duró hasta el invierno de 1991, cuando el matrimonio Stark tuvo que viajar en esas fechas debido a su trabajo pero gracias a la insistencia de un joven Anthony de ahora 21 años pidió que se llevarán a la menor.

— Por favor mamá, llevenla con ustedes... necesito mi espacio y tengo planes.— No es que no quisiera a su hermana pero Tony pasa por su etapa fiestera y no se sentía lo suficientemente maduro para cuidar a la niña de 6 años — Además es su época favorita del año.

— No la podemos llevar, es un viaje de trabajo no por gusto, Anthony.— Respondió su padre.— Ya es tiempo de que madures un poco, no eres un niño.

Eso basto para que ambos comenzarán a discutir por lo cual María tuvo que intervenir.

— Suficiente... Esta bien, nos llevaremos a la niña pero después de esto, ya deberás poner los pies en la tierra hijo.— sentenció la mujer pues por más que amara a su hijo, no podía solaparlo siempre.

Athenea finalmente de hizo presente en la sala trayendo consigo un pequeño paquete envuelto extrañamente .

— Te tengo un regalo Tony— la menor corrió hasta llegar con su hermano.

—¿Solo para mí?— tony esbozo una sonrisa y tomo aquella caja.

La entrada de la menor relajo notablemente la situación.

El castaño rompió la envoltura y abrió la caja, dejando ver un dije para hombre con la letra A
— Mamá y yo fuimos de compras, los ví en una tienda y los compré. Yo tengo el otro.— Señalo su dije con la letra "A"

Tony sonrio al ver ese detalle y abrazo a su hermana.

— Jamás me lo voy a quitar, lo prometo.— afirmó

— ¿Lo prometes por el meñique?.—

A Tony no le quedó más remedio que cerrar el trato por el meñique.

Ese momento fue el último de los cuartos pues horas después los mayores y la menor se marcharon, la única que iba emocionada era Thena pues sus padres le habían dicho que iban a comprarle todos los regalos que ella quisiera si se comportaba bien.

Pero eso jamás pudo pasar pues, mientras ella dormía en la parte trasera del auto una motocicleta a una gran velocidad con un sujeto armado comenzó a perseguir el vehículo de los Stark, para al final hacer que el patriarca perdiera el control y terminarán chocando, aquel golpe y ruido fue suficiente para que la menor se levantará de golpe.

—¿ papá, mamá? ¿que pasa?— no entendía que había ocurrido solo pudo notar el vidrio roto, el motor humeando y el nerviosismo en su madre y a su padre bastante herido.

Pero la menor soltó un grito cuando un hombre saco del auto a su padre.

—¡Papá!—  grito pero de inmediato María como pudo se pasó atrás para evitar que la menor viera aquella escena

— Por favor... Ayude a mi esposa e hija...— pero no pudo continuar pues aquel hombre mato al patriarca Stark.

El hombre no se detuvo ahí con un arma apuntando a las dos mujeres las bajo del auto, Thena estaba aterrada y María con su cuerpo intento proteger a su hija pero sus intento fueron en vano pues un disparo acabo con su vida.

La niña al ver eso dejo salir otro grito, dolor, miedo fueron los detonantes para que de su pequeño cuerpo una energía color roja emanara de ella lanzando así al hombre con brazo de metal lejos de ella y el cuerpo de su madre, lo último que pudo ver, fue como todo le dió vueltas y al final negro.

Al despertar, la menor estaba en blanco total y no solo eso pues la habitación en la que se encontraba era blanca, sin embargo a su lado una mujer de cabellos castaños la observaba.

— Finalmente despiertas cariño...— la voz de la mujer era dulce

— ¿Qué hago aquí?, ¿Quién soy? — la menor no recordaba nada, prácticamente estaba en ceros.

—Tu nombre es Athena Carter y eres mi hija.— aquella mujer le explicó lentamente— tuviste un accidente en casa y te golpeaste fuertemente la cabeza por eso estamos aquí.

Athena por más que intentaba recordar algo, fue nulo su esfuerzo pues nada aparecía y esa mujer se veía sincera, así que solo se limitó a sentir con la cabeza.

Desde ese día y por indicaciones de altos mandos la menor fue reasignada con la Agente Margareth Carter, el mismo S.H.I.E.L.D fue el encargado de hacer pasar la muerte de la Stark menor pero en el fondo Peggy había aceptado pues sabía lo mucho que significaba para Howard y Maria la menor.

El único que había quedado con la culpa y destrozado había sido Tony pues gracias a su insistencia el también había perdido a su hermana, desde entonces Tony Stark cambio totalmente pero siempre llevo consigo aquel dije en forma de A pues era su recuerdo de su hermana.

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Hasta aquí el primer acto de la historia, de aquí va a tomar un brinco temporal.